Además de los impedimentos propios por carecer de documentación que les permita cruzar a los Estados Unidos en busca de asilo y obtener así una mejor oportunidad de vida, decenas de migrantes tienen que protegerse de los rayos del sol y las altas temperaturas.
Uno de esos espacios es el puente que se localiza en el cruce del bulevar Cuatro Siglos y la avenida Antonio J. Bermúdez, donde improvisan campamentos en donde periódicamente son retirados por las autoridades, debido al riesgo que representa permanecer a la intemperie, principalmente para los menores de edad.