Al menos cuatro de los pasos deprimidos que el gobierno estatal determinó construir en el bulevar Francisco Villarreal Torres y la avenida De las Torres sobrepasan el máximo de inclinación recomendada por la norma de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), revelan los planos de las obras, que se hicieron públicos durante procesos de licitación.
Lo anterior los convertirá en auténticos sube y bajas para los miles de conductores que circulen por ahí, advirtieron especialistas en vialidad y transporte consultados.
De acuerdo a lo que establece el Manual de Proyecto Geométrico de Carreteras de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), un paso deprimido que tenga una altura de entre 4 y 5 metros -como es el caso ya que los referidos pasos deprimidos tendrán una altura de 4.30- debe tener un porcentaje de inclinación de entre 6 y 7 grados, en una longitud de entre 150 y 200 metros.
Esto significa que si una rampa en un paso deprimido está demasiado inclinada, los conductores pueden perder visibilidad y sufrir accidentes.
“De acuerdo al Manual, están muy verticales y esto afecta la velocidad y la capacidad de servicio en la vialidad”, señaló un especialista en ingeniería vial que solicitó reservar su nombre para evitar represalias del gobierno.
Dijo que la primera afectación tiene que ver con la seguridad y la segunda con el nivel de servicio de la calle.
“Si vas a bajar no alcanzas a ver quien esta dentro del paso, pierdes visibilidad y puede causar accidentes y el otro problema es que si tienes que reducir velocidad para entrar a esa rampa, se va a afectar la capacidad o fluidez del tráfico”, explicó.
El objetivo de cualquier obra de infraestructura vial -añadió- es que se mantenga el flujo constante y que no se afecte el número de vehículos que pasan en una hora, y con estas características va a ocurrir lo contrario.
Para el presidente de la Asociación de Transportistas de Ciudad Juárez Manuel Sotelo Suárez, quienes están haciendo estas obras no están pensando en la seguridad de los automovilistas y están ignorando lo que establece el Manual de Proyecto Geométrico de la SCT.
“La norma de la SCT establece que en un paso deprimido donde van a bajar 4 metros, la inclinación sea máximo de siete grados, pero bajando en 130 metros para que se tenga la visibilidad y la pendiente no sea tan pronunciada y así evitar que haya accidentes”, advirtió.
Los pasos deprimidos que están haciendo -agregó- tienen 8 grados de elevación y están bajando todos en 30 y 35 metros.
“Se esta haciendo sin pensar en la seguridad de los automovilistas”, lamentó.
Por si fuera poco están proyectando una elevación en la entrada de los puentes deprimidos para que el agua no circule hacia el fondo, y eso va a ser todavía mas peligroso para los automovilistas porque, dijo, es una especie de tope para que el agua no se vaya.
“Ese tope lo va a impulsar como si fuera una rampa, un tobogán o una ruleta rusa”, refirió.
Como ejemplo de lo que no debiera repetirse Sotelo recordó que los gobernantes que construyeron el “puente al revés” (de la Tecnológico y Gómez Morín) “por ahorrarse unos cuantos pesos nos condenaron a choques por alcance que no sucederían si se tuviera la inclinación segura que recomienda la SCT”.
“Igual estamos condenando a los usuarios de los puentes deprimidos a que tengan el mismo problema”, alertó.
Documentos que hablan
Los documentos públicos de dichas obras, disponibles en internet, señalan que en los pasos deprimidos que este año se empezaron a construir -o están en proceso de licitación- en el bulevar Francisco Villarreal Torres y la avenida De las Torres, en sus cruces con Aldabas, Ejército Nacional, Sorgo y Mitla, la inclinación está por encima de la mínima recomendada en el Manual de Proyecto Geométrico.
De acuerdo con las licitaciones publicadas -de las que Norte obtuvo copias- en los cuerpos del lado oriente con circulación de sur a norte los datos son los siguientes:
En el paso deprimido de Aldabas -actualmente en proceso de excavación- la inclinación es de 8.3 por ciento en 20 metros para bajar y de 7.6 por ciento en 30 metros para subir.
En el paso a desnivel de la Ejército Nacional, listo para ser adjudicado esta semana, el declive es del 8 por ciento con 29.4 metros para bajar y el mismo porcentaje para subir, en una rampa de 44.1 metros.
En el caso del foso que se hará en la calle Sorgo, la rampa proyectada tiene el mismo 8 por ciento para bajar y subir, con 11.8 metros de largo en la bajada y 53.2 metros en la subida.
Todos los números están por arriba de la recomendación técnica del Manual, que marca un máximo de 7 por ciento en los grados de inclinación.
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