Aunque autoridades han mencionado que hay avances significativos en las investigaciones del brutal asesinato de Lidia Kogel Hernández, aún no hay personas detenidas.
La mujer de 57 años que desapareció tras acudir a una clínica a realizarse una cirugía estética y días después fue encontrada desmembrada, dentro de un tambo relleno de cemento, aún no tiene justicia.
Los investigadores siguen desconcertados porque la circunstancia en que ocurrió el proceso de contratación del servicio, así como la desaparición y localización de la víctima, fueron por demás irregulares.
Lidia tenía una vida ordinaria en esta ciudad, ya que era madre de familia y abuela, además de tener un empleo como tramitadora de importación de vehículos.
Un día decidió someterse a un procedimiento estético y fue a parar a una clínica privada localizada entre avenida Hermanos Escobar y avenida De las Américas, cuyo frente se identificaba como Juvenex Med-Spa.
El último día que se le vio fue el 7 de agosto de 2024, tras salir de su domicilio localizado en la colonia Morelos III.
La mujer llegó sola al local comercial y aunque la norma marca que debía estar acompañada por otra persona, aún así le habrían efectuado la intervención.
Se desconoce si la cirugía se complicó y tuvo en ese momento el fallecimiento, pero lo cierto es que el cuerpo fue encontrado el viernes 13 de septiembre en un acceso del Camino Real y calle Salvador Herrera Corral.
Las autoridades mencionaron que el cuerpo estaba dentro de un tambo sellado con cemento.
Pronto se tuvo la confirmación de la identidad de la víctima, sin embargo la familia decidió pagar por su cuenta un servicio privado de validación de identidad, lo cual retrasó la difusión de la identificación oficial.
Hace unos días fue oficializada la identificación y el 7 de diciembre se realizaron los servicios fúnebres de Kogel Hernández.
“Se perdió la batalla, mi madre ya no está con nosotros, es un dolor muy grande y una gran pérdida de una gran señora y sobre todo una madre ejemplar. Siempre te tendré en mis pensamientos, en mi vida recordando todos los momentos tan maravillosos y hermosos que tuvimos juntos. Te amo, madre, te mando un beso hasta el cielo. Descansa en paz, mi gran señora”, escribió uno de los hijos de Lidia.
Era una clínica de horrores donde Lidia Kogel perdió la vida
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