No hay fecha que no llegue, ni plazo que no se cumpla. Este domingo 2 de junio se definirá quiénes ejercerán el poder y, se supone, representarán a los electores desde los diversos cargos de elección popular que están en juego en el escenario municipal, estatal y federal.

Se trata del proceso electoral más grande y complejo de la historia. Más de 98 millones de mexicanos están llamados a las urnas para decidir en elecciones convergentes, un total de 20 mil 708 cargos públicos en todo el país.

De acuerdo con el listado nominal del Instituto Nacional Electoral, están en posibilidades de votar 98 millones 409 mil 061 electores, lo que representa casi 9 millones de personas más que en las elecciones generales de 2018. Otros 675 mil 127 mexicanos votarán desde el extranjero.

En el plano federal, además de la Presidencia de la República, se renovará el Congreso de la Unión: 128 senadores y 500 diputados (300 de mayoría y 200 de representación proporcional, los llamados plurinominales).

De las senadurías, 64 serán elegidas por el principio de mayoría relativa, 32 de primera minoría, y las 32 restantes por el principio de representación proporcional con base en listados partidistas.

En el caso de Chihuahua, los electores definirán directamente dos nombres de senadores como ganadores de una curul en la Cámara Alta (primera y segunda fórmula que oferta en la misma boleta, cada coalición o partido) y un tercer nombre que corresponderá a la primera fórmula del partido o coalición que obtenga el segundo lugar de la votación.

El estado tiene 9 de los 300 distritos electorales federales. Cuatro de ellos con cabecera en el municipio de Juárez.

Si hablamos del plano local, nunca en la historia se había votado en una sola elección por seis cargos distintos. Cada juarense recibirá seis boletas y por lo tanto se colocarán en las casillas seis urnas diferentes: Presidencia de la República, Senado, diputaciones federales, Presidencia Municipal, Sindicatura y diputaciones estatales.

De los 22 distritos en los que se divide el estado, nueve de ellos corresponden al municipio de Juárez. En esta frontera se concentra el 42 por ciento de todo el listado nominal de Chihuahua. De acuerdo con el corte del INE correspondiente a marzo de 2024, Juárez tiene un millón 299 mil 624 electores de un total de 3 millones 082 mil 310 que tiene todo el estado.

Es de ese tamaño la importancia electoral de esta frontera. En comparación con el listado nominal del 2021, hubo un crecimiento de 157 mil 652 registros en Juárez.

Además, de las 5 mil 785 casillas, el 38.78 por ciento, es decir, 2 mil 244, se instalarán en este municipio.

En todo el estado cerca de 8 mil candidaturas competirán por el sufragio ciudadano en los 67 municipios. Nada más en las listas de candidatos a regidores que buscan integrar los Ayuntamientos y van en planilla, acompañando a candidatos a las presidencias municipales, se registraron 423 aspirantes titulares, más igual número de suplentes. 

En el país, se elegirá también a gobernadores en ocho estados: Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán, además de la jefatura de Gobierno en la Ciudad de México.

En 29 entidades se renovarán presidencias municipales o Ayuntamientos; y en la capital del país se elegirá a los nuevos titulares de 16 alcaldías.

Por eso se habla de la elección más grande de la historia, que es además compleja por la presentación de variados escenarios y hechos inéditos.

El actual proceso electoral registró una violencia alarmante. De acuerdo con los reportes periodísticos, al menos 30 candidatos han sido asesinados en distintas partes del país.

Se han presentado además múltiples agresiones, tanto a aspirantes como a personas relacionadas con el proceso electoral.

En esta ciudad ya hubo denuncias públicas y además presentadas ante instancias prejudiciales, respecto de algunas agresiones y amenazas en contra de candidatos y colaboradores de las campañas.

No es la violencia electoral lo que aquí ha marcado el proceso, pero sí puede señalarse que se llega a la jornada de hoy bajo un ambiente bastante tenso, al menos entre los equipos de los distintos candidatos.

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Los juarenses elegirán a su próximo alcalde de entre seis opciones, cada una con características muy peculiares.

Las alternativas son el alcalde con licencia, Cruz Pérez Cuéllar; el ex diputado local y exrecaudador de Rentas en la Zona Norte, Rogelio Loya Luna; la exdiputada federal y síndica con licencia, Esther Mejía Cruz; el exdiputado local, Luis Fernando Rodríguez Giner; el médico, Jesús Enrique Romanillo Leyva; y el youtuber, rapero e influencer, Jaime Flores Aguirre, conocido también como Máquina de Fuego.

