La madrugada del pasado 12 de diciembre de 2023, las calles de la ciudad, pero en especial las redes sociales, fueron testigos de un hecho escalofriante que tuvo eco a nivel nacional.
Rafael Díaz, “Rafa Wayne” o “el Uber más conocido de Juárez”, se encontraba haciendo una transmisión en vivo en sus redes sociales de TikTok mientras subía a pasajeros y realizaba su trabajo como conductor de plataforma.
Era una de tantas noches en las que había hecho lo mismo, una y otra vez, alegrando la vida de sus espectadores con música, relatos e historias propias y de quienes subían a su vehículo durante la madrugada.
Pese a lo divertido que eran sus directos, Rafa no había estado exento de que le pasaran cosas desagradables, debido a que en ocasiones anteriores había sufrido intentos de asalto, pero cada noche, Rafa cumplía de manera puntual la transmisión hacia sus seguidores.
Sin embargo, aquella noche, unos gritos externos asustaron a su audiencia en plena transmisión. Eran unos hombres que violentamente le pedían dinero y el celular: estaba siendo víctima de un asalto, pero la transmisión seguía activa en la red social.
De pronto, se observó cómo Rafa pusó en “pausa” el directo y solo quedó una pantalla blanca, en silencio.
La voz de Rafa se apagó
Aquella transmisión nunca se reanudó ni tampoco se volvió a escuchar la voz de Rafa, como lo vaticinaban los comentarios del video. Había sucedido lo peor: tras ser víctima de un asalto y recibir tres impactos de bala, el cuerpo de Rafael Díaz quedó sin vida dentro de su vehículo.
Según Ivette Guadalupe Pichardo, una de las administradoras del grupo Conductores Por Juárez, en los últimos cuatro años, historias trágicas como estas se han repetido 35 veces en Ciudad Juárez.
En lo que va de este año, según sus estimaciones, al menos 6 conductores han perdido la vida de manera violenta. Sin embargo, anticipan que puede haber más victimas debido a que hay muchos conductores que no están dentro de los grupos de apoyo, por consiguiente, no se tiene conocimiento exacto de lo que les sucede.
Un trabajo de alto riesgo
Guadalupe Pichardo menciona que entre los principales riesgos que tienen para ejercer su trabajo van desde aquellas personas que intentan tomar un viaje sin pagar, aquellas que les faltan el respeto, seguido por el acoso, intimidación y el robo de sus pertenencias y vehículos.
Entre todos, el principal problema al que se enfrentan los conductores de plataforma en la ciudad son los asaltos que, según testimonios, se presentan mayormente a plena luz del día.
Aunque no cuentan con un número exacto de denuncias, señala que semanalmente atienden alrededor de cinco intentos de robo. Incluso, Pichardo menciona que ella misma ha sido víctima de este delito en dos ocasiones, en las que terminaron despojándola de su vehículo y sus pertenencias.
“Me ha pasado dos veces que me han quitado absolutamente todo. Sucedió en el día, porque ellos no tienen un horario, entonces tú piensas que puede ser más peligroso en la noche y lamentablemente no, ellos buscan el momento nada más”, relató.
Si bien destaca que, en las dos ocasiones en las que fue víctima de robo, pudieron encontrar los vehículos, al momento de hallarlos estaban totalmente desmantelados y el resto de sus pertenencias se habían perdido totalmente, por lo que siempre tenía que volver a empezar de cero.
“Es volver a conseguir para rentar un auto, para comprar un celular, recuperar nuestras cuentas. A veces hay compañeros y compañeras que viven al día y si se nos complica porque nosotros no tenemos un reconocimiento laboral como tal y ni nada que nos proteja, ningún seguro ni nada, entonces sí batallamos”, agregó.
Un mapa de seguridad para protegerse
Por su parte, Cecilia Cabrales, administradora y encargada de seguridad de Conductores Por Juárez, aseguró que internamente tienen un “mapa de seguridad” en el que clasifican aquellas colonias más “peligrosas” en las que los conductores deben evitar ingresar.
De acuerdo a los acontecimientos violentos que han ocurrido recientemente, destacan como las zonas de mayor riesgo la Sierra Vista, Pánfilo Natera, Ladrilleras, Anapra, Riberas del Bravo, la franja fronteriza, entre otras.
Pese a que no prohíben manejar dentro de estas colonias, sí piden a los conductores mantener una comunicación constante al momento de ingresar a estas zonas y prevenir cualquier acontecimiento violento.
La unión que nació de la necesidad de estar protegidos
Sobre la formación del grupo de apoyo, las administradoras cuentan que en 2020 convocaron a una caravana masiva que reunió a 350 conductores de plataforma que tenían la intención de estar organizados para defenderse unos a otros, lo que desencadenó en la creación de Conductores por Juárez.
Señalan que desde que nació la organización han tenido una comunicación abierta y constante con las autoridades de los distintos niveles de Gobierno. Refieren que elementos de las Policías les han dado capacitaciones en seguridad y han logrado la creación de un protocolo que ayuda de manera efectiva a atender los incidentes que se presentan durante la jornada.
Sin embargo, señalan que esos esfuerzos han resultado ser insuficientes debido a que la situación de violencia los ha rebasado y necesitan mayor seguridad para desempeñar su trabajo.
La ausencia de las empresas para las que trabajan
Por parte de las empresas que los contratan en las distintas plataformas (Didi, Uber, InDriver) relatan que han tenido negativas debido a que los ejecutivos consideran que no pueden hacer más por los conductores y que las medidas existentes son las únicas que pueden hacer para garantizar su seguridad, lo que los deja prácticamente indefensos ante cualquier ataque.
Por ahora, están convencidas de que la unión hace la fuerza y que es indispensable que los conductores trabajen en equipo para protegerse. Sin embargo, casos como la desaparición de 5 conductores que se presentó el pasado 30 de mayo, mientras manejaban en la carretera Chihuahua-Aldama, les congela el alma, pero hace necesaria su labor, por lo que seguirán exigiendo mejores condiciones laborales para únicamente tratar de seguir llevando comida a sus familias.