Durante la larga exposición que hiciera el equipo de defensa del exmandatario estatal, César D.J., sujeto a juicio por presuntos actos de peculado y delincuencia organizada, mencionaron el perjuicio que le ha causado la fama generada en torno a él por la pasada administración.
Al inicio de su exposición, reconocieron que la detención de un personaje como su defendido causó “júbilo” entre una parte de la población, peeero, el ánimo adverso hacia D.J. fue en incremento conforme avanzaba el proceso de extradición desde la ciudad de Miami, Florida y continuó cuando se le trasladó a la ciudad de Chihuahua para responder por el supuesto desvío de 96.6 millones de pesos del erario estatal.
Los abogados insisten en que toda esa aversión hacia el que fuera gobernador de Chihuahua entre el 2012 y el 2016, es obra de la anterior administración y, por lo tanto, se violó el debido proceso de su representado.
Lo que parece olvidar ese grupo de juristas es que la mala fama ya afectaba al imputado desde que estaba en funciones como gobernador.
Nada más hay que recordar las rechiflas que se llevó en las últimas tres ceremonias del Grito de Dolores y en otras actividades a cielo abierto.
Cierto que el gobierno de Javier Corral no ayudó mucho a engrandecer el concepto de “debido proceso”, pero de ahí a que la mala fama se la haya creado él solo, hay un buen trecho.
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La crítica a un video que circula en las redes sociales, donde un chamán le hace una “limpia” con hojas de pirul al canciller Marcelo Ebrard, fue el pretexto para que el delegado federal de Morena, Juan Carlos Loera, se desquiciara nuevamente y se burlara de las prácticas sacramentales de la fe católica, en el chat de un grupo de WhatsApp.
A pesar de que el funcionario federal se dice creyente y cristiano, reaccionó virulentamente contra la religión católica, cuando uno de los miembros del grupo en cuestión, un reconocido periodista, comentó en el video de la limpia al canciller: “cuando crees haber visto todo”.
“Es un tema de fe y cultural”, respondió Loera y agregó con ironía: “hay algunos que se comen una galleta sin sabor todos los domingos en la mañana, otros se hincan, otros más se van de rodillas en las mandas, otros se echan agua en la cabeza, sobre todo a los niños y niñas sin preguntarles, etc.”
Después de mofarse de los sacramentos y rituales católicos de la comunión y el bautismo, le agregó más vinagre a su posicionamiento: “otros ponen pino en Navidad, otros ayunan, algunos más se ponen cenizas en la frente, etc.”
Aunque la discusión no subió de tono, el funcionario federal también tuvo tiempo para descalificar a “varios” medios de comunicación locales, por otro video que publicaron en el mismo chat, donde la organización Mexicanos Contra la Corrupción, pone en evidencia los millonarios contratos por publicidad que recibe el periódico La Jornada del Gobierno federal, y la casa que una directiva de ese medio le presta al hijo de AMLO, José Ramón López Beltrán.
En respuesta a ese video, Juan Carlos también se soltó la greña al decir “Como si no supiéramos que el único medio nacional que tuvo el profesionalismo y la ética periodística de enfrentar al régimen neoliberal fue LA JORNADA. Ya quisieran VARIOS medios de por aquí, tener la congruencia y la objetividad de La Jornada. A lo mejor nunca la han leído” (sic).
La postura beligerante del delegado de Bienestar, deja en claro que dedica mucho tiempo del que tiene como empleado federal, a defender, a ultranza, cualquier crítica que se haga a la 4T.
No debería tener la piel tan sensible andando en este complicado mundo de la política.
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Hace casi un año, el 1 de junio para ser precisos, la ciudad se despertó con una triste noticia: Modesto, la jirafa que durante poco más de dos décadas vivió en las instalaciones del Parque Central Poniente, había fallecido.
Este mamífero artiodáctilo, de la familia Giraffidae originaria de África, es el animal más alto de todas las especies terrestres y, en el caso de Modesto, llegó a ganarse el cariño de la sociedad fronteriza, pero también los reclamos de grupos animalistas, en cuanto a la calidad de vida que recibió en esta ciudad.
Algunos condenaban el hecho de que Modesto estuviera viviendo en un lugar que probablemente no fuera su hábitat ideal, ya que esta especie animal suele habitar en sabanas, pastizales y hasta bosques abiertos.
También se cuestionaba que su alimentación no fuera la adecuada, ya que la gente solía darle frituras que le ocasionaban daños e incluso, hubo reclamos por la vida en solitario que tuvo, ya que un sector de la población pedía que se le consiguiera una pareja.
Aun así, Modesto resultó ser resiliente, como buen juarense y aguantó los embates del clima extremo que se vive en esta región desértica hasta que su corazón dejó de latir aquel 1 de junio, y su causa de muerte se determinó como un infarto fulminante.
Al último adiós acudieron miles de juarenses, mientras otro tanto participó de un homenaje virtual. A través de Norte Digital, los lectores hicieron llegar las imágenes familiares junto a la que fue considerada la mascota de la ciudad.
Se dijo que se llevaría a cabo la construcción de una escultura en su honor, tanto por parte de la esfera estatal como municipal, pero a la fecha ninguno de los dos proyectos se ha concretado.
