Armando Cabada no pudo ayer esquivar el tema de PASA, esto durante una conferencia de prensa que ofreció en la presidencia municipal. El alcalde dijo que los problemas que se presentaron el lunes pasado entre empleados y directivos de la empresa son internos.

El exconductor de noticias aplicó magistralmente la estrategia del «Tío Lolo» en el problema, y -emulando a Poncio Pilato- se lavó las manos olímpicamente.

El Municipio enfrenta una grave crisis con la prestación del servicio de aseo urbano que actualmente está concesionado a PASA, una empresa que fue de más a menos y que ahora brinda un servicio de pésima calidad a la comunidad juarense.

La situación es sumamente complicada porque, si el Municipio decidiera rescindir el contrato al proveedor en este momento, dejaría a la ciudad sin el servicio y la administración no cuenta, evidentemente, con la capacidad ni con los recursos para comprar camiones recolectores para sustituirlo.

Cualquier juarense sabe que un servicio deficiente de recolección de basura es un problema que le compete resolver al Municipio, pero los actuales funcionarios, empezando por el alcalde Armando Cabada, tienen más de un año cerrando los ojos ante este gran problema. No han tenido la voluntad para hacer cumplir a la empresa con su compromiso y el millonario contrato ya se les pagó.

Ahora los juarenses empiezan a entender por qué PASA no pasa. Resulta que al presidente municipal Armando Cabada ya no le quita el sueño el tema y solo espera librar la “bronca” en menos de un mes y heredarla a la administración que encabezará Cruz Pérez Cuéllar y, por supuesto, a todos los habitantes de esta frontera que, al final, somos los que sufrimos las consecuencias.

Por lo pronto, los de PASA seguirán teniendo la sartén por el mango, porque el Municipio no cuenta, ni se preocupó por contar, con las condiciones necesarias para hacer cumplir a rajatabla el contrato signado con la empresa recolectora, y no tiene -y nunca tuvo- un plan B para resolver tan tremendo problema.

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La gobernadora electa, Maru Campos, sorprendió con el siguiente mensaje que colocó en su muro de feis:

“Esta noche sólo quiero decir que, aunque con COVID, con ataques, con problemas mayúsculos, con los indolentes haciendo la vida imposible, soy profundamente BENDECIDA y por ende agradecida con Dios y con los ángeles del cielo y de la tierra que caminan a mi lado…”.

De inmediato empezaron los comentarios respecto a las palabras de Campos, sobre todo muchos se preguntaron quiénes son esos indolentes. ¿Acaso son los que le están entregando la administración?

Respuestas hubo muchas, y algunos consideraron que los indolentes son los funcionarios estatales y el propio gobernador Javier Corral Jurado, que a cuentagotas le está entregando su fallida administración.

El adjetivo que utilizó la gobernadora electa se aplica a “aquellos que tienen pereza y falta de voluntad para hacer una cosa”. El calificativo bien encaja en los responsables de entregar el Gobierno estatal que, a la fecha, no se han puesto las pilas para cumplir con esa obligación.

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El Gobierno federal, avalado por el estatal, anunció el regreso a clases presenciales a rajatabla, y la bronca de que las escuelas cuenten con las condiciones adecuadas en materia de salud para este regreso se la dejarán a los padres de familia, quienes tendrán que ser convencidos por los maestros. Así de crudo.

No se anuncia ningún programa especial para comprar implementos extraordinarios como termómetros, oxímetros, gel antibacterial, cubrebocas y otros artículos para limpieza que implicarán gastos extraordinarios. 

Como se ve el panorama, les dejarán la bronca a los padres de familia. Si en tiempo ordinario el personal de conserjería no puede con las labores de limpieza, mucho menos en tiempos extraordinarios como los que corren. Seguramente los del Gobierno no van a dar la cara.

Soterradamente, el magisterio no está de acuerdo con regresar a clases presenciales. En silencio, para no levantar olas, la base magisterial y los trabajadores de apoyo a la educación, no están de acuerdo con el retorno, pero sus dirigentes graciosamente ya lo aceptaron a nivel estatal y nacional, tanto la sección 8 y la 42.

Ya hasta jornadas de simulación del regreso a clases están organizando. Si hicieran un sondeo como ejercicio democrático, se enterarían de lo que piensa la base respecto al incumplimiento del compromiso de regresar hasta que tuviéramos semáforo en verde.

Por eso es por lo que han perdido su registro los partidos políticos que surgen del SNTE. Es ahí donde la base les cobra sus traiciones.

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La excandidata a la gubernatura del PRI, Graciela Ortiz, quiere pasarle factura a Maru Campos, esto por el apoyo brindado en la elección pasada, cuando pidió a los priistas votar por la candidata panista. Parece ser que la factura pretendida es grande, pero solamente Maru sabrá hasta qué monto político la reconocerá.

Ayer hubo una reunión virtual en donde participaron la gobernadora electa, los alcaldes electos del Revolucionario Institucional, así como Omar Bazán, Alejandro Domínguez, Ariel Fernández y Chela Ortiz. Según trascendió, el encuentro fue “institucional”. 

La reunión sirvió para que se vieran las caras los que hoy por hoy se disputan la dirigencia estatal del PRI. Por un lado está Alex Domínguez, de forma directa, y por el otro Omar Bazán, a través de Ariel Fernández.

Don Saúl González Herrera estaría revolcándose en su tumba al ver la forma en que Graciela Ortiz y compañía tratan de negociar el pago de esa factura. Hubo acuerdos en el encuentro, entre los que destacan el seguir reuniéndose con la gobernadora cada mes para ver asuntos relacionados con los municipios que serán gobernados por el PRI. Ya veremos cuánto aguantan.

Por lo pronto, en los cafés se comenta que la china Nora Yu, operadora política de Chela, anda presumiendo que le pedirán a Maru la presidencia de la Junta Municipal de Aguas… para ella.

La china está más que apuntada para este “sacrificio”, y hasta presume que es la única que tiene la experiencia necesaria para el manejo de la descentralizada. Muchos recuerdan su paso por la JMAS, cuando hizo su agosto en contratos asignados a los parientes del entonces gobernador César Duarte, y recuerdan también que la agente aduanal conectó su domicilio, clandestinamente, a la red general de agua para no pagar consumo. El colmo de la gandallez.

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Con boletín especial, Javier Corral Jurado cacareó que su Gobierno ya recibió la primera partida de apoyo económico de la Federación, luego de su insistencia al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Según informó Corral, las cuentas del Gobierno estatal recibieron 650 millones de pesos, mismos que servirán para pagar la nómina. Lo que no dijo el gobernador en sus declaraciones es que los recursos recibidos son anticipos que, seguramente, afectarán a la administración entrante.

El Gobierno federal anticipó recursos al que se va, pero no a la que llega en menos de un mes. Tampoco aclaró Corral que no se trata de apoyos extraordinarios, sino que son anticipos de las participaciones federales.

Es un cumplimiento que tardó mucho porque el gobernador litigó y gestionó esos recursos desde hace ya varios meses, y tuvo que venir el presidente a pararse el cuello y dar el visto bueno.

Los recursos pendientes que recibirá el estado no sacan del atolladero financiero a la administración, que arrastra deudas con decenas de proveedores y cientos de millones de pesos.