Muy contento, pero sobre todo agradecido, debe estar Javier Corral con el alcalde Marco Bonilla, por la clausura de su librería que ayer fue tema de la mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La crítica que el jefe de la Nación hizo a la clausura de la tienda de libros, escaló nuevamente en los medios de comunicación de todo el país, y se convirtió en una envidiable y gratuita promoción a todo color, de costa a costa y de frontera a frontera.
Lo que no encajó en el comentario del preciso, fue la frase que hizo para abrir tema, cuando dijo que “antes en Chihuahua los medios eran más libres”, porque el problema no fue con los medios de comunicación, sino con el Gobierno municipal de la capital del Estado, donde supuestamente Corral no cumplió con la tramitología para abrir su negocio.
Pero conociendo la animadversión que el inquilino de Palacio Nacional le tiene a la prensa, es de entender que aprovechó la dispersión de su mensaje, (algo clásico en sus mañaneras) para enviarles un coscorrón a los medios de la entidad, sin deberla ni temerla.
Tuvieron que pasar cinco días, para que un problema sin mayor trascendencia, importante solo en el ámbito doméstico de los chihuahuitas, fuera incluido en la agenda mañanera del presidente López Obrador, como si se tratara de un asunto de seguridad nacional, de la economía del país, del Tratado de Libre Comercio o de la crisis migrante.
¡No señores! Nada de eso. El tema fue un simple affaire de Bonilla contra Corral para aguarle la inauguración de la librería “Sándor Márai”, pero como el asunto ya había sido comentado en las redes por su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, el preciso tenía que darle el respectivo espaldarazo y seguimiento. ¡Cómo no!
Si hasta ayer, los negocios hacían “Ventas de Clausura”, ahora con la intervención presidencial ha nacido un nuevo concepto mercadológico, que podría llamarse “Promoción de Clausura”, al fin y al cabo, después de todo el show, el librero de marras tendrá muchas ventas locales y hasta nacionales, sin duda alguna.
Lo más ridículo del asunto, es que algunos de los pocos seguidores que le quedan a Corral en la ciudad capital, aprovecharon este boom publicitario para tomarse fotos frente a la tienda clausurada y subirla a las redes, como si se tratara de un sitio histórico o de relevancia cultural. Nomás faltó que le llevaran flores y le encendieran velas en la banqueta.
Por todo lo anterior, Corral debe quedar eternamente agradecido con el despistado alcalde chihuahuita, que sin querer queriendo, posicionó su librería mejor que las Gandhi.
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Otro chisme que es tendencia en los medios digitales y redes sociales, es el “coscorronazo” que el empresario Enrique “Kike” Valles le pegó a Javier Corral, en un desencuentro que tuvieron en un restaurante de la capital del Estado, y que ayer provocó que se subiera al ring el oficioso delegado federal, Juan Carlos Loera De la Rosa.
Al más puro estilo de un peleador de arrabal y sin que lo invitaran a la fiesta, Juan Carlos se solidarizó con el exgobernador, se lanzó contra el Gobierno del Estado y los medios de comunicación y hasta sugirió que se le proporcione protección a su desamparado amigo.
El curioso funcionario federal que va a todas las piñatas, condenó lo que describió como “el clima vengativo y de linchamiento con que crece el duartismo en Chihuahua.
Luego se fue jefe cuando acusó a los medios de comunicación junto, al Gobierno estatal, de generar una polarización para que los duartistas se sientan cómodos e impunes, para cometer actos como el “coscorronazo” del Kike Valles, con libertad y descaro.
Ignora el delegado que esa rivalidad entre los dos protagonistas del affaire del fin de semana es antigua, pues como lo admitió el mismo Javier Corral, es la segunda ocasión en que le pone un susto.
No pasó más de una hora para que Corral le agradeciera a Loera su solidaridad y le dijera que se puso en contacto con funcionarios de la Fiscalía General de la República, para que inicien una investigación por la agresión, que es la segunda que sufre.
También aprovechó el ex, la oportunidad para decir que pidió que se investiguen las amenazas que ha recibido del exauditor Juan Manuel Esparza (hasta el nombre le cambió de lo asustado que anda) y de Alejandro Villarreal, de las cuales dice que tiene pruebas.
