¿Quién defiende la casaca azul?
Hay focos rojos en las trincheras panistas de la frontera donde los tiradores de Morena un día sí y otro también disparan duro contra Maruland y son pocos, muy pocos, los actores políticos afines a Palacio los que salen a defender la casa.
La embestida viene de todos los frentes, desde la bancada guinda en el Legislativo, o desde la oficina del superdelegado del Bienestar, incluso de boca del mismísimo presidente de la República.
Ninguno de los ediles panistas, y acaso en pocas ocasiones la presidenta del partido Xóchitl Contreras, o las diputadas Daniela Álvarez y Marisela Terrazas, le están entrando a los cocolazos para, al menos, mostrar algo de resistencia a la embestida guinda, de ahí en más, nanay.
Basta echarle un vistazo a las redes sociales de los paneques, para darse cuenta cómo algunos regidores están más preocupados por apuntalar su imagen frente a la comunidad que en los intereses comunes; bien harían en retirarse poquito de la selfie, digo, y hacer su chamba contra la oposición.
Caramba, ¿en dónde quedó el implacable ejército azul?