Ambientalistas dudan de su calidad, pero en Riberas y el Valle ya la usan para sembrar alfalfa; la JMAS presume que la destina para áreas verdes y no dice nada del uso agrícola.
Los malos olores en los canales de riego de Riberas del Bravo pueden deberse a que las plantas tratadoras de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, no están procesando adecuadamente el líquido, dice Alejandro González, de la Asociación en Defensa del Río Bravo.