La “tusi rosa”, conocida también como “cocaína rosa”, comienza a abrirse paso en Ciudad Juárez. Su apariencia llamativa puede engañar, pero especialistas advierten que es hasta 30 veces más potente que el fentanilo y que podría detonar un aumento en los trastornos mentales entre consumidores.
Especialistas en adicciones, advierten que puede parecer inofensiva por su color, pero resulta muy peligrosa para la salud.
José Luis Galván, del Centro de Rehabilitación y Sanación Integral Ave Fénix, mencionó que la sustancia referida es hasta 30 veces más potente que el fentanilo y el daño que puede ocasionar a los consumidores puede ser letal.
De acuerdo con el entrevistado, no ha sido común su uso en la ciudad; sin embargo, se advierte que está llegando y, por la novedad y disponibilidad, algunos podrían empezar a utilizarla, con el riesgo que implica.
Este día, la Agencia Estatal de Investigación (AEI), en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional, presentó a dos detenidos con 1.015 kilogramos de “tusi rosa”, 1.975 kilogramos de fentanilo y 195 gramos de cocaína.
Sobre el tema, Galván explicó que un kilogramo de cocaína rosa, como le llaman, podría convertirse en hasta tres kilogramos, con cientos de dosis para comercializar en el mercado de adictos.
Indicó que no sería extraño que la combinaran con otras sustancias para duplicar o triplicar las ganancias.
El también consejero señaló que, al haber en las calles otra droga potente aparte de las más comunes, se advierte que los trastornos mentales serán igualmente más frecuentes.
Según la información con que cuenta, la “tusi rosa” procedería principalmente de Europa, pero llegaría en este caso a la frontera a través de Estados Unidos.
De acuerdo con la agencia encargada de combatir las drogas en Estados Unidos (DEA), la “tusi rosa” o “cocaína rosa” es una mezcla de sustancias en polvo teñida de dicho color, que puede tener un olor dulce y generalmente produce efectos alucinógenos que alteran la mente.
El compuesto original de la tusi era el 2C-B, una feniletilamina psicodélica.
“Cuando el 2C-B se volvió más difícil de conseguir, las organizaciones narcotraficantes optaron por un cóctel de drogas, que tiñeron de rosa y la vendieron como cocaína rosa. La cocaína rosa ya rara vez contiene 2C-B, y las sustancias que contiene no se conocen hasta que se analiza una muestra.
Sin embargo, es probable que no contenga cocaína.
Las pruebas de laboratorio de la DEA han identificado polvos rosados que contienen combinaciones como: ketamina y MDMA; metanfetamina, ketamina y MDMA; cocaína y fentanilo; o fentanilo y xilazina”, explica la dependencia en su página oficial.
En el caso de Estados Unidos, la cocaína rosa suele encontrarse en zonas urbanas con escenas activas de clubes nocturnos como Miami, Nueva York y Los Ángeles”, señala la DEA.