La coalición liderada por Estados Unidos que combate al autodenominado Estado Islámico (EI) reclamó a Rusia que cese sus ataques contra la Oposición en Siria y que se centre en luchar contra los milicianos islamistas.
En un comunicado conjunto, los países miembros de la coalición expresaron su profunda preocupación por los bombardeos de Moscú.
El documento sostiene que las acciones de Rusia constituyen una escalada del conflicto y solo acarreará más extremismo. A la vez que se difundía el texto, Moscú informaba de una nueva oleada de ataques en áreas en las que la presencia del EI es escasa.
«Expresamos nuestra profunda preocupación por la actuación militar de Rusia en Siria, especialmente los ataques aéreos en Hama, Homs e Idlib de ayer, que causaron bajas civiles y no tenían como objetivo al Estado Islámico», dice el texto, suscrito por Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Alemania, Qatar, Arabia Saudí y Turquía.
«Pedimos a Rusia que cese inmediatamente sus ataques contra la Oposición siria y los civiles y que centre sus esfuerzos en combatir al Estado Islámico».
El comunicado llega el mismo día en que Vladimir Putin da en París a Francois Hollande las primeras explicaciones directas a un Mandatario occidental sobre su actuación en Siria en apoyo del dictador Bashar Al Assad.
Los Presidentes de Rusia y Francia, los dos últimos países en intervenir militarmente en Siria con una diferencia de tres días, organizaron la reunión para avanzar en los acuerdos de paz en Ucrania, pero el polvorín sirio estará sobre la mesa. A la cita acuden también la Canciller Angela Merkel y el Presidente de Ucrania, Petro Poroshenko.
Convertido en protagonista e interlocutor indispensable en Medio Oriente, Putin mantuvo este mediodía una entrevista bilateral de hora y cuarto con Hollande, quien lo recibió sonriente en las escalerillas de el Elíseo.
El líder ruso llegó a la capital francesa en pleno auge de las tensiones entre Moscú y Occidente. Francia, junto a Estados Unidos, es uno de los países que observa con más suspicacias esos ataques aéreos rusos.
Por los objetivos elegidos, no centrados en el EI, y por su radical discrepancia sobre el destino de Assad, a quien París excluye de cualquier solución al conflicto.
Tras los primeros bombardeos rusos del miércoles, Laurent Fabius, Ministro francés de Exteriores, declaró que toda incorporación a una alianza militar en Siria será bienvenida, pero si va dirigida contra el EI y solo contra grupos terroristas y, a la vez, cesan los ataques a civiles y se emprende un proceso político que implique la salida de Assad.
Es el mismo mensaje que Hollande trasladó ahora a Putin, señalan fuentes oficiales francesas.
El jueves, según datos aportados por Moscú, fueron atacados objetivos del EI en Raqqa. En París, fuentes diplomáticas señalan que también golpearon a grupos rebeldes y otros próximos a Al Qaeda en las proximidades de Hama y Homs.
París desea que, si se cumplen los acuerdos sobre Ucrania, Europa levante las sanciones contra Rusia Este viernes, aviones rusos lanzaron 18 operaciones aéreas en Aleppo, Idlib y Hama, donde la presencia de combatientes del EI es escasa.
El Embajador ruso en Francia, Alexandre Orlov, fue explícito.
«Hemos dicho abiertamente que hemos ido a Siria para aportar ayuda aérea a una organización regular del Ejército regular sirio que se bate contra el EI», aseguró.
En declaraciones a la emisora France Info, Orlov señaló que la irrupción militar de Rusia en apoyo de su mejor aliado en Oriente Próximo es también una invitación a coordinar esfuerzos con otros países.
«Estamos dispuestos a ir más lejos. Se puede llegar incluso a repartir objetivos».
El paso dado por Putin, que incluye una acción combinada con Irak e Irán, no augura esa coordinación, sino mayores tensiones en la región.
Frente a su férreo apoyo Assad, a quien también ha armado desde que se inició el conflicto hace más de cuatro años, Hollande acaba de insistir esta semana en Naciones Unidas que no puede ser parte de la solución quien ha sido el origen del problema.
París sostiene que la solución debe pasar por una negociación con todas las partes, incluidos miembros del régimen sirio, pero que la salida de Bashar Al Assad es una condición ineludible. Hollande se siente apoyado en esta estrategia.
«No puede haber una solución política con Bashar. Me opongo. Y Obama se opone. Y otras potencias se oponen. Los rusos deben sacar las consecuencias», afirmó.
La operación militar lanzada por Rusia se prolongará durante tres o cuatro meses, según dijo a Europe 1 el presidente de la Comisión de Exteriores de la Duma (Cámara baja rusa), Alexei Pouchkov.