Antonio Pinedo, el excoordinador de Comunicación Social de Javier Corral a quien se le abrieron dos causas penales por delitos de corrupción, pudo salir de prisión gracias a que se apegó al criterio de oportunidad.

Eso no quiere decir otra cosa, más que la Fiscalía Anticorrupción de Chihuahua va por un pez más grande, lo cual necesariamente implica que Abelardo “El Bayo” Valenzuela, le está armando una carpeta al exgobernador Javier Corral Jurado, casi tres años después de que concluyó su gestión.

Lo que plantea el Código Nacional de Procedimientos Penales es que opera el criterio de oportunidad cuando el imputado aporta información esencial y eficaz para la persecución de un delito más grave del que se le imputa.

Se supone entonces que la Fiscalía trae una investigación por delitos de mayor gravedad y complejidad que involucra a servidores públicos de mayor jerarquía.

Así que ya está en la mira el exgobernador Corral, aunque puede haber otros involucrados que también coincidieron con el tiempo en que Pinedo estuvo en Comunicación Social, como es el caso del todavía senador que fungió como coordinador ejecutivo de Gabinete, Gustavo Madero.

Dice bastante sobre ese objetivo final de ir tras Corral, el hecho de que el exsecretario de Salud, Eduardo Fernández, quien había sido vinculado a proceso, también se acogió al criterio de oportunidad para aportar mayor información.

Fernández fue acusado de uso ilegal de atribuciones, respecto a la contratación de un crédito de 401 millones de pesos para el Instituto Chihuahuense de la Salud (Ichisal). Fue detenido en mayo del 2023. Aunque fue vinculado a proceso, recuperó la libertad al depositar una garantía de 800 mil pesos y acatar la orden de un juez de no salir del país.

En el caso de Pinedo, al exfuncionario se le acusó primero de uso ilegal de atribuciones y facultades, además de peculado agravado por otorgar contratos por 9.5 millones de pesos a una empresa vinculada con su pareja sentimental.

Luego se le abrió una segunda causa penal por haber cobrado indebidamente 160 mil pesos cuando ya no trabajaba en Comunicación Social. Trascendió que, para lograr su libertad, regresó esa cantidad.

A ver ahora qué pasa. La Fiscalía de El Bayo puede ampliar la investigación sobre los delitos imputados originalmente a quienes se acogieron al criterio de oportunidad, pero también a otros hechos de los que hayan tenido conocimiento.

Sin embargo, no se sabe todavía qué otro hecho presumiblemente constitutivo de delito sea el que se esté armando para ir en contra de Javier Corral, quien en septiembre se convertirá en senador y por lo tanto tendrá fuero constitucional.

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Todavía ayer anduvieron presumiendo cómo les fue en Parral. Todos los que ya andan adelantados pensando en la gubernatura para el 2027, siguieron con el ruido mediático que armaron desde el fin de semana, con la llegada de la Cabalgata Villista a la capital del mundo.

“Que Dios los oiga”, dijo Cruz Pérez Cuéllar cuando los periodistas le preguntaron en su conferencia de los lunes qué pensaba de los gritos que recibió en Parral, supuestamente con un “¡Cruz gobernador!”.

Lo mismo el alcalde panista de la ciudad de Chihuahua, Marco Bonilla. También dijo que le fue muy bien en Parral, donde aprovechó el viaje para reunirse con militantes blanquiazules. “Parral nos recibió como si estuviéramos en nuestra casa”, aseguró este lunes a los periodistas de la capital.

Allá también andaba su principal competencia por el PAN, el alcalde de Delicias, Jesús Valenciano, quien ya trae el visto bueno de la gobernadora Maru Campos para moverse por todo el estado. A ver si pinta.

Claro que por Morena, tampoco podía faltar la senadora electa, Andrea Chávez. Llegó a lomo de caballo a repartir abrazos y en uno de sus mensajes publicado en redes hasta se aventuró a decir que los integrantes del grupo que hoy gobierna en Chihuahua “en 2027 se irán para siempre del poder”.

