Iniciando el año comenzará la redada contra los exfuncionarios de la pasada Administración que dejaron huellas de sus pillerías, transas y toda clase de malandrinadas cometidas al amparo del corralato; comenzando por los falsificadores, y siguiendo con los MPs que montaron todo el entramado de los Expedientes X, fabricando pruebas y testimonios, pasando por incondicionales como el exrector Fierro, para cerrar con el despido de los voraces inspectores de Gobernación que asolan la frontera.
Por lo pronto, es un hecho que primero van por los falsificadores de los supuestos recibos de la nómina secreta, con los que pretendieron implicar al notario Luis Raúl Flores, para descarrilar la candidatura de la ahora gobernadora Maru Campos.
Con las periciales que han salido a la luz pública, que determinan que los famosos recibos fueron falsificados, con la firma y sellos del Notario Número 4, los presuntos autores del montaje, Ana Herrera Lasso y Daniel Olivas Gutiérrez, que niegan los hechos, son candidatos hoy a dos becas para una estancia, todo incluido, en el centro de reflexión, meditación y retiro de Aquiles Serdán.
Si Ana y Daniel aún tenían la esperanza de lograr las notarías que les prometieron en el corralato, presuntamente a cambio de los “sucios servicios” prestados, muy lejos están ahora de la patente y muy cerca del desprestigio total en el ejercicio de su profesión.
A menos que soltaran la sopa (al estilo del sapo Jaime Herrera) y revelaran por órdenes de quién o quiénes fueron elaborados los recibos, los dos corralistas ya pueden dar por asegurado su pase VIP al famoso CeReMeRe, donde Daniel podría poner en práctica sus conocimientos básicos de carpintería, que aprendió cuando trabajó en la construcción en Denver, Colorado.
No debe extrañarnos que el exdiputado suplente de Juan Blanco trate de evitar su pase a Aquiles Serdán, y ande ya buscando sus viejos contactos en Denver, para regresar a un oficio que le hubiera dejado más satisfacciones y menos problemas.
Por lo pronto, ayer le informaron a este Mirone que Daniel dejó la notaría donde trabajaba en calidad de aspirante al notariado.
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Otros que están poniendo sus barbas a remojar son los que participaron con la barzoniana corralista Lucha Castro, en lo que se conoce públicamente como el batidero judicial.
Aunque la mujer se encuentra en España, hasta allá la pueden alcanzar las carpetas de investigación que ya iniciaron en la Fiscalía General del Estado, indagatorias que versan sobre la frondosa telaraña que tejió Lucha en complicidad con César Augusto Peniche, para tenderles la camita a los duartistas y fincarles responsabilidad hasta con carpetas inventadas.
Por eso se escucha con insistencia que, a todos los agentes del Ministerio Público y jueces que estuvieron involucrados en los Expedientes X, que son alrededor de 30 según las picudas fuentes mironianas, les van a poner la cazadora.
Los abogados de Antonio Tarín, Gerardo Villegas, Jesús Esparza y Marcelo González Tachiquín, ya preparan la contraofensiva legal, que promete emociones fuertes y mucha información respecto al desaseado manejo que hicieron los torquemadas corralianos para ponerle cola al círculo más cercano a César Duarte.
Dicen los juristas que esto no se trata de revanchismo, sino de meras consecuencias en el actuar de un gobierno que se pasó por el arco del triunfo el marco legal al que se debió circunscribir. Y cómo dice el dicho, el que se lleva se aguanta.
Los que tampoco quitan la vista de las ventanas de sus casas, esperando en cualquier momento la llegada de las camionetas blancas de los ministeriales, son los funcionarios cómplices del exrector Luis Alberto Fierro, que le permitieron toda clase de excesos en su trono y ahora que todo está saliendo a la luz, no hayan dónde esconder la cabeza.
Así como hay Señor de los cielos, Señor de los anillos y Señor de los caballos, Fierro quería que le llamaran el Señor de las Suburbans, por las 4 camionetas último modelo que tenía para su uso personal.
Al igual que el narcisista exgobernador Corral, a Fierro le ganó el ego y la ambición que le inyectaban todos los días sus incondicionales, que ni de chiste pensaron que se les iba a acabar el poder y quedarían en la cuerda floja.
El mismo Fierro ya siente el ídem en las corvas, porque cada día que pasa se le acumulan más broncas, aunque anda como si no hubiera quebrado un plato, y diciendo por ahí, con los pocos amigos que le quedan, que ya lo bailado nadie se lo quita. Claro que eso ya no se lo van a quitar, pero también es probable que lo envíen a una fría mazmorra para que disfrute de sus bailadas, pero en pura y estricta retrospectiva.
Finalmente, otros que se quedarán sin chamba antes de terminar el año por pecar de voracidad, son los inspectores de la oficina de Gobernación de Juárez, después de las irregularidades que el subsecretario del ramo encontró en la dependencia, que en la pasada Administración manejaba como caja chica la vicegobernadora Lety Corral.
Fueron tantas las quejas y denuncias que, en los últimos dos meses, los propietarios de bares y restaurantes de Juárez interpusieron en los medios y en las redes, por el cínico acoso de los inspectores, que los jefes de Chihuahua no tuvieron más remedio que trasladarse a Juárez para meter orden en la oficina.
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La regidora panista de corazón neomoreno, Alma Arredondo, circuló ayer en redes sociales una especie de manifiesto a la opinión pública, pero dirigido especialmente a los militantes panistas, para decirles que sigue siendo miembro activo del Partido Acción Nacional, aunque ya no pertenezca a dicha fracción en el Cabildo.
Les pide “que no caigan en las provocaciones que solo buscan demeritar su persona”, pero no dice nada de su integración al grupo de regidores de Morena, ni de la catafixia que hizo con ellos por una jugosa plaza en el DIF para su compa Darío Cárdenas, a cambio de su voto.
Al hacer un recuento de su trabajo en las comisiones en las que participó, cita acciones que aún no se materializan, porque son del presupuesto del 2022 y solo existen en papel. Por lo tanto, no se puede cacarear el huevo si aún no se tiene ni la gallina.
Lo que sí reveló, sin dar mayores detalles, fue que participó en la creación de la Coordinación para la Atención de Personas Mayores de la Dirección del DIF municipal, con un presupuesto de 530 mil pesos para la habilitación del espacio que le será asignado.
Lo que no dijo es que esa posición la crearon a petición suya para colocar a su amigo, el corralista Darío Cárdenas, a quien le asignaron un sueldo de 40 mil pesos mensuales.
O sea que si el señor va a ganar 480 mil pesos al año y el presupuesto para esa Coordinación fue de 530 mil pesos, si Pitágoras no miente, solo le quedarán a la mentada Coordinación 50 mil pesos para la habilitación del espacio para adultos mayores. Como quien dice, el premio mayor se lo lleva Darío, el refugiado.
Por lo pronto, este Mirone le desea a sus fieles y distinguidos lectores que pasen una muy feliz Nochebuena en compañía de sus seres queridos.