LOS MAGISTRADOS del Tribunal Estatal Electoral (TEE) Jacques Adrián Jácquez Flores y César Wong Meraz empacaron el miércoles una maleta ligera y se fueron a la Ciudad de México en el vuelo de las 5 de la tarde de Aeroméxico, en clase premier.
SU PERIPLO por el Altiplano mantuvo en zozobra a los otros tres integrantes de la magistratura, porque no dieron explicaciones de ningún tipo, pese a que tienen encima la convocatoria a sesión para desahogar sentencias pendientes, especialmente la relacionada con la impugnación del PRI a la elección de gobernador.
TODO mundo especulaba ayer en el Tribunal que Wong y Jácquez fueron a cabildear el proyecto de sentencia con abogados cercanos a los integrantes del Tribunal Federal, sobre todo el escenario de una posible anulación de los comicios de gobernador.
MIRONE ya lo publicó desde hace dos semanas. Los votos de los magistrados están dos a favor de la nulidad, que serían de los genéticamente puros de ADN tricolor, César Wong –ministro presidente y ponente del proyecto de sentencia– y Jacques Adrián Jácquez Fores. Otros dos híbridos políticos de priista con petista y priista con panista (se acabó el pedigrí), como Víctor Yuri Zapata Leos y José Ramírez Salcedo, se han decantado en contra. En medio queda Julio César Merino Enríquez (petista) como el voto a definir.
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DE AHÍ el urgente cabildeo de Wong y Jácquez. Ambos ponen en riesgo más que su carrera con el fallo a favor de la nulidad y les vienen muy bien argumentos recargados para terminar de convencer a Merino, porque la consistencia profesional y el apego a la legalidad de los otros dos magistrados, Víctor Yuri Zapata y José Ramírez Salcedo, no los ha hecho caer presas del embrujo del poder y del dinero.
SE SABE que uno de esos dos magistrados ya tiene lista su argumentación para fundamentar su voto a favor de desechar la impugnación tricolor; si por las vísperas se saca el día, lo más seguro es que sea Víctor Yuri Zapata el primero en marcar con claridad su postura dentro de la judicatura.
POR SI LAS moscas, en redes sociales ya corre un mensaje del activista Jaime García Chávez a manera de interrogante, “pregunto: en el remoto caso de un fallo adverso del Tribunal Estatal Electoral a la impugnación de la elección de gobernador, ¿vamos de nuevo al Palacio de Gobierno a imponer la razón y el derecho? Me apunto por la afirmativa”.
SE SABE también de una idea peloteada entre la militancia del PAN, principalmente mujeres, que están dispuestas a sentarse fuera de las instalaciones del Tribunal, vestidas de blanco, en una acción de resistencia pacífica estilo Gandhi, para esperar el fallo de los magistrados.
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NO HAY visos de que la decisión de incorporar al capitán retirado del Ejército Juan Manuel Escamilla como jefe de seguridad del gobernador electo vaya a ser revocada como le han pedido al Javier Corral algunos de sus aliados.
EL EQUIPO del electo insiste en que la designación fue una decisión personal, informada y responsable del propio Javier Corral y “en ella se calculó el riesgo de que surgiera de nuevo la información relacionada con sus antecedentes, pero en todas las consultas con órganos de seguridad no se encontró ningún expediente abierto que lo implique en hechos negativos, y de las propuestas que se le hicieron la de Escamilla fue la más completa por su perfil y experiencia”.
LO EXTRAÑO del caso es que en ese expediente no aparezca la recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos al Municipio de Juárez, por los hechos en los que Escamilla se vio envuelto como jefe de la Policía municipal en el 2005 y queda la duda: si las recomendaciones de la CEDH no son vinculantes, ¿para qué pagamos tanto dinero por un órgano de esa naturaleza?
PERO MÁS extraño aún es el mutis de las organizaciones y activistas de derechos humanos vinculados a la Alianza Ciudadana que apoyan el proyecto de gobierno de Javier Corral. Si fuera César Duarte, Patricio Martínez y hasta Reyes Baeza, que las trató con pinzas, ya hubieran hecho un escándalo de dimensiones nacional e internacional. Ahora están más suaves que un mazapán.
