La llegada del Covid-19 a Ciudad Juárez desnudó al sistema de salud pública, no por falta de capacidad de médicos y enfermeras, sino por las decisiones de sus directivos.
En los meses que lleva la pandemia asentada en esta frontera se han contagiado más de 26 mil personas y más de 2 mil 400 han fallecido.
Los hospitales colapsaron, igual que el abasto de medicamentos y la plantilla del personal.
El martes 17 de marzo se confirmó el primer caso de Covid-19 en un varón de 29 años, originario de Nuevo Casas Grandes, que estuvo en Italia.
El paciente llegó a Juárez desde el 12 de marzo. Por lo tanto, se estima que esa es la fecha oficial de la llegada del Covid a Ciudad Juárez.
El virus avanzó rápido. En la semana epidemiológica número 12 -del 15 al 21 de marzo- se confirmaron un total de 5 contagios en todo el estado.
El 6 de abril se confirmaron la primeras dos defunciones en dos pacientes masculinos de 45 y 49 años de edad.
Covid en Juárez: se disparan los casos
En solo 30 días la pandemia aceleró para llegar a 95 contagios en la segunda semana de abril, más de la mitad radicados aquí.
A partir de ahí nunca volvió a presentarse una cifra de dos dígitos en el número de casos positivos.
El 1 de junio terminó la Jornada Nacional de Sana Distancia, pero las restricciones continuaron con la implementación del semáforo de riesgo epidemiológico.
El anuncio del supuesto fin de la jornada nacional se reflejó casi de inmediato con el primer pico de contagios.
Del 31 de mayo al 6 de junio se presentaron 810 contagios en siete días, más de la mitad en Juárez.
A partir del 15 de junio se informó que Juárez debía permanecer en el color rojo del semáforo.
Los contagios bajaron a la mitad, con un promedio 450 por semana a nivel estado.
Esa disminución motivó que a partir del 22 de junio se bajara la guardia, implementando aquí el semáforo naranja.
El efecto adverso fue inmediato, duplicando nuevamente los contagios con cifras de 800, 900 o hasta poco más de mil casos confirmados cada semana.
De nuevo más de la mitad ocurrían en esta frontera.
El cambio a amarillo… a pesar de las cifras
Contrario a lo que indicaban los números, en todas esas semanas de julio y agosto, el 31 de agosto la autoridad sanitaria determinó bajar aún más las restricciones pasando al semáforo amarillo.
Tenían más del doble de contagios que cuando inició el semáforo naranja y aún así optaron por relajar medidas.
En la semana 41 el número de contagios se duplicó a más de 2 mil en una semana, en la 42 fueron casi 4 mil y en la 43 se alcanzó el pico más alto con 4 mil 929.
El foco de atención siguió siendo esta frontera; aquí se concentraba el 60 por ciento de los casos positivos y también de las muertes.
Por qué las autoridades se esperaron hasta que la cifra se cuadriplicó para volver al semáforo rojo es algo que no tiene explicación razonable.
Fue hasta el 23 de octubre cuando decretaron que se volvía al semáforo rojo.
Aun cuando en la semana 48 los contagios en la entidad estuvieron por arriba de mil 300, en el inicio de la semana 49 decretaron volver al naranja.
Era el 1 de diciembre.
Cambios del semáforo que no corresponden a la realidad
Es importante recordar que cuando se decretó por primera vez ese color de semáforo -el 22 de junio- los contagios en la semana fueron tres veces menos.
En las semanas que mantuvieron el semáforo en color naranja y amarillo murieron mil 268 personas, la mayoría en Juárez.
Cuando decidieron volver al rojo en la semana 43 -segunda quincena de octubre- la pandemia ya estaba fuera de control con casi 5 mil contagios en solo siete días.
Solo en Ciudad Juárez al final del mes de octubre habían muerto 358 personas.
En esos días los hospitales colapsaron y tuvieron que anotar en lista de espera a pacientes que requerían atención urgente.
Nadie pudo evitar que en noviembre fallecieran otras 803 personas en esta frontera.
Aun cuando en ese mes hubo 15 días que se suspendieron actividades comerciales y se restringió la movilidad a partir de las 7:00 de la noche.
El Gobierno y su negativa para poner un laboratorio Covid en Juárez
Otro factor para el colapso fue que el Gobierno desdeñó el compromiso de traer un laboratorio para hacer pruebas aquí.
En otras partes del mundo se le dio prioridad a la aplicación de pruebas PCR porque era más fácil aislar a personas contagiadas que poner en cuarentena a toda una ciudad.
A la fecha, la mayoría de las pruebas de pacientes radicados en Juárez se envían al laboratorio de Chihuahua y tardan cinco días en enviar resultados.
Actualmente la ciudad fronteriza permanece en semáforo naranja decretado desde el 12 de diciembre pasado.
La movilidad de las fiestas de Fin de Año y Navidad son un mal augurio para lo que serán los primeros días de enero.
En vez de restringir actividades, aplicar más pruebas o mejorar la infraestructura de salud, las autoridades le apostaron a una campaña de miedo.
Incluso han reconocido que en cuanto a abasto de medicinas para pacientes Covid, los hospitales públicos no tendrán capacidad si se presenta un nuevo repunte.
A cuatro años de la aparición del Covid-19, el virus sigue aunque con menos muertes y un mejor control
El integrante del Colegio de Médicos, Lorenzo Soberanes, recuerda que es una enfermedad que llegó para quedarse
Por Hugo Chávez
Endometriosis: Una enfermedad común en las mujeres
Conoce más de sus síntomas, efectos y tratamiento
Por Marisol Rodríguez
Qué bueno que sepa Chihuahua, el tipo de gobernador medievo que teníamos: Maru Campos
La gobernadora celebró que haya un documental que aborde los hechos y testimonios de la “Operación Justicia Chihuahua” de Javier Corral en la administración pasada
Por Ana Juárez
Cinco destinos turísticos de Chihuahua son nominados a los premios “Lo Mejor de México”
Los ganadores se seleccionan por votación abierta a través del sitio web https://lomejormexico.com/
Por Redacción