Chihuahua.- Para cambiar la flotilla de camiones, concesionarios del sistema de transporte público solicitaron financiamiento por Gobierno del Estado ante la imposibilidad que tienen de hacerlo con recursos propios, dio a conocer el secretario general de Gobierno, César Jáuregui Robles.
Aunque de momento las finanzas de Gobierno del Estado no permiten las condiciones para solventar este financiamiento, indicó que se encuentran en proceso de análisis de diversos esquemas para que se puedan pagar las unidades.
La semana pasada Jáuregui encabezó la reunión del Consejo Consultivo de Transporte (CCT), en la que los concesionarios presentaron un informe para justificar las razones por las que consideran necesario un incremento en las tarifas del sistema de transporte público.
En la presentación señalan que el impacto que ha generado el aumento en el diésel los tiene en estos momentos en números rojos, sin posibilidad de dar el mantenimiento a las unidades, cuyas condiciones mecánicas se notan cada vez más deterioradas.
Pero los integrantes de dicho órgano, que integran representantes de la sociedad civil, empresarial, estudiantil y funcionarios de los tres niveles de Gobierno, consideraron que por las condiciones en que se presta el servicio no es posible en estos momentos aumentar las tarifas.
El funcionario explicó que los concesionarios solicitaron establecer un sistema de finanzas o que el Gobierno estatal funja como aval para la adquisición de las nuevas unidades, que de empezar a circular representarían entonces el incremento en las tarifas.
Hacen a un lado compromiso
“Estamos viendo esquemas de financiamiento, porque el Estado finalmente no tiene capacidad financiera, ni siquiera con carácter secundario como es el caso de ser aval”, abundó.
Consideró que la petición de los concesionarios difiere del compromiso hecho tiempo atrás, en que aseguraron que la renovación de las unidades estaría a cargo de los propietarios de las concesiones sin apoyo de las autoridades.
Afirmó que la intervención del Estado en este proceso no formaba parte del compromiso, pero quizá la devaluación del peso frente al dólar y el aumento en los combustibles ocasionó en automático un cambio en las condiciones.
Añadió que las quejas de la ciudadanía persisten en el sentido de mejorar los recorridos de las rutas alimentadoras, independientemente de las condiciones de las unidades, por lo que una empresa colombiana se ofreció para dar asesorías respecto a la operación del sistema BRT, que en ciudades como Bogotá están consolidados.