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EL GOBERNADOR César Duarte se mantuvo ayer acantonado en Palacio. Citó a las cabezas del gabinete y empezaron a revisar los pendientes que les traen inquietos con la cuenta regresiva para el adiós. Existe cada vez más la convicción de desaparecer el sexto y ultimo Informe de Gobierno, al menos para efectos mediáticos.
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ESTA SEMANA el gobernador electo Javier Corral nombró al exdirigente estatal, Fernando Álvarez Monje, como representante del próximo Gobierno estatal ante el Congreso de la Unión para cabildear lo necesario en el tema del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
EL ANUNCIO SE dio en el marco de la reunión de capacitación para alcaldes electos del PAN llevada a cabo el pasado martes en la capital, donde Álvarez Monje fue presentado por Gustavo Madero como estrella de la gestión del Gobierno corralista ante la Federación.
ASTUTO COMO es, Javier Corral no esperará hasta que inicie su gobierno para comenzar el cabildeo y negociaciones en relación con el presupuesto federal, sobre todo en un contexto lleno de crisis financieras con constantes recortes presupuestales que amenazan el presupuesto propio de Chihuahua.
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MUY POCO les duró el gusto a los próximos funcionarios municipales que ya han conocido los emolumentos que guarda para ellos la Presidencia municipal; recientemente se supo que el futuro alcalde, Armando Cabada, anunció que se dará reversa a los últimos incrementos salariales.
Y ES QUE, quizá en un intento de hacer su año de Hidalgo, el Cabildo había previsto desde el año pasado un ligero incremento en este 2016 a sus percepciones, pero también a la de todos los directores, jefes de departamento, al alcalde y a casi 4 mil empleados más.
PERO EL GOBIERNO independiente comenzará marcando la diferencia precisamente en ese detalle que tiene que ver con los ingresos de los funcionarios municipales de primer nivel que superan cualquier percepción de trabajo honesto y en las mismas condiciones.
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LAS PICUETONAS fuentes mironianas aseguraron que el poder casi casi absoluto que tenía Enrique Serrano antes de ser candidato al Gobierno del Estado poco a poco se va disipando conforme se llega el final del trienio.
Y ES QUE todas las órdenes, sugerencias e indicaciones que hacía el alcalde con licencia a su suplente Javier González Mocken ya se ponen entredicho y son cuestionadas, informan los chismosones servidores públicos.
AHORA, CUANDO Serrano hace “recomendaciones” a sus “amigos” de la alcaldía, ya no se aceptan a manera de ley tal como sucedía hace apenas unos meses cuando era el candidato del PRI a la gubernatura, cuando era todopoderoso y lo veían a priori como el gobernador. Hoy la historia es otra. Varios en el Municipio lo ven muy diferente y eso no se puede y no lo quieren ocultar.
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PARA CERRAR la pinza, el alcalde electo, Armando Cabada Alvídrez, ayer se reunió con el alcalde de Sunland Park, Javier Perea, a fin de generar desde ahora acuerdos que permitan agilizar proyectos una vez que comience su gobierno.
CON ESTE ENCUENTRO Cabada habría logrado en una semana lo que regularmente un presidente municipal no hace en meses o el primer año de su administración, y eso que aun no recibe la estafeta en el Ayuntamiento. Esta semana también se vio con el alcalde de El Paso, Oscar Leeser, y la embajadora de Estados Unidos, Daria Darnell, con quienes logró importantes acuerdos en materia de seguridad pública para Juárez.
EL ALCALDE independiente no pierde de vista que la próxima gestión será de menos de dos años, por eso trata día a día de ganarle tiempo al tiempo, sobre todo por el deseo de hacer no un gobierno bienal, sino extenderlo a todo un quinquenio, en virtud de la reelección para alcaldes y diputados que se estrena en el 2018.
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MÁS DATITOS que hablan de la operación troyana en el PRI para mandar hacer nuevo al excandidato a la alcaldía por ese partido, Héctor “Teto” Murguía.
AYER PUBLICAMOS en este siempre tan humilde espacio que Raúl González Bernal y el ingeniero José Luis Leyva se ven más que firmes en la futura nómina municipal que dirigirá el hoy edil electo, Armando Cabada.
ESE DATO habla de la habilidad que tuvo Armando para colar su influencia hasta el área de inteligencia electoral del PRI estatal, donde operaban González Bernal y Leyva como posiciones nada más y nada menos que de la senadora y exprecandidata a gobernadora Lilia Merodio Reza.