Con importantes acuerdos referentes a protección ambiental, territorio, agua y derechos humanos, concluyeron las actividades del Segundo Encuentro del Frente Amplio Ambiental del Norte (FAAN).
Durante dos días los integrantes del FAAN, analizaron diversos temas, destacando una declaratoria relativa a la creación de un corredor biológico en el Río Bravo.
Se establecieron líneas de acción para proceder legalmente solicitando la declaración de este corredor en lo que denominan la cuenca del Río Bravo Grande Rojo.
Según Luis Rivera, del movimiento “Salvemos los cerros de Chihuahua”, este denominativo se acuñó con el interés de recuperar la raíz de la nación N’dee.
Se trata de una visión espiritualista que pugna por el respeto a la biodiversidad, enfocada en el valor sagrado de la Madre Tierra.
En palabras de David Hernández del colectivo “Keyah”, es una visión que califica al desierto como un conjunto de ecosistemas integrados; por ello -aseguró-, deben considerarse como áreas naturales protegidas.
Pide líder de Café Tacvba elevar conciencia sobre la sacralidad ambiental
Importante aportación fue la participación de Rubén Albarrán, vocalista del grupo musical Café Tacvba, que imprimió un sentido místico al evento.
El artista pidió elevar la conciencia sobre “la sacralidad” de los elementos dadores de vida que son la tierra, el agua y el aire; es decir “nuestros alimentos”, sagrados no porque alguien lo diga, sino por el hecho de que sin ellos comprometemos nuestra existencia, según dijo.
Este encuentro fue secuela de otro que se realizó en abril pasado en Chihuahua, en el marco de la “Consulta Pública Sierra Nombre de Dios 2022”.
El evento tuvo como sedes al Museo de Arqueología e Historia de El Chamizal (MAHCH) y la Casa de la Cultura en Samalayuca.