Tanto al alcalde con licencia, Cruz Pérez Cuéllar, como a su exdirector de Regulación Comercial y casero, Daniel Pando Morales, les dieron palo en los juzgados de Distrito en su intento de recuperar la posesión de la casa de El Campestre.

Los dos recurrieron por separado a la solicitud del Juicio de Amparo contra el aseguramiento de la mansión por la cual presuntamente Cruz pagaba una renta (dijo que de 70 mil pesos al mes) a quien aparece como dueño en el Registro Público de la Propiedad, su excolaborador que también fue funcionario en la administración de Armando Cabada.

Se les negó la suspensión provisional, aunque el fondo del asunto todavía está pendiente de resolverse.

El aseguramiento de dos casas de la calle Del Fresno, una con el número 1564 donde residía Cruz y la otra con el 1642, la cual está en obra negra, se derivó de la carpeta de investigación que la Fiscalía Anticorrupción abrió luego de recibir una denuncia por enriquecimiento ilícito en contra de ambos personajes.

Aparte de las solicitudes de amparo contra el aseguramiento, están varios de los llamados amparos buscadores que promovió Daniel Pando, para ver si ya había orden de aprehensión en su contra.

Hasta ahorita van perdiendo Cruz y Pando el pleito legal, ya que no les concedió la autoridad federal la suspensión provisional de los actos de la autoridad estatal, a quien acusan los dos de actuar en este caso por mera coyuntura política.

En los juzgados de Distrito fueron claros al desestimar los argumentos para que se les restituyera la posesión de la finca y de los bienes muebles de su interior y no se les privara de su derecho a la vivienda.

Frente a ese interés meramente personal, se antepuso el interés de la sociedad por esclarecer los hechos presuntamente constitutivos de delito, ya que se considera el aseguramiento como una técnica de investigación necesaria para que no haya obstaculización de ningún procedimiento.

Además, los jueces federales consideraron que el aseguramiento permite garantizar que no se altere, destruya o desaparezca el entorno en que acontecieron los hechos presuntamente constitutivos de delito. En este caso particular, la propiedad puede constituirse en producto del delito.

La justicia federal también argumentó que es improcedente conceder la suspensión de los actos reclamados, si estos tienen el carácter de consumados, pues de hacerlo, equivaldría a darle efectos restitutorios que son propios de la sentencia definitiva que se pronuncie en el Juicio de Amparo respectivo.

Así que, hasta ahora, le resultó bueno el blindaje a la Fiscalía Anticorrupción de Abelardo “El Bayo” Valenzuela, al haber sometido el aseguramiento a control judicial.

Por esa misma circunstancia, el producto de la diligencia y su desahogo quedó en manos del órgano jurisdiccional.

Para que inicie la acción penal únicamente faltaría la formulación de la imputación ante el juez de Control.

Lo que ya no sabe este Mirone, es si la Fiscalía Anticorrupción se quedará nomás con imputación de enriquecimiento ilícito, o en las diligencias hubo hallazgos que permitan tipificar algún otro delito.

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En el Encuentro Empresarial con Candidatos organizado por el Consejo Coordinador Empresarial, que tuvo lugar el pasado 2 de mayo, Jaime Flores Aguirre, el influencer mejor conocido como Máquina de Fuego, aspirante a la Presidencia Municipal por el Partido Pueblo, en tono sarcástico hizo referencia a algunos de los que se encontraban en el escenario, por usar tarjetas informativas, para hablar de los temas que presentaron.

“Hermanos, a mí me enseñaron a no leer para exponer desde que estaba en la secundaria, si no se acuerdan de sus propuestas ahorita, ¿creen que se van a acordar cuando entren al Gobierno?”, cuestionó el joven que creció en la colonia Anapra tras afirmar que elevaría el nivel en el debate, por lo que los invitaba a prepararse, arrancando algunas carcajadas en el público, aunque también incomodidad, sobre todo en algunos de los organizadores.

El pasado martes, los candidatos a la Presidencia Municipal fueron convocados por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, para participar en el Foro Universitario: Decisión Juárez 2024.

El joven Máquina de Fuego sudó la gota gorda durante su intervención en el foro, en el que contaba con 30 minutos, al igual que los demás candidatos, para hacer la presentación de su propuesta como aspirante a gobernar Juárez.

Sin embargo, su discurso inició con una crítica sobre la falta de oportunidades que enfrentan los egresados universitarios hijos de obreros, ante la ausencia de plazas para ejercer su profesión. Hasta ahí, todo bien.

El enredo comenzó cuando quiso extraer de su memoria las propuestas que expondría al auditorio, se refirió a ellas como las genéricas, pavimentación, seguridad, la pobreza, un diseño antropológico de la ciudad, que estas sean para los ciudadanos y no para los peatones, densificar la ciudad, mejoras para policías. Todos los temas repasados por encima, sin una propuesta concreta.

Lo bochornoso, fue que apenas llevaba 5 minutos de su intervención de la media hora concedida, cuando la mente se le nubló “en el ámbito de… que… mmhhh. ¡Ah, se me fue!”, dijo el joven que cuenta con un canal de YouTube donde transmite videos de concursos donde regala dinero a gente que camina por el centro de la ciudad.

Fueron segundos en los que la musa no regresaba, el joven Flores Aguirre fijaba la vista al cielo, en busca de la ayuda de los dioses, hasta que le apareció en la mente la palabra ‘migración’, para continuar con percepciones sobre el tema, más que propuestas.

