De octubre de 2020 a octubre de 2021, la Patrulla Fronteriza detuvo en el sector de El Paso a 23 mil niños no acompañados que cruzaron a suelo estadounidense con traficantes de humanos. El dato muestra diáfanamente la dimensión del problema migrante que se vive en la frontera de Juárez, pese a que es minimizado, e incluso ignorado, por las autoridades migratorias mexicanas.
La práctica de enviar niños y adolescentes solos a los Estados Unidos, se hizo común a partir del 2018, año en que aparecieron en toda la frontera las primeras caravanas migrantes, con flujos de cientos y hasta miles de personas en movimiento.
De acuerdo con el informe de Gloria Chávez, agente en jefe de la Patrulla Fronteriza, el número de menores interceptados en el año fiscal 2021 representa una cifra récord en toda la faja fronteriza.
Lo más grave es que los agentes han encontrado que los traficantes de personas tratan de hacer pasar a jóvenes mayores de edad como menores, porque tienen un tratamiento distinto a los adultos, ya que no son deportados y pasan por un procesamiento especial.
De esta forma, los coyotes instruyen a los mayores que aparentan menos edad, y los convencen de que solamente con este engaño pueden llegar a su destino, una vez que son reclamados por un pariente que resida legalmente en la unión americana, lo cual también les representa una ganancia.
La Unidad de Inteligencia de El Paso, la Rama de Operaciones Extranjeras y la oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), que están monitoreando y detectando las nuevas tácticas de los traficantes, han encontrado que el número de adultos que tratan de pasar por menores va en aumento y no se arredran, a pesar de las sanciones punitivas que establecen las leyes migratorias estadounidenses.
Las personas que se hacen pasar por menores se enfrentan a cargos federales por declaraciones falsas y conspiración para defraudar a los Estados Unidos, que tienen sanciones de hasta 5 años de cárcel, además de multas.
Del primero de octubre a la fecha, el flujo de migrantes no acompañados no ha disminuido, así como tampoco el número de adultos que se hacen pasar por menores, que en este corto periodo suman 55 personas. Solamente las autoridades migratorias mexicanas no ven ni reconocen el problema que pasa todos los días, a cualquier hora y frente a sus narices.
Veintitrés mil menores migrantes cruzando en estas condiciones la frontera, significan mil 916 por mes y 63 por día, que no pueden pasar desapercibidos porque siempre van en grupos y no son invisibles.
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No todo es crisis ni grilla tóxica en la Universidad Autónoma de Chihuahua. Mientras en la capital se deschongan, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de Juárez se vestirán de gala los días 17, 18 y 19 de noviembre, con el Primer Simposio Virtual de Relaciones Internacionales, donde se analizarán los escenarios geopolíticos regionales y locales.
Las conferencias donde participarán ponentes de la Unión Europea, Francia, Chile, República Dominicana y México, se transmitirán vía Facebook Live. Este simposio tiene el objetivo de discutir, desde la perspectiva académica, los principales fenómenos económicos, políticos, sociales y de salud, producto del sistema internacional, como pueden ser las consecuencias de la pandemia y la distribución desigual de la vacuna, la crisis en la industria automotriz por falta de chips, el rompimiento de la cadena de suministro, entre otros temas que afectan a nivel local, regional y nacional.
El interesante foro del conocimiento, que deberían aprovechar los gobernantes en turno y sus equipos, tratará también temas de la realidad mundial sobre democracia, seguridad, migración, gobiernos extremistas, etc.
César Nevárez Arguijo, el maestro que coordina esta actividad, hizo hincapié en que uno de los objetivos es buscar la interacción de sus estudiantes con personajes con experiencia profesional en escenarios políticos y sociales, con reconocimiento a nivel nacional e internacional.
Por ello tendrán la participación de investigadores y académicos de Chile, Francia, República Dominicana y México. La discusión de los temas será encabezada por los diplomáticos Eduardo Roldán Acosta, Gautier Mignout, embajador de la Unión Europea en México, y Jean-Pierre Asvazadourian, embajador de Francia en nuestro país.
La liga para acceder al simposio es https://www.facebook.com/fcpysuach.
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Si la pandemia modificó el sistema de educación en el mundo, los gobiernos estaban obligados a implementar programas especiales de educación a distancia, que al menos mantuvieran el nivel de aprovechamiento de los alumnos y no lo redujera.
México no fue la excepción en la nueva normalidad educativa que generó el coronavirus, pero en lugar de avanzar a pesar de la crisis, como era obligado hacerlo y como lo hicieron en otros países, la Secretaría de Educación Pública ha ordenado a los titulares del ramo de todos los estados de la República Mexicana, que no reprueben a estudiantes que van de primaria a secundaria y de secundaria a preparatoria.
Una disposición digna de Aunque Usted No lo Crea, porque significa nada más y nada menos que aprobar a quienes, teniendo la obligación de estudiar en el confort de sus casas, no lo hicieron, y aunque están en condición de reprobados, pasarán de grado.
El oficio número DGAIR-DGDC/391/2021 fue enviado el miércoles 10 de noviembre a los titulares de Educación de las entidades federativas, y establece, textualmente: “La calificación mínima que deberá registrarse en las boletas de evaluación de los educandos del nivel educativo de primaria y secundaria que hayan sido valorados por el docente, no podrá ser inferior a 6”.
La medida no explica como podrán mantenerse en un grado superior todos aquellos alumnos que no pudieron pasar el grado inmediato inferior. En otras palabras, cómo se justifica que alumnos reprobados escalen a otro nivel educativo si no aprobaron ni merecieron su pase automático.
O sea que, los primeros grados de secundaria y bachillerato serán integrados en el nuevo ciclo escolar con alumnos rezagados, que van a tener una calificación regalada y de panzazo, y alumnos aplicados, que pese a la contingencia de salud cumplieron con sus estudios para avanzar.
Aquí no vale que después salgan a decir que se les dio un 6 de calificación a todos los reprobados para evitar la deserción escolar, porque entonces estaremos frente al escenario de un sistema educativo de simulación, donde lo que menos importa es el aprendizaje y aprovechamiento de los alumnos, sino que aparezcan en las estadísticas de escuelas con población escolar completa.
En las redes sociales ya comenzaron las protestas de sociedades de padres de familia que no están de acuerdo con la medida, porque se incentiva la irresponsabilidad en el ámbito escolar.
“Por andar regalando calificaciones aprobatorias, lamentaremos el bajo nivel académico de nuestros futuros profesionistas, pero será muy tarde para corregirlo”, escribió uno de los inconformes con la medida.