Hasta este momento solo había escrito acerca de libros de literatura, pero en esta ocasión vale la pena destacar un libro de Historia, me refiero a Latinoamérica: las ciudades y las ideas, de José Luis Romero. Romero (Buenos Aires, 1909-Tokio, 1977) fue un historiador argentino que se especializó en el mundo romano, luego hizo investigación del mundo feudal y posteriormente se centró en la historia argentina y latinoamericana. El libro del cual quiero hablarles hoy es fascinante, ya que permite al lector entender cómo se fue configurando la red de ciudades que existen en la actualidad en América Latina.
Es cierto que no podemos hablar de América como de un continente vacío, ya había varios grupos indígenas, incluso ciudades magníficas como México Tenochtitlan o el Cuzco, pero no existían redes de ciudades como lo establecieron los españoles con la conquista y la colonización. Esa es una de las grandes novedades. Los conquistadores erigieron ciudades puertos (Acapulco o La Habana, Cuba), ciudades fuertes (Valdivia, Chile), ciudades intermedias (Puebla de los Ángeles o Asunción, Paraguay) para enlazar otras, ciudades sobre establecimientos indígenas previos (Bogotá, Colombia), lo que al final se convirtió en una red de ciudades impresionante, la cual se caracterizó de acuerdo con sus condiciones climáticas, su propia flora y fauna, sus accidentes orográficos e hídricos, por eso son parecidas y a la vez diferentes las ciudades latinoamericanas.
La ciudad se convirtió en el gran invento de los colonizadores, ya que ahí surgieron nuevos personajes en América, las ciudades atrajeron a los comerciantes, clérigos, capitanes, herreros, carpinteros, artistas, pobladores cercanos y un largo etcétera que antes no se habían congregado. Las ciudades y sus rutas propiciaron el flujo no sólo de productos, sino de ideas, el flujo de la cultura. El recorrido histórico que hace Romero es muy ilustrativo porque esclarece el proceso por el que pasaron diferentes ciudades, que en su momento pudieron ser importantísimas para los diferentes países por sus condiciones estratégicas para el comercio y la cultura, como Valparaíso, Chile, en el siglo XIX o la misma Buenos Aires, que se tuvo que fundar dos veces, primero en 1536 por Pedro de Mendoza y después en 1580 durante una expedición realizada por Juan de Garay, quien se dirigía hacia Asunción, pero que para finales de los 1800’s, la capital argentina era una de las ciudades más importantes de toda América Latina. Aquí está la invitación para echarle una leída a este libro fundamental para comprender mejor nuestra Latinoamérica.
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