Muy poética comenzó la gobernadora Maru Campos su mensaje durante la presentación del Plan Estatal de Desarrollo, apoyada en la pieza del poeta griego Constantino Kavafis, “Viaje a Ítaca”, que habla de la importancia de disfrutar el camino que se recorre.
El evento estuvo enmarcado por un costoso performance de luz, proyección y sonido, que fue transmitido en tiempo real por redes sociales con poca audiencia, considerando su importancia para todos los chihuahuenses.
Ante un auditorio compuesto por la clase política, empresarial, social y académica, que ocuparon una cuarta parte del enorme gimnasio Manuel Bernardo Aguirre, la gobernadora presentó el plan que, según sus palabras, pondrá a trabajar a todos y será un parteaguas en el desarrollo de la entidad.
Habrá que darle el beneficio de la duda y esperar que en verdad todos los secretarios, directores y organismos descentralizados que integran su gabinete, se pongan a chambear y marque un antes y un después con los cinco años perdidos de la pasada administración.
En el evento de ayer estuvieron en primera fila los exgobernadores priistas Patricio Martínez García y José Reyes Baeza, además del alcalde morenista de Juárez Cruz Pérez Cuéllar, quien ya pinta más de azul que de guinda, por la buena cercanía que mantiene con Palacio de Gobierno.
Contra todos los pronósticos y los que apostaban a que no asistiría, el delegado de Bienestar, Juan Carlos Loera, hizo acto de presencia con la representación del Gobierno federal y ocupó un lugar en el presiduim.
Para el interés de los juarenses, destacó el hecho de que van a trasladar la sede de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado a Juárez. “No queremos seguir siendo un referente de inseguridad a nivel nacional y en el mundo”, dijo la gobernadora al anunciar el cambio.
Ojalá no se trate solamente de un cambio de sede, como ha ocurrido en pasadas administraciones estatales, que instalaron sus programas estelares de seguridad en la frontera y nada pasó: los malandros siguieron haciendo de las suyas y los policías se siguieron haciendo de la vista gorda.
No basta con anunciarle a los delincuentes que los van a combatir poniendo en Juárez el cuartel general de la Policía Estatal. Tienen que verse los resultados, porque, hasta ahora, todo lo que se ha anunciado en materia de seguridad pública ha quedado en simples efectos especiales, con cifras maquilladas que no corresponden a la realidad.
Un ejemplo muy claro de ese maquilaje lo tenemos en la Fiscalía de la Zona Norte, donde no dan una en la investigación de los crímenes que se les siguen acumulando y como si esto fuera poco, por segundo mes consecutivo presentaron cifras de homicidios dolosos que son una mentira.
En enero dijeron en dicha dependencia que habían ocurrido 80 crímenes y fueron 83, en febrero están reportando 82, pero en la realidad son 87.
Las cuentas alegres y el maquillaje de estadísticas delictivas, que son tan recurrentes en las inútiles mesas de seguridad, solo benefician a los grupos criminales que siguen operando con total impunidad y burla.
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Dentro de un mes exactamente, el excandidato a gobernador Alfredo “El Caballo” Lozoya, irá a juicio ante una corte federal del condado de Doña Ana, por los delitos de conspiración para cometer fraude y falsificación de documentos, relacionados con la compra de una avioneta.
La oficina del juez Gregory Woemuth, que lleva el caso en el Tercer Distrito Judicial de Doña Ana, en Las Cruces, Nuevo México, informó que la audiencia original estaba programada la próxima semana, pero a petición de la defensa del político mexicano se pospuso para el 4 de abril.
Los seguidores de Lozoya han circulado versiones en redes sociales donde aseguran que muy pronto volverá a su tierra, todo con el fin de tranquilizar a sus seguidores que ya están viendo con gran preocupación que el “error administrativo”, que se mencionó inicialmente como la causa de su detención, tiene categoría de delito federal, por lo que no es un asunto menor.
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Donde siguen agarrados y agarradas del chongo, dándose hasta con la cubeta, es en la fracción morenista del Cabildo, donde 8 de los 11 regidores están pidiendo la salida de su coordinadora Ana Carmen Estrada para que entre su suplente, la doctora Gabriela Cisneros.
La división de los morenistas, le informaron a Mirone, se ha agravado por el mal trato que Ana les da a sus compañeros hasta con palabras altisonantes, según los propios disidentes que ya no la quieren ni siquiera como una regidora más del grupo.
Esa actitud prepotente y grosera de Ana, provocó que en la última sesión de Cabildo 8 de los ediles morenistas votaran en contra de la propuesta de su compañera Patricia Mendoza, para realizar dos sesiones del Ayuntamiento fuera de la unidad administrativa, una en Samalayuca y otra en el Valle de Juárez.
Después de ese descontón que le pusieron a su coordinadora, quedaron bien definidos los dos grupos en que se dividió Morena, para regocijo de los colmilludos regidores de oposición.
Ana Carmen Estrada se quedó únicamente con Antonio “El Pañalito” Domínguez y con Paty Mendoza, mientras que el segundo grupo que encabeza María Dolores Adame Alvarado, se llevó a la morenista Mayra Karina Castillo, a los 3 regidores del Partido del Trabajo y a los 3 de Nueva Alianza.
Es tal la molestia que tienen por las agresiones verbales de Ana, que los disidentes no han aceptado la mediación del secretario del Ayuntamiento para limar asperezas y han dicho que solamente con el alcalde Cruz Pérez Cuéllar se sentarán a negociar.
Los seguidores de María Adame están pidiendo que Ana pida licencia para que ocupe su lugar y la coordinación de la fracción, la doctora Cisneros, que actualmente ocupa un cargo en la Dirección de Centros Comunitarios.
Si así andan nuestros representantes populares cuando no hay temas importantes que discutir y aprobar en el Cabildo, tirándose violines, pellizcos y piquetes de ojo; imagínese, estimado lector, cómo andarán cuando tengan que decidir los programas y las obras torales de la ciudad.
Dios los agarre confesados en la próxima sesión de Cabildo, donde indudablemente se darán un buen round y saltarán chispas.