“Está cerrado”, es la frase que más se repite durante esta mañana en las afueras de las oficinas del Servicio de Administración Tributaria (SAT), ubicadas en Teófilo Borunda y Paseo de la Victorias, en esta frontera.
De acuerdo con los empleados de la descentralizada, desde las seis de la mañana, tomaron las instalaciones en protesta por la falta de pago de un retroactivo.

Las protestas comenzaron desde ayer en la mañana con un paro limitado de labores que se convocó a nivel nacional. Aunque pocos, ayer algunos ciudadanos todavía pudieron llevar a cabo sus trámites.
Sin embargo, desde esta mañana, así como sucede en diversas oficinas a lo largo del país, las diligencias están canceladas hasta próximo aviso.
Emmanuel Balderas, representante de los trabajadores, señaló que esta decisión se tomó luego de que no se cumplieran sus demandas, principalmente, la del pago de un aumento que se había autorizado, mencionó, desde hace un año.
Si bien han señalado diversas carencias en su trabajo como la falta de insumos, está es la cuestión más importante a resolver, de cara a regresar a sus labores.
Con pancartas y mantas, los empleados permanecen afuera, expresando su inconformidad e informando a los contribuyentes.
La noticia es tomada con sorpresa y enojo por los ciudadanos. La mayoría espera un momento en este lugar en búsqueda de información o que, de pronto, esa puerta de gris de acero se abra y puedan realizar sus trámites pendientes.
La mayoría acudió a este lugar a sacar la Constancia de Situación Fiscal, misma que contiene el Registro federal de Contribuyentes (RFC), documento esencial para poder ser registrado en un trabajo formal.
Algunos ciudadanos señalaron que habían pactado su cita desde hace semanas, misma que temen puedan perder con estas protestas.
Uno de los empleados del SAT, que atiende en la puerta, les indica que hay manera de reprogramar la cita y que, en su defecto, se respetarán todas aquellas que hayan sucedido durante los días en los que dure el paro.
Sin embargo, eso no evita el desconsuelo, aquí hay personas que necesitaban el documento de manera urgente, ya que se los habían solicitado en su trabajo, algunos, tenían este día como fecha límite.
Buscan respuestas en sus teléfonos y preguntan en reiteradas ocasiones, pero siempre reciben lo mismo “hoy no hay servicio”.
Para algunos, que se quedan esperando un milagro, la situación es tan adversa que se atreven afirmar que, por culpa de esta situación, es probable que pierdan su empleo.
Según Balderas, la protesta tendrá una duración indefinida, aunque no quieren afectar la ciudadanía, pidió su comprensión y que los ayudarán a tener condiciones dignas para reiniciar las labores, lo antes posible.