Antes de que eso se materializara, llegó a la ciudad una nueva jirafa, que desde el pasado miércoles pisó el suelo juarense, específicamente el del Parque Central otrora habitado por Modesto.
El largo animal ha tomado posesión y además, ya ha reavivado el corazón de los juarenses entre los que ha surgido por nueva cuenta el debate de si la ciudad debe o no tener una especie como esta en cautiverio, pese a las condiciones adversas descritas por las que pasó Modesto.
La presencia de este mamífero de tres años de edad, puede resultar simbólica también, para la sociedad juarense, como una nueva oportunidad para aprender de los errores y cuidar todos a este nuevo icono de las familias fronterizas.
El nombre aún está pendiente de oficializarse, aunque en redes sociales circula la versión de que, en su lugar de origen, Culiacán, Sinaloa, le llamaban “Cheto”. No obstante, en Juárez, la convocatoria a la comunidad fue lanzada para ponerle un nuevo denominativo.
Pero más allá del nombre que se le ponga, este es un momento para que los juarenses podamos demostrar que unidos podemos mantener un símbolo que nos identifique y sacar lo mejor de nosotros; que los cuidados requeridos sean un ejemplo claro del corazón fronterizo, para que el mundo vuelva a vernos como lo que en realidad somos, una ciudad resiliente, trabajadora y bondadosa.
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Mediante oficio, la diputada local Ana Georgina Zapata Lucero solicitó ayer a Mirone el derecho de réplica, para aclarar que el miércoles pasado abandonó el recinto legislativo por una cita médica, que no es diputada plurinominal por suerte, sino por representación del partido al que pertenece, y que su residencia es en Juárez, aunque tiene que trasladarse continuamente a la capital del Estado.
Textualmente cita que “es correcto que me tuve que retirar, sin embargo, fue parcialmente por un lapso de la sesión atendiendo ese lapso de manera virtual, esto debido a que se me programó una cita médica con bastante tiempo de antelación previos a los acuerdos de la JUCOPO para modificación de cambio de la sesión al día miércoles; debido a ello y a la imposibilidad médica de reasignación pronta de cita por parte del Doctor, es que solicité y fue aprobado por unanimidad en mesa directiva la modificación a la orden del día con el conocimiento de mi ausencia momentánea en las razones comentadas. A las 12:16 de la tarde, (se puede constatar en el video de la transmisión en vivo en la 1.18.57) efectivamente me retiro de la sesión para acudir a la cita médica en cuestión, atendiendo votaciones virtuales y reincorporándome físicamente a la sesión a las 14:30 horas (de igual manera, se puede constatar en la sesión en vivo en el minuto 3.32.49)” (sic).
Luego agrega que “es de interés de una servidora aclarar a esta redacción que las diputaciones plurinominales no se otorgan por “suerte” ni por denominaciones geográficas, como lo son las diputaciones por distrito, sino que son representación de Partido en su facultad de designar a sus cuadros para que se les asignen las mismas en caso de cumplir con el porcentaje de representación necesario para la asignación. Mi residencia efectivamente es en Ciudad Juárez, sin embargo, por mi encargo tengo que trasladarme continuamente entre dicho municipio y la capital, como muchos de mis compañeros lo hacen” (sic).
Cumplida la petición de la diputada Zapata, Mirone debe aclararle que fueron sus propios compañeros del Congreso los que hicieron notar su ausencia, y hasta marca y modelo de su vehículo proporcionaron, en un afán por evidenciar su falta de compromiso con la legislatura.
Sus colegas legisladores saben y comentan que, en el primer año de sesiones de la legislatura, ella y su compañero de fracción, también plurinominal, Omar Bazán, fueron los que más faltaron y hasta les decían jocosamente los hologramas. Ahí están los registros de asistencia, que no dejan mentir.
Aunque en su réplica reconoce que se salió de la sesión y regresó más tarde, nunca dijo que se conectó vía internet a la sesión y votó cuando iba manejando excedida de velocidad, lo cual constituye una violación a la ley de Vialidad, aquí y en China.
Por otro lado, aunque es de todo mundo conocido que las diputaciones plurinominales son las diputaciones de partido, y por lo tanto no son producto del triunfo en las urnas, como lo son las de mayoría relativa, la legisladora afirmó equivocadamente en su escrito, que son estas últimas las que se otorgan por “suerte”.
Aceptando sin conceder, que, de acuerdo a su particular criterio, las “pluris” son las que valen, habría que recordarle entonces, que esa curul le fue entregada por el PRI, como la cuota política a la CTM, organización obrera de la cual su padre Jorge Doroteo Zapata es el líder eterno, no por méritos en el territorio, ni por decisión de los electores.
Finalmente, sobre el lugar de su residencia, fuentes priistas y del Congreso, confirmaron que el domicilio en Juárez lo tiene a partir de que llegó a la diputación plurinominal, pero su residencia permanente está en Chihuahua, ubicación que nos reservamos por respeto a su privacidad.
Atendida, como marca la ley, su petición de réplica en el mismo espacio, aunque con más sustancia, para no dejar dudas de que Mirone no miente.