Ante el riesgo de que el Gobierno del presidente Donald Trump privatice 550 mil acres de áreas naturales en Nuevo México, colectivos de ambos lados de la frontera realizaron hoy un pronunciamiento en contra.
En esa zona existen petrograbados, riachuelos, áreas de conservación de flora y fauna, entre otras riquezas naturales, dijo el representante del Colectivo Sierra de Juárez, Ray Aguilar.
En el área aledaña al Museo Casa de Adobe, donde confluyen Nuevo México, Texas y Chihuahua, Aguilar informó este sábado que el propósito de la actividad fue alzar la voz sobre las posibles ventas de áreas protegidas en Estados Unidos, en especial en Nuevo México.


“Organizaciones hermanas que están luchando por la conservación hoy, de manera simultánea, están alzando la voz en diferentes parques nacionales de Estados Unidos”, refirió.
Por eso, agregó, aquí en Juárez hicieron acto de presencia mostrando su descontento por esas acciones.
Mientras esperaban la llegada de representantes de medios de comunicación, los integrantes del colectivo colocaron pedazos de cartón sobre el muro metálico que divide la frontera.
En los cartones se podían leer frases como “La lucha por la tierra cruza muros”, “Montañas hermanas”, “Juárez apoya Organ”, entre otras.
De acuerdo con Aguilar, la administración encabezada por Donald Trump, pretende reducir algunas áreas que están protegidas y que forman parte del patrimonio de la nación con el único propósito de impulsar su economía.
“Quieren sacrificar muchos de estos parques nacionales, monumentos naturales, para privatizarlos y sacar provecho económico”, criticó.
Remarcó que, en especial, el apoyo es para el Parque Nacional conocido como Organ Mountains-Desert Peaks, National Monument, en Las Cruces, Nuevo México, localizado a 40 minutos de la línea fronteriza.
Este sitio natural, junto con la Sierra de Juárez y la Sierra Franklin en El Paso, forman una misma cordillera, “somos ciudades y montañas hermanas”, apreció.
De acuerdo con el activista, el colectivo promueve la conservación de la Sierra de Juárez desde hace cinco años, con actividades de educación ambiental y divulgación científica, tanto con autoridades como con la población.
La Sierra de Juárez, a diferencia de las que están en territorio estadounidense, es la única que está aislada y sin protección, alertó.
Uno de sus objetivos es buscar la protección de la Sierra de Juárez que, sostuvo, tiene alrededor de 19 propietarios, incluidas algunas concesiones de minería.
Su idea es consensuar que los propietarios accedan a la conservación de este espacio natural, donde de forma cotidiana se realizan actividades de senderismo masivo, ciclismo y eventos de running.
Este tipo de esfuerzos no se cancelarían, sino que, en el proceso de conservación, se irían regulando, aclaró.
“No se trata de quitarle el terreno a nadie, sino ponernos de acuerdo en que la sierra sea protegida”, agregó.
Entre los grupos participantes en la manifestación Aguilar mencionó el Colectivo Sierra de Juárez, Bio Experimenta, Ecología Con Ciencia, entre otros, que cuentan con 29 divulgadores científicos como biólogos, abogados, ingenieros y geólogos.
En conjunto, dijo, conforman la Alianza Voces de la Ciencia Juarense.
La movilización de este fin de semana se hizo en forma simultánea aquí en Juárez y en las ciudades de Taos, Rio Grande, Albuquerque y en el Organ Mountains-Desert Peaks, National Monument de Las Cruces, en el estado de Nuevo México, precisó.