De ellos, cuatro han tenido experiencia política y tres participan en el actual proceso bajo siglas de diferentes organizaciones políticas a las que representaron en contiendas anteriores: Pérez Cuéllar fue panista, de Movimiento Ciudadano y ahora de Morena; Rodríguez Giner fue priista y ahora es verde-ecologista; mientras que Mejía Cruz fue de Morena y ahora busca el voto popular bajo las siglas del movimiento naranja.

El único que sigue en su casa política original es Loya Luna, mientras que Romanillo Leyva y Flores Aguirre son los “novatos”, electoralmente hablando; ambos estrenan partidos, el primero va por México Republicano y el segundo por Pueblo.

Cada uno de los contendientes arrastra su muy particular historia, como Pérez Cuéllar, quien llegó a la Presidencia Municipal de Juárez en las elecciones de 2021 y cuya candidatura por Morena le fue otorgada en compensación, luego de que fue descartado como contendiente a la gubernatura de Chihuahua por ese organismo político.

El morenista ya había sido candidato para la alcaldía de Juárez en 2004 por la coalición Todos Somos Chihuahua del PAN, PRD y Convergencia, pero perdió contra Héctor Murguía Lardizábal de Alianza con la Gente, formada por PRI, PVEM y PT, poniendo fin a la hegemonía que tuvo por 12 años el PAN en esta frontera.

Salió del PAN en 2015 y fue presentado por Movimiento Ciudadano como candidato externo a la gubernatura en 2016, cuando tampoco ganó ya que su excompañero panista, Javier Corral Jurado, lo superó en las urnas.

Ahora, la Administración del alcalde con licencia se ha caracterizado por varios escándalos, como que en abril pasado fue desalojado de la casa que rentaba en El Campestre, en 70 mil pesos mensuales a su exdirector de Regulación Comercial, Daniel Pando Morales, propiedad que le fue asegurada por la Fiscalía Anticorrupción como parte de una investigación abierta por enriquecimiento ilícito.

Además, enfrenta otras 10 carpetas de investigación por mal uso de recursos públicos, las que fueron interpuestas ante la misma instancia investigadora por situaciones aparentemente anómalas en la compra de mochilas, apoyos económicos a escuelas, adquisición de pruebas Covid-19, instalación de una casa de cambio en terrenos vedados de El Chamizal, contratos de bienes y servicios asignados de forma directa y sin justificación, además de la adquisición de artículos de limpieza en una empresa de su exdirector de Desarrollo Económico.

Loya Luna, quien representa al PAN, se ha mantenido al margen de escándalos, aunque el mismo día que renunció a su cargo estatal para asumir de lleno su candidatura, se registró un robo por 700 mil pesos de la dependencia, hecho que fue utilizado en su contra, al menos durante el debate oficial entre candidatos.

Durante la campaña, debió terminar con la amistad que entabló con Pérez Cuéllar desde el inicio de ambos en el PAN; desde cualquier foro donde estuvo lo tachó de corrupto.

Mejía Chávez, por su parte, cimbró el ambiente político desde que dirigió las baterías de la Sindicatura en contra de Pérez Cuéllar, cuando en la mayor parte de su gestión casi no había hecho observaciones importantes. Pronto se reveló su intención de obtener la candidatura de Morena a la alcaldía en 2024, pero no la obtuvo.

Sin embargo, Mejía dio otro giro en su carrera política y aceptó representar a Movimiento Ciudadano en la contienda, rompiendo con el movimiento que la llevó a la escena política a través de la diputación federal que ganó en 2018.

Aunque entre 2013 y 2016 Rodríguez Giner fue diputado local por el PRI, y ocupó diversos puestos en esa organización política, ahora aparece como abanderado del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).

Romanillo Leyva, de México Republicano de Chihuahua (MRCH), es un médico cirujano egresado de la UACJ, quien fue jefe de la Jurisdicción Sanitaria I (en la ciudad de Chihuahua) en 2014 y ha participado en diversos programas para llevar atención médica a la población fronteriza.

El más joven de los contendientes, con 26 años de edad, es Flores Aguirre, quien desde sus redes sociales hizo campaña criticando las formas políticas establecidas y a sus representantes, a quienes encaró en los foros donde estuvo presente, ofreciendo un esquema de administración pública centrada en estudios antropológicos.

Si se revisa la historia electoral, se observa que en 2021 Pérez Cuéllar ganó la Presidencia Municipal con 213 mil 073 sufragios, el equivalente al 48.9 por ciento de la votación. Su más cercano competidor fue Javier González Mocken, representante de la coalición del PAN con el PRD, quien logró el 27.41 por ciento, con 119 mil 952 votos.

