Tras estar en medio de la nada, una pareja de migrantes venezolanos y su bebé de cuatro meses, llegaron a la frontera.
La pequeña familia dice haber sido víctima de un secuestro en su travesía por el país, quedando 20 días en un paraje que recuerdan cómo entre montes, donde integrantes del crimen organizado los liberaron tras el pago de 7 mil 500 dólares.
Perdidos entre las calles de Juárez, sin dinero, ni un lugar a dónde ir, los migrantes observan como sus esperanzas se diluyen en su intento por alcanzar el sueño americano.
(mr)