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“Son muchos diablos para tan poca agua bendita” solía decir el expresidente municipal de Juárez, Héctor “Teto” Murguía Lardizábal, cada vez que los medios de comunicación le preguntaban -y no eran pocas las ocasiones- sobre cómo solventaría algún problema relacionado con carencias en su administración.
Aunque el peculiar personaje de la vida política y social fronteriza, alcalde de Juárez en dos ocasiones, no tiene que ver con este momento histórico, sí nos hace recordarlo ante el llamado de emergencia que literalmente fue a realizar el coordinador general de Seguridad Vial, durante la comparecencia que tuvo la mañana del martes ante Comisión Edilicia de Seguridad, en la que se destacó la necesidad de contratar más elementos para la corporación.
Los números que presentó el funcionario son propios del horror y si bien no justifican el infierno vial que padecen los juarenses cada día, sí dan muestra clara del espectro y el rezago que una corporación como Seguridad Vial ha tenido que afrontar.
Y es que Tapia Martínez, puso el dedo en la llaga al informar a los regidores que actualmente la Coordinación General de Seguridad Vial cuenta con una plantilla de 420 policías viales, de los cuales solamente 200 son operativos.
Tome en cuenta estimado lector que en la ciudad circulan 750 mil vehículos, de los cuales 620 mil se encuentran debidamente registrados en el padrón estatal y el resto, son automotores con placas extranjeras o de a tiro sin placas.
A eso súmele las grandes distancias que tiene que recorrer el juarense promedio en una ciudad que ronda ya los 2 millones de habitantes, según el último censo se superaban los 1.5 millones, pero en años recientes se ha aumentado la población de manera preocupante.
Esto ha obligado a la ciudadanía a hacerse de un vehículo para aminorar las carencias del transporte público en una ciudad que, ante las lastimosas condiciones de movilidad, requiere de una gran atención en el rubro de sus vialidades y que, para la mala fortuna pues conlleva consecuencias como los accidentes que se presentan cada día.
Tapia Martínez, presentó a la Comisión Edilicia de Seguridad, integrada por la regidora Mireya Porras, Amparo Beltrán y Antonio Domínguez, exhibió los resultados de los trabajos que realiza la corporación, pero fue franco al solicitar el apoyo para aumentar el número de agentes para una mayor cobertura, ya que no sólo es la atención a accidentes, sino otros servicios, como el apoyo a escuelas, cruceros e incidentes viales que ocurren diariamente.
Mucho tendrán que analizar en las próximas sesiones del Ayuntamiento para dar seguimiento a este apartado y apretado problema, que de no ser atendido terminará estrangulando aún más, tanto nuestras calles, ya que el no contar con el número mínimo ideal de personal en rubros tan delicados como lo es Vialidad, pone en jaque no sólo la seguridad de los juarenses, sino de los propios agentes, algo que deberán considerar en la preparación de más elementos para cubrir la mancha urbana que se expande cada día, desenfrenadamente.
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Ante la mirada atónita y hasta asustada de las autoridades preventivas e investigadoras, los sicarios de los grupos llamados Aztecas Vieja Escuela y La Empresa, se están dando con todo en la colonia Plutarco Elías Calles, donde en un lapso de 24 horas fueron asesinadas 5 personas, entre ellas dos mujeres.
Imparable y sanguinaria, no hay otras palabras para describir esa violencia que en este primer mes del año se desató en la ciudad, donde hasta ayer se contabilizaban 72 homicidios dolosos, 8 mujeres en esa lista fatal.
El infierno, como bien lo describe la nota de Norte Digital, sobre los cinco asesinatos registrados solamente en la colonia Plutarco Elías Calles, es atribuido por fuentes policiacas a la guerra por el territorio del narcomenudeo, entre sicarios de los grupos que en algún tiempo formaban una sola pandilla, al servicio del cártel de las drogas nativo de esta región.
Ahora pelean literalmente a muerte en la colonia que colinda con la 16 de septiembre, que en febrero del 2022 fue escenario de un ataque armado a un templo cristiano, donde se realizaba una ceremonia fúnebre, en la que fueron asesinadas 6 personas.
A este ritmo de aniquilación de los pandilleros y a una semana de terminar el mes, estas cifras podrían rebasar los 80 homicidios registrados en enero del año pasado, más lo que se acumule.