Luis Humberto Crosthwaite (Tijuana, Baja California, 1962) es un escritor mexicano que la crítica ha ubicado dentro del “boom norteño” que destacó a nivel nacional e internacional en la década de 1990. Crosthwaite es uno de los grandes escritores mexicanos de la actualidad, tiene varios libros narrativos entre cuento y novela, entre los que se cuentan El gran preténder (1992), Estrella de la Calle Sexta (2000), Instrucciones para cruzar la frontera (2002) y Tijuana: crimen y olvido (2010).
En esta ocasión les hablaré de Idos de la mente. La increíble y (a veces) triste historia de Ramón y Cornelio (2001), novela creada a partir de varios elementos textuales que van de la entrevista al cuento, de la playlist al anuncio promocional, entre otros, todo narrado con humor y dosis de buena literatura. La obra cuenta la historia de Ramón (¿Ayala?) y Cornelio (¿Reyna?) quienes desde jóvenes son amigos y quieren formar un conjunto de música norteña. Uso los signos de interrogación porque el autor advierte que todo en el libro es ficción, menos la música, misma que acompaña toda la pieza y que se refuerza por las canciones que tocan, así como los títulos de los capítulos que corresponden a títulos o a versos de canciones.
En esta novela se desarrolla la historia como la de otros músicos, que tienen sueños, que empiezan desde abajo, tocando en donde los dejan y que poco a poco alcanzan la fama, incluso los pone nerviosos, pero se preguntan: ¿qué haría José Alfredo en esta situación?, que, por cierto, tiene su aparición en la obra. También cuenta con la intervención de un Dios norteño que ayuda a Cornelio a componer canciones e incluso a resolver asuntos con criminales que quieren amedrentarlo para que cante narcocorridos.
Idos de la mente da cuenta de lo que rodea a los famosos, en este caso, de un conjunto norteño que conoce promotores, entrevistadores famosos, desencuentros, el precio de la fama, las parejas, como con The Beatles y una larga lista de alusiones a la cultura popular, como el cine de oro mexicano. Espero que se den el tiempo de leer este novelón de Crosthwaite y lo disfruten.
* Los comentarios del autor son responsabilidad suya y no necesariamente reflejan la visión del medio.
