Una de las mejores cosas que puedes hacer por ti misma después del embarazo es ejercitarte.
La actividad física tiene muchos beneficios que impactan positivamente en la salud de tu cuerpo y mente.
Si te preguntas cuándo es conveniente regresar a la rutina, esto dependerá del tipo de parto que tuviste; si fue natural y sin complicaciones, es seguro hacer ejercicio unos días después o tan pronto como te sientas lista.
Para quienes tuvieron una cesárea o un parto complicado, la recomendación es hablar con el médico, quien podrá indicar cuál es el momento ideal.
150 minutos a la semana
Durante los primeros días después del parto, prueba con 150 minutos por semana de actividad aeróbica moderada.
Comienza por algo sencillo, por ejemplo, una caminata al día, yoga o ejercicios de Kegel, donde se trabajan los músculos del suelo pélvico.
Y no olvides tomar en cuenta las siguientes recomendaciones:
-Toma un tiempo para precalentar y recuperarte tras la rutina de ejercicios
-Inicia lento y aumenta el ritmo progresivamente
-Bebe mucha agua
-Utiliza un sostén firme y almohadillas de lactancia si estás amamantando
-Si sientes dolor deja de hacer ejercicio
Beneficios
El ejercicio después del embarazo mejora el sistema cardiovascular, fortalece y tonifica los músculos del abdomen, aumenta el nivel de energía, reduce el estrés, beneficia la calidad del sueño, ayuda a bajar de peso y reduce los síntomas de la depresión posparto.
Durante la lactancia materna
-El ejercicio moderado no afecta la cantidad o calidad de la leche materna. Si estás amamantando, asegúrate de mantenerte bien hidratada.
-Investigaciones señalan que el ejercicio de alta intensidad puede causar la acumulación de ácido láctico en la leche materna, por lo que podría producir un sabor agrio que no es del gusto de los bebés.
-Si aún te encuentras en los primeros meses después del parto y has empezado con sesiones de ejercicio intenso, considera amamantar a tu bebé antes de entrenar o extraer la leche y alimentarlo después con ella. Otra opción es hacer ejercicio, luego darte un baño y extraer unos milímetros de la leche, y después de media hora o una hora, alimentarlo.
