“Ahora esta en riesgo la vida de mi hijo por culpa de ellos”, fueron las palabras que expresó Manuel González, de 36 años, padre del pequeño de un año siete meses que se encuentra en riesgo de morir debido a la atención negligente de autoridades de Salud e IMSS en Ciudad Juárez.
Después que a inicios del año les fue negada la atención por la cancelación del Seguro Popular él y su esposa decidieron ir por la vía del amparo para proteger la vida de su hijo, pero aún así, la respuesta de las autoridades fue lenta.
Entrevistado la tarde de este viernes afuera del Hospital Infantil, en donde ya le fue suministrada al pequeño otra serie de quimioterapias, Manuel dijo que no tiene ninguna queja contra los médicos y enfermeras que han atendido a su hijo, pero sí contra las autoridades.
“Yo lo que les digo es que en este tipo de casos deben de tener más cuidado, porque es la vida de un niño la que esta en juego y pues con la salud de un niño no se juega”.
“No es de que ahora le quito así el medicamento nomas porque los gobiernos dicen; deben de tener más conciencia de lo que hacen; (…) ahora esta en riesgo la vida de mi hijo por culpa de ellos”, reclamó.
Su esposa, Leonor Edith López Tenorio, de 25 años, presentó el jueves una denuncia ante el Poder Judicial de la Federación en la que responsabilizó a las autoridades médicas de Chihuahua y al Seguro Social por no contar con protocolos de urgencia en casos como el de su hijo.
“Solicito se requiera a las autoridades responsables el cumplimiento de la suspensión de plano con carácter de urgente en virtud del riesgo grave que vive mi hijo”, expuso.
Lo anterior debido a que ya se había ordenado por parte del Poder Judicial que se les diera la atención médica con carácter de urgente, a través de un amparo, pero con todo y la orden judicial, los responsables de salud tanto del estado como de la federación, no respondieron con eficacia.
De acuerdo a la nueva denuncia, las autoridades de salud del gobierno del estado de Chihuahua incumplieron los términos del juicio de garantías.
El representante de las familias afectadas, el estudiante de Derecho David Silva, dijo a Norte Digital que el recurso iba dirigido contra el director del Hospital Infantil de Especialidades Guillermo Pérez, quien al verse presionado por la acción de los padres, mandó al pequeño de un año siete meses a que recibiera un transplante de médula en un hospital de tercer nivel fuera de esta frontera, pero sin los estudios pre operatorios necesarios.
Al llegar a la Unidad Médica de Alta Especialidad número 25 del IMSS en Monterrey, Nuevo León, los médicos de aquella clínica informaron a la familia que no se podía hacer ninguna intervención porque faltaban los estudios previos, los cuales son un procedimiento básico en cualquier hospital, relató el estudiante David Silva.
Después que tuvo que volver del hospital de especialidades del IMSS en Monterrey porque no le pudieron hacer el transplante de médula, el pequeño entró a recibir una nueva serie de quimioterapias en el Hospital Infantil de Especialidades de Ciudad Juárez.
En dicho nosocomio el médico tratante le dijo a la madre del pequeño que si no se lograba remitir el nivel de leucemia, ya no sería posible realizar el transplante de médula.
Entonces no habría más alternativas para que el menor sobreviva.
En el oficio de denuncia que fue recibido en el juzgado federal la noche del jueves, del cual Norte Digital conserva una copia, Leonor Edith hizo una relatoría de todos los retrasos que sufrió su hijo desde que en el Hospital Infantil les informaron que ya no tenían derecho a la atención por la cancelación del Seguro Popular.
Recordó que después de la protesta el 16 de enero afuera del Hospital Infantil de Especialidades, el día 20 del mismo mes se reunieron con el delegado federal Juan Carlos Loera de la Rosa y el director médico del gobierno estatal Arturo Valenzuela.
Ambos funcionarios se comprometieron a que el niño sería operado por el IMSS.
Un documento del 22 de enero firmado por el especialista Jesús Rubén Ornelas Ceballos, reconocido oncólogo pediatra en esta frontera, hacía constar que el paciente se encontraba “con mínima residual positiva”, lo cual significaba que podía ser trasplantado con éxito.
Pero la burocracia del Seguro Social y la des coordinación de los gobiernos estatal y federal aquí, echó a perder el plan médico.
Todavía se tardaron ocho días más para tener al niño en el referido hospital de especialidades de Monterrey en donde al hacer un chequeo encontraron que los niveles de leucemia se habían elevado de nuevo.
La esperanza de los padres es que la nueva quimioterapia logre bajar esos niveles y que -ahora sí- el Seguro Social y el gobierno del estado de Chihuahua actúen con rapidez para que el niño sea transplantado.
Norte Digital buscó al director médico de la zona norte Arturo Valenzuela y al director del Hospital Infantil de Especialidades de Ciudad Juárez Guillermo Pérez Gutiérrez, para solicitarles una versión oficial, pero ninguno estuvo disponible hasta el cierre de esta nota.
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