Con 50 años de operaciones y ser una alternativa para la plantación de miles de árboles y plantas, el Invernadero Urías es el ejemplo de un negocio familiar que ha sabido mantenerse con éxito pese a los retos que plantea vivir en una población con características particulares del clima que hay en Ciudad Juárez.
Fue un 25 de octubre de 1968 cuando las puertas de este lugar de venta y producción de árboles, plantas, pasto y todo lo necesario para el jardín, se abrieron por primera vez gracias a la iniciativa y visión del ingeniero agrónomo Héctor Urías Escobar.
“Mi papá, el ingeniero Héctor Urías Escobar, que en paz descanse, fue el fundador de este negocio, él era agrónomo, fue catedrático de la Escuela de Agricultura durante 25 años y realmente era lo que disfrutaba, era lo que le enseñaba a sus alumnos, entonces decidió abrir un negocio de lo que ya sabía hacer”, cuenta Jaime Urías Caballero, hijo del ingeniero y quien tomó la administración del negocio desde enero de 1987.
Urías Caballero, horticultor egresado de la Universidad de Las Cruces, Nuevo México, recuerda que el invernadero empezó produciendo árboles de sombra, en su mayoría olmos chinos que se mandaban a la Ciudad de México, lo que los posicionó y llevó a la producción de otras plantas, que en la actualidad son la mayor venta de este lugar que siempre ha estado ubicado en la esquina de avenida Lincoln y Hermanos Escobar #2701.
En sus palabras, el negocio de su padre es muy popular debido a que son los únicos que además de vender, son productores, lo que representa un plus con respecto a sus competidores. “Gran parte de lo que vendemos lo producimos en Ciudad Juárez, a diferencia de otros invernaderos que no son productores, son comerciantes de las plantas para el jardín”.
Precisamente esa cualidad los ha llevado a posicionarse como los proveedores exclusivos de otros comercios, entre ellos las tiendas Hágalo Home Center, a las que surten todo el inventario en plantas de sus ocho tiendas localizadas en esta frontera.
“Nosotros producimos para quien venga aquí, jardineros, constructores, tiendas de autoservicio, amas de casa, a la persona que venga aquí se le vende lo que necesite”, afirma Urías Caballero, para quien seguir el legado de su padre se ha convertido en su asignación más importante, pues le hace trabajar día a día con el único objetivo de ofrecer a sus clientes los mejores productos, garantizando siempre que su producción y cuidado ha sido bajo las mejores condiciones, característica que los ha mantenido en un camino repleto de flores.
