Para el Consejo de Planeación Urbana Municipal (CPUM) el gobierno debe resolver a fondo todos los aspectos técnicos del BRT 2 antes que otra cosa.
Esto significa concluir obras pendientes, garantizar la funcionalidad y sincronización de semáforos, y la funcionalidad del equipamiento electrónico, antes de pensar en echarlo a andar.
“Hay tanto factores físicos no terminados que deben resolverse primero que nada; independientemente de otros temas, primero deben cerciorarse que técnicamente las instalaciones estén listas para prestar el servicio”, comentó al respecto Hugo Venzor, presidente del CPUM.
Sin quitar importancia a los asuntos que tienen que ver con el aspecto operativo, Venzor pidió no distraer la atención de los detalles estructurales.
“No debe coexistir con líneas de transporte tradicionales”
“Probablemente falte mucho para decidir los cambios en la Ley de Transporte y de quién va a depender al final el BRT2; entonces que aprovechen ese tiempo para terminar de resolver también lo técnico, porque de nada serviría si la infraestructura no está lista para funcionar”, indicó.
Consideró que lejos de ver como problemas los aspectos que están obstaculizado el avance de la obra, estos deben ser vistos como áreas de oportunidad.
En este aspecto englobó la señalización pendiente, la funcionalidad de los retornos, y la instalación total y funcionamiento del equipo de recaudo, entre otros.
“Si ya tuvieran listo todo lo relacionado con la operación, no podrían echar a andar el BRT 2 porque la infraestructura no está lista; es así de simple, primero tienen que terminarla”, reiteró.
Un factor que consideró esencial es que, una vez que el sistema entre en operaciones, no debe coexistir con las líneas de transporte tradicionales.
“Vamos a ver su funcionalidad una vez que inicie el servicio y retiren las llamadas ruteras que se van a convertir en rutas alimentadoras; el problema sería si en lugar de quitar las ruteras, estas continuaran, ahí sí preguntaríamos qué está pasando”, dijo.
Por su parte, Mario Boisellier, del Colegio de Ingenieros Civiles de Ciudad Juárez y del CPUM, destacó el contraste existente entre los dos aspectos.
“En lo técnico vemos un gran avance, siguen trabajando en las estaciones y en la corrección de errores y fallas anteriores; en lo que yo veo un retroceso es en lo operativo, donde se siguen retrasando los acuerdos para ver cómo va a funcionar el sistema”, indicó.