Los personajes morenistas antagónicos del momento, Juan Carlos Loera y Cruz Pérez Cuellar, tendrán por fin, mañana miércoles, sus cinco minutos juntos en un acto público y previamente concertado entre el candidato a la gubernatura y el aspirante a la alcaldía.
Entonces, si la maledicencia no se les atraviesa, Juan Carlos y Cruz coincidirán, por primera vez, en un mismo lugar como aspirantes de Morena a un cargo de elección popular.
El evento donde se dará el encuentro consiste en la inauguración de la casa de campaña del senador con licencia, allá por la curva de San Lorenzo, que parece zona de guerra y bombardeos, gracias a las controversiales obras del transporte semimasivo.
El esperado momento ocurrirá justamente en un escenario de empate técnico entre los dos candidatos punteros para la gubernatura que, de acuerdo con el reciente sondeo de Massive Caller, le da una ventaja de apenas 2.3 puntos a Maru Campos sobre Juan Carlos Loera. Tal vez ese empujón adicional que le falta a Juan Carlos sea precisamente el que le pueden dar los seguidores de Cruz.
De cualquier forma, el candidato a la alcaldía le apuesta, en su primera semana de campaña, a amarrar su estrategia electoral con la visita de los dos operadores políticos más sólidos que en este momento tiene Morena a nivel nacional: el zacatecano Ricardo Monreal, coordinador parlamentario en el Senado e impulsor de la candidatura de su homólogo chihuahuense, primero para la gubernatura y ahora para la alcaldía.
Después, el lunes 10 de mayo, estará de visita en esta frontera el líder nacional de Morena, Mario Delgado, con el propósito de participar en la campaña de Juan Carlos Loera y también en la de Pérez Cuéllar. Es muy factible que en este momento, por segunda ocasión, compartan el mismo escenario los candidatos a la gubernatura y a la presidencia municipal.
La visita de Delgado y de Monreal a Juárez no es casual; se presenta en un momento clave, luego de que El Financiero reportó una caída de cinco puntos (39 a 34) en las preferencias (generales) de los electores sobre los candidatos de Morena en Chihuahua.
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Por más que le buscan, los electores difícilmente encuentran en la mayoría de los candidatos a distintos cargos alguna propuesta hecha con seriedad y con un verdadero trasfondo de interés público. Ciertamente, existe una ausencia de propuestas casi generalizada que resulta ofensiva.
A estas alturas de la competencia electoral todavía no se alcanzan a ver con claridad una serie de propuestas estructuradas y que aborden las principales problemáticas que preocupan a la ciudadanía. La seguridad, la salud, el desarrollo económico, la migración, entre otros temas aparecen desdibujados en los discursos, diluidos entre banalidades y lugares comunes.
Muchos de los candidatos se han concentrado en los “clásicos” actos de cruceros y en las redes sociales, y nada más. Esto los retrata de cuerpo entero. Puede parecer algo trivial, pero no lo es. Mirone augura que estamos en peligro de contar, en muchas de las posiciones, con funcionarios y representantes populares de medio pelo para abajo.
Veamos. A nivel estatal y municipal el tema financiero, de endeudamiento, domina la realidad gubernamental. Aún así, nadie está hablando de esto, ni mucho menos elaborando propuestas puntuales al respecto. Escuchamos hablar de honestidad, de austeridad, pero no de ideas aterrizaras que puedan encarar los tremendos retos y problemas que se vienen.
Para muestra un botón. Las obras del transporte semimasivo de la ruta troncal II del Bravobus y los pasos a desnivel, que tantas molestias causan a los fronterizos por su lenta ejecución, tienen una relación más que directa con la falta de recursos económicos que luego conlleva a una mala planeación de las obras.
De esto parecen no darse cuenta muchos de los candidatos y solo se concentran en “el pan y circo” electoral. Allá ellos.
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Martín Chaparro te eliminó, Martín Chaparro te eliminó, Martín Chaparro te eliminó… y así, sucesivamente, fueron eliminados abruptamente hasta 100 morenos del grupo de WhatsApp del partido guinda en Juárez.
Se trata de exmilitantes de cuna morenista que recientemente se pronunciaron a favor del candidato a la presidencia municipal del PAN Javier González Mocken, así como de la candidata a la gubernatura Maru Campos, luego de que en el partido de sus amores llegaron arribistas como Armando Cabada y otros personajes de la mafia del Prian.
Algunas fuentes le comentan a este Mirone que el profe Chaparro se cansó de ver a todas horas del santo día, fotos y más fotos de Mocken en ese grupo, que debería ser usado exclusivamente para compartir información de Morena y sus candidatos, y no de los panistas.
Así que le colmaron el plato y no le quedó otra que eliminar, de uno por uno, a los incómodos excamaradas que en el pasado ayudaron a que el sueño de Morena se convirtiera en una realidad en Juárez y, después, en una horrible pesadilla para ellos.
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Ana Luisa Herrera Laso, una de las mujeres de más confianza que aún permanecen en el desvencijado gabinete de Javier Corral Jurado, podría tener los días contados al frente de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, pues pretende ocupar la patente de la notaría pública 12 que se encuentra vacante en tierras chihuahuitas tras el fallecimiento de su señor padre, Armando Herrera Acosta.
En efecto, Ana Luisa Herrera ya comunicó al gobernador su intención de buscar la titularidad de la notaría, lo que significa otra baja en su equipo de trabajo. Corral aseguró que no metería las manos para favorecer a su secretaria del Trabajo, pero nadie le cree.
Corral dice que no le dará el “empujoncito” a Ana Luisa Herrera para que obtenga la notaría; sin embargo, con el nivel de desconfianza que se carga últimamente el gobernador, será preferible esperar a ver si cumple. La funcionaria estatal tiene 90 días para renunciar al cargo, antes de contender por la notaría 12.
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Los que no descansaron ni sábado ni domingo fueron los directivos de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Uach. Están muy acostumbraditos a una semana activa de lunes a jueves y al relax de fin de semana, que para ellos inicia en viernes.
Anduvieron muy activos con el desfiladero de candidatos en el Seminario Permanente de Estudios Electorales. El sábado se pasearon por la facu Miguel Riggs Baeza, candidato a la alcaldía de Chihuahua por Movimiento Ciudadano, y Sergio Carrillo Escudero, candidato del PRI; el domingo les tocó a Marco Bonilla, aspirante del PAN a la presidencia municipal chihuahuita, y a Brenda Ríos Prieto, candidata a la gubernatura de Chihuahua del Partido Verde.
Lo que sí hay que reconocer a la facultad, que dirige el doctor Abraham Paniagua, es el empuje para que, por esa institución desfile la gran mayoría de los candidatos que han tenido una charla directa y de frente con los jóvenes alumnos y académicos. Lo que habla bien de un espacio de apertura de la universidad a la sociedad.
El seminario tiene ya 15 años y permite que los candidatos a la gubernatura y las presidencias municipales de Juárez y Chihuahua expongan sus ideas.
Ayer estuvo en ese foro de la comunidad universitaria el candidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia municipal de Juárez, Rodolfo “el Güero” Martínez Ortega. Nos dicen anda muy motivado porque va a retar a sus contrincantes a tres debates públicos, para la confrontación de ideas.