En Turquía la moda puede ser nociva para los niños. O al menos una parte de ella, de acuerdo con la decisión tomada por las autoridades turcas sobre la revista Elle, una de las cabeceras sobre moda, belleza y tendencias con más presencia en todo el mundo.
El Departamento del primer Ministro para la Protección de los Niños de Materiales Sexuales Explícitos ha anunciado que el número de marzo de Elle, que lleva en portada a la supermodelo Rosie Huntington-Whiteley, posee «contenido obsceno».
¨Algunos artículos y fotografías encontrados son obscenos y dañinos para la psicología de los menores¨, reza la notificación oficial hecha pública el pasado viernes. No obstante, no se detalla de qué artículos o fotografías se trata.
Esta decisión tiene repercusiones muy concretas para la revista. Los adolescentes menores de 18 años no pueden comprarla, solo es posible venderla envuelta en un papel o plástico opaco, la portada tendrá que incluir una marca que notifique que es «dañina para los menores» y no se podrá anunciar.
La agencia de noticias Bloomberg se hizo eco de la noticia pero aseguró que la empresa editora de la edición turca de la revista, Dogan Burda Dergi Yayincilik ve Pazarlama AS, no había recibido ninguna comunicación oficial por parte del Gobierno. A pesar de ello ya tenían planeado recurrir la decisión en los tribunales tan pronto como llegara la notificación.
La delegación turca del Comité para la Protección de los Periodistas, con sede en Estados Unidos, incluyó esta noticia como parte de su monitorización semanal sobre el estado de la libertad de la prensa en el país eurasiático.