Contra reloj y con un precario apoyo gubernamental, docentes de primaria y padres acudieron a limpiar las aulas ante el inminente regreso a clases presenciales. La jornada de limpieza busca reducir el riesgo de contagio en las instalaciones; sin embargo, la preocupación por la salud de los pequeños sigue latente.
La encrucijada de Cruz y la residencia asegurada
24 abril, 2024