Tanto peca el que mata a la vaca como el que le detiene la pata. Así pudieran resumirse las recientes declaraciones que hizo el diputado por Morena, Benjamín Carrera, quien afirmó que por falta de pupitres desde hace dos años hay escuelas en Ciudad Juárez que no tienen clases.
En serio diputado, ¿sabía usted esa problemática desde hace dos años y no hizo nada para remediarlo?, o de otra manera, ¿cómo nos explica su declaración?
Pero este Mirone le da un punto de razón, la inversión en las escuelas es un asunto toral en la buena formación de nuestras generaciones venideras, inversiones señor legislador, que deben provenir de las esferas estatal y federal, recursos que personas como usted, deben encargarse de asignar año con año, para que los municipios cuenten con la infraestructura necesaria.
¿Por qué no hizo estos cuestionamientos a la hora de destinar los pesos y centavos para la entidad?
Dirá usted que es un gasto excesivo la edificación de la Torre Centinela, pero de eso deberán comprobar quienes la construyen cada peso que se vaya gastando y usted, señor diputado, deberá revisar las cuentas públicas en tiempo y momento para hacer los reclamos debidos.
¿Qué ha hecho usted o su bancada por esos mil niños que se encuentran sin clases diputado? A lo mejor si se hubieran hecho una coperacha con sus dietas en el Congreso, habrían conseguido equipar algunas de las escuelas que menciona.
No confunda la gimnasia con la magnesia, la situación de inseguridad y violencia que vive nuestra entidad no es reciente, desafortunadamente es un problema que tiene décadas, y que lejos de aminorarse, ha permanecido vigente y requiere medidas específicas para buscar soluciones.
Estamos de acuerdo que a la par de la seguridad por parte de los cuerpos de vigilancia, deben asignarse recursos para áreas como la cultura, el deporte y la EDUCACIÓN, para que nuestros niños, niñas y adolescentes crezcan en un ambiente sano y propicio para su desarrollo como hombres y mujeres de bien.
Pero esos recursos, señor congresista no se designan por obra del Espíritu Santo, sino a través de personas como usted, que tienen como encomienda ver por el bien común de todos los chihuahuenses.
Si usted declara a los cuatros vientos que “Cualquier cosa que vaya en favor de las familias chihuahuenses se debe de apoyar y cualquier cosa que vaya en contra de las familias chihuahuenses se debe de repudiar”, vaya empezando por cabildear presupuestos que permitan que esto se lleve a cabo, que los recursos de Seguridad sean iguales a los de Educación.
Y algo muy importante diputado, que los recursos que lleguen a Juárez correspondan en proporción, a lo que es, el municipio económicamente más importante en el estado y al que por décadas se le ha desmerecido. Lástima que no sea tiempo de presupuestar, pero dentro de sus posibilidades presupueste estas ideas, con miras al futuro, cimentándolo desde ya.
Diputado, no se trata nada más de andar gestionando ante las dependencias como líder de barrio para que le abran más espacios en las aulas, se trata de recursos, allí, desde su curul, legislando en beneficio de los chihuahuenes. ¡Chihuahua!
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Mucha mugre saldrá, sin duda, de las revisiones que haga la Auditoría Superior del Estado de los contratos que la dirección del Colegio de Bachilleres (Cobach) realizó con la empresa Uniformes de Chihuahua, responsable de haber cotizado y cobrado con sobreprecio, los atuendos deportivos de la institución, que, a 7 meses de haber sido cancelados, no han reembolsado a todos los padres de familia.
La Auditoría Superior fue exhortada ayer en la sesión permanente del Congreso del Estado por la diputada morenista Leticia Ortega Máynez, para que, dentro del programa anual de auditorías, se incluyan las cuentas del sistema del Cobach y se revisen específicamente los contratos realizados con la empresa de los uniformes, que se rehúsa a regresar el dinero a varios cientos de familias.
El exhorto en cuestión instruye para que, en dado caso de no existir contrato con la empresa en cuestión, se revisen todos los actos realizados por la dirección general de la institución, para comprometer los recursos de los padres de familia en la compra de los costosos uniformes.
La tirada de Ortega Máynez, de acuerdo con su experiencia como síndica de Juárez, es que se transparenten los compromisos, beneficios o “moches” que se establecieron entre los directivos del Cobach y Uniformes de Chihuahua, por otorgarles el monopolio de la elaboración de las prendas deportivas.
