El Covid-19 ha afectado la salud mental de los juarenses. Sin embargo, no es lo único que cargamos.
A esto hay que sumarle la situación de la ciudad, con violencia, problemas económicos, inseguridad, estrés provocado por el cierre de fronteras y el desorden en las calles derivado de los baches y obras inconclusas.
Todas esas situaciones se traducen en ansiedad y depresión.