Esta tarde, una mujer de 35 años protagonizó un recorrido que dejó huella en el asfalto, en los autos y en la paciencia de decenas de conductores.
Circulaba de norte a sur por la avenida Francisco Villarreal Torres, al volante de un vehículo blanco y bajo los efectos del alcohol, cuando el descontrol se convirtió en riesgo.
El primer golpe fue en el cruce con Tres Cantos, donde impactó un auto gris y decidió seguir adelante, como si nada hubiera pasado.
Metros más adelante, a la altura del Rancho del Zorro, su trayecto terminó de forma abrupta: chocó contra una barrera metálica.
El golpe la lanzó al camellón y provocó un choque que involucró a una camioneta F-150 blanca y un señalamiento municipal que terminó en el suelo.
Los agentes de Seguridad Vial llegaron para encontrar un paisaje de tráfico detenido y fierros torcidos. En medio, Itzel, todavía intentando mantener el equilibrio en medio de la situación. Fue detenida y trasladada ante un juez de Control.
