Rodolfo Fierro (1880-1915) fue el soldado más sanguinario del ejército de Pancho Villa, y uno de los textos que mejor dan cuenta de su ferocidad y personalidad es “La fiesta de las balas”, incluido en El águila y la serpiente (1928) de Martín Luis Guzmán (Chihuahua, 1887-Ciudad de México, 1976), uno de los grandes escritores mexicanos y chihuahuenses, por supuesto.
Guzmán perteneció al Ateneo de la Juventud, grupo que buscaba distanciarse del modernismo superficial de la época para profundizar en el conocimiento y la exploración de los clásicos grecolatinos, por ejemplo.
Martín Luis Guzmán cuenta con varios libros: La sombra del caudillo (1930), La sombra de Pancho Villa (1938), Muerte históricas (1958), entre otros. La obra El águila y la serpiente es una suerte de novela panorámica y anímica de la Revolución mexicana, contada a través de relatos y cuentos, uno de ellos es, precisamente, “La fiesta de las balas”.
Al inicio de dicho texto el narrador señala que hay versiones históricas y legendarias en torno al villismo, y explica que para él son mejores las segundas, ya que muestran mejor los caracteres de esos soldados, como Fierro en este caso.
En este texto, se narra la historia de que luego de un enfrentamiento entre villistas y federales, apoyados por los “colorados”, es decir, los orozquistas, los primeros, los que habían ganado, encierran a todos y los van a fusilar parejo, a menos que los federales se arrepientan y se unan a la causa, los “colorados” no morirían a menos que lograran escapar de las balas de Fierro. En un corral los hacían correr por su vida y saltar una barda, el que lograra brincar se salvaría, mientras Fierro les disparaba con dos pistolas que le preparaba su ayudante.
El texto, a pesar de la crueldad, está narrado de forma poética e incluso adelanta percepciones cinematográficas, como cuando narra cómo una bala va a abriendo las ondas del aire. Es tan poderoso este relato que muchos historiadores se han pasado buscando dónde fue que Fierro asesinó a estos 300 colorados, pero sólo existen en la ficción de Guzmán. Así que quizá seguirán buscando el sitio de la masacre cerca de Ciudad Juárez. Nosotros vayamos a disfrutar de su lectura.
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