El caso es que nadie desaprovechó el tradicional evento de conmemoración del aniversario luctuoso de Pancho Villa, para placearse en Parral.

Por cierto, a Cruz Pérez todavía le alcanzó el vuelo para irse el domingo hasta Camargo y Jiménez, donde se reunió con liderazgos morenistas “para que se unan a nuestro movimiento”.

Lo dicho: todos andan desatados, nomás suspirando por el 2027.

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Aquí lo habíamos publicado hace rato. Rosalía Ochoa Achaval se sentía intocable en la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas de Gobierno del Estado.

Por su relación estrechísima con Mario Vázquez, el anterior titular de esa dependencia que ahora va de senador de representación proporcional, se había quedado con la Secretaría Técnica, allá en la capital del estado.

Cuando hablamos sobre su caso, habían llegado a Mirone múltiples quejas de maltrato a personal, pero también reportes de que incluso le gustaba ningunear a los contratistas que por ahí deben de tocar base.

Hasta gritaba a los cuatro vientos que era inamovible, pero finalmente, se le acabó la suerte.

Supo Mirone que ya fue removida por Jorge Chánez, quien se había quedado como encargado de despacho, pero parece que ya fue palomeado por Palacio para seguir definitivamente al frente de esa dependencia. Hizo bien su trabajo y se ganó la confianza para poder quedarse con su gente y remover elementos indeseables.

A ver ahora si Ochoa Achaval podrá seguir presumiendo los viajes que hacía por Europa con Mario Vázquez.

Por cierto, donde seguramente también perderá espacios el próximo senador Vázquez, es en el Congreso del Estado, donde antes fue coordinador de bancada. Trascendió que se le dio luz verde a Alfredo Chávez (quien lo sustituyó en la coordinación cuando Vázquez se fue a Obras Públicas,) para que arme su propio equipo de confianza.

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Muy buena balconeada se llevaron a nivel nacional varios millonarios, líderes opositores a la 4T, pero también secretarios de Estado del Gobierno Federal que, sin necesitar ese dinero, cobran religiosamente la Pensión del Bienestar.

En publicación periodística se evidenció cómo hay magnates que no dejan ir los seis mil pesos bimestrales que otorga la Administración federal.

La pensión es universal y es derecho de todos, pero para cobrarla hay que registrarse, por lo que los beneficiarios deben hacer su respectivo trámite, lo que cumplieron empresarios de la talla de Alfonso Romo, Gerardo Garza Sada y David Garza Lagüera, integrantes de las familias más ricas de México.

También están exgobernadores de la oposición, como el priista del Edomex, Arturo Montiel Rojas y el panista de Baja California, Ernesto Ruffo Appel. Todos tienen más de 65 años, por eso tienen derecho a la pensión, la misma que cobra también el propio presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador.

Además de AMLO, varios de sus colaboradores de Gabinete estén en el registro de Bienestar: Jorge Alcocer Varela (Salud), Roberto Salcedo Aquino (Función Pública), Víctor Manuel Villalobos (Medio Ambiente) y Miguel Torruco Marqués (Turismo).

Como beneficiarios también están los familiares del presidente, como sus hermanos Pedro Arturo y José Ramiro, además de su prima Felipa Guadalupe Obrador Olán.

Hay además gobernadores en funciones como Rubén Rocha Moya, de Sinaloa, y Víctor Manuel Castro, de Baja California Sur, quienes en junio se llevaron de un jalón 18 mil pesillos, porque traían un acumulado pendiente no cobrado durante la veda electoral.

Otros nombres que destacan son el del exgobernador de Nuevo León, el panista Fernando Canales Clariond y Luisa María Calderón, exsenadora, diputada federal y hermana del expresidente Felipe Calderón.

Total, nadie le hizo el fuchi a las ayudas que provienen del erario federal, aún quienes desde alguna forma han cuestionado los esquemas de transferencias directas de recursos a la población y en diversos momentos calificaron por ello de populista a López Obrador.