Aunque la moción llega un poco tarde, porque los pagos a la empresa se realizaron desde el mes de agosto del 2022 y ya no están ni el director del Cobach, Marco Licón Barraza, que protagonizó el desaseado compromiso, ni el secretario de Educación que lo permitió, Javier González Mocken, las auditorías podrán revelar si este negocio de los uniformes era nuevo, o se venía practicando desde hace varios años, en los mismos términos de arreglos en lo oscurito.
Será interesante ver la reacción que tendrán los dueños de la empresa chihuahuita, que hasta ahora han ignorado todos los requerimientos que les han hecho desde la propia secretaria de Educación, el Congreso y hasta de Profeco, para que devuelvan la totalidad del dinero que recibieron, y que aún tiene en lista de espera a más de 200 padres.
A algo se atienen, y eso es precisamente, lo que debe quedar al descubierto en las auditorías.
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Ayer se cumplieron 8 meses de los asesinatos de los sacerdotes jesuitas y del guía de turistas en Cerocahui, y el criminal apodado “El Chueco” sigue evadiendo la justicia y burlándose de sus persecutores de la Federación y el Estado.
Esta situación, que mantiene manchada la imagen de la sierra de Chihuahua, pone en el juicio de la opinión pública dos cosas: o el asesino José Noriel Portillo es muy astuto para mantenerse a salto de mata tanto tiempo, o cuenta con muchos cómplices policiacos y civiles en la montaña, que le avisan cuando le están pisando los callos, para que se ponga lejos del alcance de la justicia.
Todas las promesas que hicieron en su momento los jefes policiacos estatales y federales, al comprometerse a resolver en “cuestión de días” el multihomicidio, con la captura del líder criminal, se han ido olvidando conforme pasan los meses, quedando como simples bloferos para presumir una capacidad que no han demostrado hasta ahora.
Lo que no se ha olvidado es que El Chueco pertenece al grupo criminal de Los Salazar, los mismos que ordenaron el asesinato de la periodista Miroslava Breach, y que, antes, como hoy, sigue imponiendo condiciones en la Sierra Tarahumara y protegiendo a sus sicarios.
Por eso no lo encuentran y menos ahora que las fuerzas que integran el operativo de búsqueda se han reducido, y los que siguen en el mismo, se están limitando a presentar campamentos abandonados y decomiso de armas viejas, para simular que siguen trabajando en la persecución del Chueco, que resultó más hábil que todos los policías rurales que andan en el operativo, y que supuestamente conocen la sierra como la palma de su mano.
Si la recompensa de 5 millones de pesos que se ofrecen por su captura no ha servido para dar con su paradero, lo único que queda es esperar que la presión social y especialmente la que ejerce la Compañía de Jesús, como organización mundial, pueda obligar a las autoridades a que dejen de hacerle al cuento y vayan por el malandro a la sierra de Sinaloa, donde dicen que se encuentra descansando plácidamente.
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Donde ya comenzaron las grillas y celos para ganar reflectores y colocarse en el ánimo ciudadano en búsqueda de la candidatura por la alcaldía de Juárez, es en el PAN, donde el regidor Joob Quintín ha hecho alianza con la diputada federal Daniela Álvarez, porque sienten que la diputada local Marisela Terrazas les está comiendo el mandado.
De Daniela se conocían sus aspiraciones, porque siempre ha estado pendiente de la problemática de los juarenses y ha sido muy combativa, pero de Joob, resulta una sorpresa que los propios panistas digan que también tiene su corazoncito y quiere jugar en ligas mayores, aunque sus limitadas capacidades políticas no le alcancen.
Pues bien, ambos políticos al parecer han unido fuerzas para hacerle sombra a Marisela Terrazas, que anda encampañada, organizando reuniones a diestra y siniestra, llevando jornadas asistenciales en colonias y repartiendo apoyos a vecinos del quinto distrito, con la bendición de Palacio.
Esta posición avanzada de la diputada local, ha puesto nerviosos a Joob y a Daniela, quienes en una reunión realizada en las oficinas del Pueblito Mexicano la semana pasada, le reclamaron al representante de la gobernadora, Oscar Ibáñez, por el apoyo que supuestamente le están dando a la juarense.
Fuentes mironianas, comentaron que Joob se quiere colar en esta disputa por la candidatura de la alcaldía, para negociar su postulación por el quinto distrito electoral, precisamente en el que manda actualmente Marisela, por eso su grilla.
Lo malo para el regidor, es que le dijeron que mientras no salga a gastar suela y caminar las calles, nadie le va a llevar una candidatura hasta su oficina, ni siquiera la de suplente.
Así que el vaquerito urbano está en la disyuntiva de seguir empujando por el proyecto de Daniela o salir a conocer las colonias del distrito que pretende representar.