En 2018, la alcaldía fue obtenida por el independiente, Armando Cabada Alvídrez, quien alcanzó el 34.43 por ciento de los sufragios con 176 mil 245. En segundo lugar quedó González Mocken, quien en ese año participó como candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, formada por Morena, PT y Encuentro Social, alcanzando 175 mil 756 votos, el 34.34 por ciento.

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En el plano local y estatal, no es el simple resultado de hoy lo que está en juego. Se trata más bien de los proyectos futuros de cada actor político.

La mira ya está puesta en el 2027. Por eso importa no únicamente quién gana, sino cómo gana; o quién pierde, sino cómo pierde.

En el caso de la candidatura por la alcaldía, las proyecciones de estadística electoral, las encuestas, el despliegue de recursos, las estructuras y la operación territorial visible, ubican como claro favorito al alcalde con licencia en busca de la reelección por Morena y PT, Cruz Pérez Cuéllar.

Si se confirma su victoria este domingo, sin duda será importante ver su estado de cuenta respecto a qué tantos votos alcanzó en comparación con la elección anterior o por cuántos puntos porcentuales ganó a su más cercano competidor.

También se deberá revisar cómo se comportó el voto diferenciado. Qué tanta fue su votación, por encima o por debajo, por ejemplo, de la elección para senadores. Sobre todo, si su apellido o fuerza electoral aportó o perjudicó al objetivo o discurso partidista del carro completo en Juárez.

Más específicamente, tendrá una victoria o una derrota contundente, si el Distrito 04 federal, en el que compite su hermano Alejandro Pérez Cuéllar, se gana o se pierde. Lo mismo puede trasladarse en la elección de los distritos locales, donde Morena apuesta a ganar el 05 que hoy es del PAN, mientras que los panistas, en su alianza con el PRI, no únicamente buscan retenerlo, sino ampliar su control al 04 que hoy tiene Morena.

Esos resultados adquieren la mayor relevancia respecto al proyecto futuro de Pérez Cuéllar por la gubernatura, dentro de tres años. Prácticamente lo mismo deberá observarse en la capital del estado respecto al alcalde con licencia, Marco Bonilla, quien va por la reelección como favorito, pero está además en un carril por la gubernatura para el 2027.

Este domingo también habrá una definición de la mayor trascendencia en cuanto a la conformación del Congreso del Estado. La alianza PAN-PRI quiere mantener la mayoría que hoy tiene con apoyo de Movimiento Ciudadano, pero Morena apuesta por revertir los números en su favor.

Está en juego nada menos que el margen de maniobra política para la gobernadora Maru Campos en el segundo periodo de su gestión. Qué tan fuerte o qué tan debilitada puede cerrar su administración, depende en mucho de los resultados de hoy en los distritos electorales.

Además, esos resultados por distrito, y lo que pase en los principales municipios, determinarán en gran medida el resultado en la elección de senadores, todos los resultados anclados también con las preferencias que se marquen en la candidatura presidencial.

Ganar ocho de los 9 distritos locales que tiene Juárez, más el distrito con cabecera en Cuauhtémoc, le bastó a Morena para ganar la elección de senadores en 2018 (claro, con el efecto AMLO de por medio), pero hoy hay muy variadas reconfiguraciones políticas en el territorio estatal, por lo que es bastante incierto el resultado general.

Sin embargo, lo que pase en esa votación también es definitoria para el 2027. Tanto Mario Vázquez como Daniela Álvarez por el PAN, como Andrea Chávez y Juan Carlos Loera por Morena, tendrán mayores o menores bases para construir sus proyectos futuros, dependiendo de cómo ganen o cómo pierdan la elección de mayoría.

La elección convergente arrojará sin duda otros resultados históricos. Pero al menos en la elección presidencial, ya es prácticamente un hecho, por todas las proyecciones, encuestas y el alcance de las coaliciones y estructuras partidistas, que por primera vez resultará ganadora una mujer.

Se trate de Claudia Sheinbaum (Morena-PT-PVEM) o Xóchitl Gálvez (PAN, PRI, PRD), la equidad de género se materializará en la cúspide del poder público del país.

En general, se consolidará la paridad de género entre candidatos debido a una reforma constitucional aprobada en 2019, lo que cambiará la representación de las mujeres en las decisiones de la vida pública de México.

A partir de que se empiecen a desglosar los resultados a nivel nacional, estatal y local, ya veremos qué otras novedades electorales aportará el proceso que hoy alcanzará su clímax en las urnas.