Una llamativa bandera de Cuba se observa en el sentido de norte a sur mientras uno circula por la avenida Tecnológico, cerca del cruce con la calle Hidalgo del Parral. Del otro lado, un busto dorado y unas letras negras nos informan sobre el nombre de este ilustre personaje latinoamericano: José Martí.
Colocada frente a una escuela primaria que lleva su nombre, este espacio honra la memoria del periodista y ensayista que fue uno de los pioneros para que el país caribeño lograra su independencia de España.
Además, Martí también fue un notable personaje literario y promovió la corriente del “modernismo latinoamericano” con libros como “La Edad de Oro” o “Nuestra América”.





El prócer fue asesinado en combate en 1895 durante la Guerra de Independencia de Cuba a los 42 años. Sin embargo, Martí pasó a la historia junto con otros personajes de la talla de Miguel Hidalgo o Simón Bolívar, quienes son considerados como algunos de los primeros hombres que imaginaron a los países latinoamericanos libres del dominio de la corona española.
Tras más de 120 años de su muerte, y a más de 3 mil kilómetros de la tierra que lo vio nacer, en esta frontera aún se honra su memoria como uno de los hombres más importantes de la historia de Cuba y Latinoamérica.
De acuerdo con el catálogo de Monumentos, Placas y Propiedades del Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), esta busto dedicada al revolucionario cubano nacido en 1853, fue obra del escultor Rafael Sánchez y hecha de bronce con una base de concreto.
La figura del ilustre cubano se observa en el sentido de norte a sur en la avenida, como despidiendo a quienes visitan la frontera. En el lado opuesto, de sur a norte, la barda que le sostiene, ondea en el concreto la Cuba libre que añoraron muchos que como él, dieron su vida por liberar América.
