Tras recibir una sentencia de 220 años de prisión por presuntamente asesinar a una familia de ocho miembros, la esposa de uno de los detenidos mencionó que se trata de un caso armado en el que los detenidos fueron “chivos expiatorios”.
Indicó que en todo momento fueron torturados para que hicieran declaraciones que no eran apegadas a la realidad, ya que en ningún momento atacaron a las ocho personas que se dijo el 17 de noviembre de 2013, en la colonia Morelos Zaragoza.
Brenda Vázquez mencionó que en el caso particular de su esposo Josué Medrano Rubio, sentenciado hace unos días a 220 años de cárcel, se sentenció a un inocente.
Mencionó que su marido nunca conoció a las víctimas y mucho menos hubiera sido capaz de asesinarlas.
Consideró que seguramente por la presión de aquel entonces, las autoridades estatales decidieron arrestar a cualquier persona, solamente para justificar que habían sido eficientes, sin embargo, al detener a gente ajena a los hechos, lo que indica es que los verdaderos homicidas siguen libres, mientras a las familias que detuvieron les han destrozado la vida.
Persiguiendo la justicia
La mujer mencionó que su objetivo es que “por fin esto sea esclarecido, queremos justicia para las víctimas de este horrendo crimen y también para nosotros, porque no solo acabaron con la vida de esta familia, sino que también están acabando con las nuestras”.
Agregó que “queremos que esto llegue a las personas correctas que nos den voz y por fin hagan justicia”.
“No es justo que después de tanto tiempo nos sigan robando la paz y la tranquilidad de la familia, no es justo que Josué siendo inocente esté pagando por un crimen que no cometió”.
De acuerdo con la esposa de Josué, tienen varias pruebas de que él no participó en el homicidio múltiple, ya que el día señalado estuvo en la fiesta de cumpleaños de una de sus hijas, además de tener una camioneta descompuesta, en la que según los investigadores se habría desplazado con sus supuestos cómplices ese día, de lo cual tienen testigos.
Pruebas sembradas… la tortura
Dijo que los elementos estatales se introdujeron en aquel tiempo a realizar cateos ilegales a su domicilio y de su suegro, sin ningún mandamiento judicial para llevarse objetos diversos, entre lo cual iba un zapato de su esposo al que le sembraron una gota de sangre de las supuestas víctimas.
Comentó que una vecina de la casa de las víctimas, entró en aquel tiempo a sacar a una bebé sobreviviente y narró que su calzado lo tuvo que dejar en el lugar porque había charcos de sangre, lo cual contrasta con la “gota” que apareció misteriosamente en el calzado de Josué, siendo que debería estar en todo caso todo manchado de rastros hemáticos.
Mencionó que el primer detenido, quien puso a los otros tres como sus presuntos cómplices, mostró al juez en una audiencia, las marcas de la tortura y acusó directamente al agente del Ministerio Público que era él quien había avalado los golpes y que había elaborado el escrito con una declaración que se le atribuyó a él injustamente.
“El MP jamás negó lo que Jesús Daniel declaró ni se defendió”, dijo Brenda.
Aparte de Jesús Daniel, fueron detenidos su concuño Édgar Luján Guevara y su suegro José Alfonso Medrano Vázquez.
Comentó que Édgar al final fue absuelto y liberado, pero murió al poco tiempo, debido a tanto golpe que le dieron en la cabeza.
Brenda Vázquez exigió que se revise el caso donde involucraron injustamente a personas inocentes como su esposo.
Sin identificar aún presunto linchado por acosar a menores
Fue sometido a golpes el sábado por la noche en el fraccionamiento Praderas del Sol
Por Teófilo Alvarado
Matan a hombre en la Aldama
Primeros reportes indican que el crimen se cometió en el cruce de las calles Francisco Sarabia y Cromo
Por Redacción
Asesinan a golpes a hombre en la Revolución Mexicana
El incidente ocurrió sobre las calles General Orestes Pereyra y Felipe Berriozába
Por Redacción
Vive Juárez otra madrugada violenta con tres asesinatos
Dos encobijados y un acuchillados en tres lugares distintos, fueron reportados por las autoridades
Por Redacción