Ora por nerviosismo, ora por inexperiencia política, lo que Máquina desconocía, en el uso de las tarjetas que criticó severamente a Rogelio Loya y Esther Mejía en el Encuentro del CCE, es que sirven, precisamente, para evitar crisis como la que le ocurrió y le hicieron patinar ante los pocos asistentes al foro.

Ahora que, si quiere seguir creciendo, deberá llevar no solo tarjetas con apuntes, sino hojas de rotafolio completas, para exponer sus ideas con claridad, si es que quiere ganar algo de credibilidad para encausar a esas nuevas generaciones que dice querer representar.

¡Qué te digo! Así son las cosas en la vida adulta, hermano.

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Si de algo estamos seguros en el estado de Chihuahua, es que a finales del año y en los primeros meses del siguiente va a hacer mucho frío, y de que, a la mitad del año, nos va a pegar el calorón con toda su furia.

De eso podemos estar seguros. Lo único que falta saber es cuál región o municipio será el más caluroso: si Urique, en la profundidad de la barranca; Ojinaga, la parte oriental del desierto de Chihuahua, o Juárez, en la orilla del Bravo.

Eso está resuelto. Lo que no está, y no hay para cuándo, es tener la capacidad de generación y transmisión de energía eléctrica para cubrir una sobredemanda más que previsible en temporada veraniega, de modo que el sistema no colapse y cubra las necesidades del público usuario.

Eso es justamente lo que pasó el martes 7 de mayo y que podría suceder en los días por venir.

Según el comunicado emitido por el Centro Nacional de Control de Energía, un incremento en el consumo de luz eléctrica, combinado con una baja en la generación en al menos mil 668 MW entre las 4:05 y las 4:41 de la tarde del miércoles, debido en gran medida a la salida de operación de cuatro estaciones eléctricas.

Luego, a las seis de la tarde, volvió la crisis de suministro por la salida de siete termoeléctricas que dejaron de generar mil 299 megawatts.

Fue por eso que se pusieron en práctica los Estados Operativos de Alerta y Emergencia que, para efectos prácticos, y para la gente como nosotros que sabemos poco de esa terminología, podemos resumirlo en que falló el suministro y hubo un apagón.

Esto es, que como dicen en el rancho: “Se juntó Pancho con su Rosita”, una elevada demanda de energía a causa del calorón, y un retiro de termoeléctricas, como consecuencia de los llamados Estados Operativos de Alerta y Emergencia.

Esa combinación letal tuvo lugar justo a inicios de mayo, cuando comienza a sentirse la temporada de calor en todo el estado, sin excepción.

A Chihuahua le pegó principalmente en la región sureste y le “bajó el suich” a la capital, y nada nos dice que la frontera esté exenta de sufrir las mismas consecuencias en días próximos.

Eso sucede cuando el país sufre la llegada de la segunda ola de calor, que le pegará a once entidades y que se dejará sentir en el oriente de Chihuahua.

Según el portal de meteorología “Tiempo 3”, el estado de Chihuahua tendrá un mes de junio, digamos “pasable”, con un promedio de temperaturas en donde las mínimas serán de 12°C y las máximas de hasta 30°C.

Las lluvias llegarán a mediados del mes, dice el mismo portal.

Ojalá que esos de “Tiempo 3” tengan más acierto en sus pronósticos que los de la CFE, que ayer, de plano, nos dejaron colgados con sus fallas de generación y suministro.

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Mucho se habla del mal trato que le da el Gobierno Federal al estado de Chihuahua en materia fiscal y, en general, a las pocas entidades del país que hacen algo por allegarse recursos propios.

Siempre se dice que Chihuahua –para hablar de lo nuestro– “manda” muchos más recursos a la Federación por la recaudación de impuestos federales que genera, comparado con las participaciones y aportaciones que le devuelve el Gobierno central.

Pues bien, Mirone les puede decir, con los “datos del SAT” en la mano, que tienen razón quienes se quejan de ese mal trato, porque la proporción entre lo que recauda el estado y lo que le devuelven, es casi de 2 a 1.

Datos del Servicio de Administración Tributaria, solicitados vía Transparencia, nos dicen que el estado le aportó a la recaudación federal nada más y nada menos que 127 mil 112 millones de pesos.

Como se lee: casi 130 mil millones, captados a través de los pagos de impuestos y derechos que hacen los contribuyentes chihuahuenses, ya sean personas físicas o morales.

Casi la mitad de la recaudación fiscal la propició el Impuesto Sobre la Renta, el ISR, que en el 2023 generó un ingreso de 63 mil 343.70 millones de pesotes para el tesoro nacional. Le sigue el IVA, con 47 mil 576.20 mdp y el IEPS, cuyo ingreso fue de 10 mil 239.80.

El resto lo generaron impuestos como el ISAN, el ICE y los derechos del orden federal.

Ahora bien, ¿cuánto le mandó la Federación a Chihuahua en el 2023? Casi la mitad: 66 mil 9 millones de pesos.

O sea que ni siquiera podemos decir que nos dieron el “tostón” de cada peso recaudado. Ahora sí, podemos ver con toda claridad por qué el enojo hacia la Federación, si no nos devuelve al menos las dos terceras partes de lo que le pagamos a la Hacienda pública.