¿Te gustaría inscribir a tu hija o hijo en una actividad extra escolar y no sabes cuál elegir? Hoy te damos 10 razones para elegir el ballet, una disciplina con múltiples ventajas para la salud y el desarrollo integral de los pequeños.
Sus entrenamientos hacen que trabajen todos los músculos, lo cual se traduce en un desarrollo físico armónico y sano.
El movimiento estimula la circulación sanguínea, un factor clave para el desarrollo y crecimiento de los músculos, huesos y articulaciones.
Al inscribirlos a temprana edad, los niños desarrollan una mejor coordinación de sus movimientos.
Con su práctica se activa la respiración y se garantiza una oxigenación suficiente.
Por su naturaleza, el ballet ayuda a tener una postura correcta, lo cual previene la escoliosis y otros problemas de la columna vertebral.
Los niños que lo practican son mucho más flexibles.
Al ser una disciplina de danza, se acompaña de música, lo que ayuda a mejorar el oído musical y el desarrollo de su creatividad y expresión artística.
Si tus hijos ya tienen problemas de postura, sobrepeso o pie plano, los entrenamientos ayudan a corregirlos.
Al participar en las presentaciones, los pequeños desarrollan seguridad y aceptación de sí mismos.
Su entrenamiento regular ayuda a mantener el peso ideal y previene la acumulación de grasa en el cuerpo.
