Ciudad Juárez vive una transformación profunda a través del deporte. A lo largo de los últimos años, el Gobierno Municipal ha impulsado una ambiciosa estrategia de infraestructura que busca fortalecer la salud física y emocional de sus habitantes, dignificar espacios públicos y consolidar el tejido social mediante la activación comunitaria.
Desde la remodelación integral del icónico Gimnasio Josué Neri Santos hasta la construcción del Estadio 8 de Diciembre en el suroriente de la ciudad, cada obra tiene un mismo objetivo: poner el deporte al alcance de todos. Son más de 150 millones de pesos los que se han invertido en proyectos que no solo modernizan instalaciones, sino que también impactan de forma directa en la vida de decenas de miles de juarenses.
• Nota: La inversión en la ciclopista Pablo Darancou aún no ha sido aprobada por cabildo ni presupuestada oficialmente, razón por la que no se incluye en el total
Neri Santos: un nuevo rostro para el corazón del deporte juarense
Después de 50 años, el Neri Santos por fin está siendo remodelado. La inversión de 35.8 millones de pesos se traduce en mejoras sustanciales que buscan posicionar al gimnasio como un recinto moderno, funcional y competitivo a nivel nacional.
La obra contempla la instalación de cuatro pantallas digitales de 3 por 4 metros, sincronizadas con nuevos tableros homologados por la FIBA (Federación Internacional de Basquetbol), lo que permitirá realizar transmisiones profesionales y seguir el ritmo de competencias con tecnología de punta. Además, se renovarán vestidores, se modernizará el sistema de sonido y se instalará una iluminación LED de alto rendimiento que elimina la necesidad de iluminación adicional para eventos televisivos.
Se construirán dos vestidores adicionales, para cumplir con las exigencias de torneos oficiales, así como espacios separados para árbitros hombres y mujeres. Las gradas de concreto, con medio siglo de antigüedad, han sido demolidas para dar paso a asientos plásticos numerados y sillones más cómodos en la zona baja, elevando así la experiencia de quienes asisten a los eventos deportivos.
“Estamos apostando por un recinto que pueda recibir eventos nacionales e internacionales, con todas las condiciones técnicas, estéticas y humanas”, detalló el arquitecto Armando González Vázquez, coordinador técnico del Instituto Municipal del Deporte.
Kiki Romero: del barrio a la alta competencia
Ubicado en la colonia Granjas de Chapultepec, el Gimnasio Kiki Romero también se encuentra en proceso de transformación. Lo que comenzó como un proyecto para colocar duela y mejorar la iluminación, creció hasta convertirse en la construcción de una nave nueva con una cancha adicional, lo que permitirá ampliar su capacidad operativa.
La nueva estructura contempla canchas transversales que podrán usarse simultáneamente para torneos y entrenamientos. Tableros, marcadores, sanitarios nuevos, mejores accesos y una conectividad integral con el edificio actual conforman un proyecto integral de 52 millones de pesos, programado para concluir en diciembre de 2025.
“Podremos atender hasta cuatro juegos al mismo tiempo. Eso nos coloca a la altura de las grandes ciudades del país”, explicó González.
Además de las disciplinas como boxeo y levantamiento de pesas que ya se practican en el lugar, esta infraestructura permitirá a la comunidad disponer de un espacio multifuncional para actividades escolares, sociales y recreativas.
El suroriente también juega: Estadio 8 de Diciembre
En el suroriente de la ciudad, donde antes no existía un recinto deportivo de gran escala, se construyó el Estadio 8 de Diciembre, con capacidad para más de 4 mil personas y una inversión cercana a los 50 millones de pesos. Inaugurado en enero de este año, el estadio ya ha albergado eventos masivos con lleno total.
La obra, que inicialmente se planeó para albergar rodeo, fue rediseñada para tener una cancha de futbol, pista de tartán y posibilidad de usarse también para futbol americano y atletismo. En tan solo ocho meses se materializó un espacio que hoy beneficia directamente a más de 10 mil personas.
“Queríamos un proyecto que tocara a la mayor cantidad posible de ciudadanos, y hoy vemos cómo esta zona tiene un nuevo corazón deportivo”, señaló Juan Carlos Escalante, director del Instituto Municipal del Deporte.
Obras que conectan colonias, fortalecen barrios y unen familias
Desde 2021, la administración municipal ha puesto en marcha una serie de obras deportivas que han cambiado el paisaje urbano en colonias populares. Se trata de ocho canchas de futbol rápido con pasto sintético, malla ciclónica, iluminación y pista de tartán, construidas desde el poniente hasta el suroriente.
Con una inversión de aproximadamente 18 millones de pesos, estas canchas han sido puestas a disposición directa de las colonias, en zonas como Fernando Tiscareño, donde antes no existía ningún espacio para la práctica deportiva. Hoy, son puntos de encuentro donde niños, jóvenes y adultos activan su cuerpo y construyen comunidad.
En el gimnasio Bertha Chiu también se han destinado cerca de 20 millones de pesos en infraestructura nueva: aulas para futbol rápido, futbol playero y boxeo, tableros y marcadores modernos, y duela profesional. Más de 250 personas lo utilizan diariamente, aunque el número de beneficiarios por semana supera fácilmente los 2 mil.
Uno de los proyectos más esperados es la rehabilitación de la ciclopista Pablo Darancou, entre el Malecón y Heroico Colegio Militar. Se proyecta el recarpeteo completo del circuito, la construcción de baños y graderías, y una ciclopista especial para niños, fomentando el uso de la bicicleta como medio de recreación y transporte seguro.
“Nuestra visión es clara: espacios bien hechos, funcionales y usados por todos. Desde boxeo y basquetbol hasta conciertos y graduaciones, nuestros espacios tienen que estar a la altura de la gente”, concluyó Escalante.
La ciudad del deporte y del encuentro
Con visión, planeación y compromiso, Ciudad Juárez se está convirtiendo en una ciudad del deporte, de la salud y del encuentro social. La inversión pública en infraestructura deportiva no solo mejora la calidad de vida, también genera comunidad, reduce desigualdades y promueve un futuro más activo para niños, jóvenes y adultos mayores.
