La noticia política del fin de semana involucró a dos personajes políticos de Juárez: la presidenta del Congreso del Estado, Adriana Terrazas Porras, y el coordinador de la bancada de Morena, Cuauhtémoc Estrada Sotelo.
Estrada fue considerado por el Tribunal Estatal Electoral (TEE) como responsable de ejercer violencia política en razón de género, en atención a la denuncia de Terrazas Porras.
La expriista armó la queja con todo lo que se dijo de ella cuando fue acusada de traicionar a Morena y fraguar con el PRIAN su segundo periodo como presidenta del Congreso, una posición que los morenistas pretendían para el diputado Benjamín Carrera.
Los magistrados consideraron no únicamente los dichos, sino una serie de acciones y omisiones encaminadas a obstaculizar la llegada de Terrazas al cargo de presidenta y su trabajo como tal, “conductas reiteradas en las que hubo discriminación, exclusión, menosprecio a la labor femenina, acoso laboral, violencia psicológica, económica, simbólica”.
El grupo guinda ya lo veía venir. Por eso salieron a las calles la semana pasada, para ejercer presión ante la resolución que tenía pendiente el tribunal, denunciando que el fin último es la inhabilitación para reelegirse en el Congreso del Estado.
Por lo menos la resolución no se fue en contra de toda la bancada, únicamente contra el coordinador, por lo que le dio parcialmente la razón a la quejosa.
De hecho, el proyecto de sentencia del magistrado responsable, Hugo Molina, iba por todo el combo, aunque los otros magistrados debieron enmendar la resolución que no dejaba títere con cabeza.
Fueron Roxana García y Gabriel Sepúlveda quienes consideraron que la violencia política se acreditaba únicamente en el caso de Estrada Sotelo.
Así que el primer proyecto se rechazó, pero se armó otra resolución en torno al mismo Procedimiento Especial Sancionador PES-048-2024.
El TEE ordenó la inscripción de Estrada Sotelo en el Registro Nacional de Personas Sancionadas en Materia de Violencia Política contra las Mujeres en Razón de Género; también instruyó dar vista a la Fiscalía General del Estado para investigar si existe algún delito penal.
Además, exigió una denuncia pública de Estrada en la próxima sesión del Congreso. Sin embargo, nada de eso ocurrirá todavía. La sentencia no está en firme porque va a ser impugnada por el diputado, quien considera que nunca se acreditó la violencia política en razón de género.
El caso llegará a la Sala Regional de Guadalajara del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, así que el tema seguirá dando más de qué hablar.
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Aunque los números en cuanto a homicidios dolosos se mantienen en menos de 100, durante el mes de marzo, todavía falta mucho por hacer para que los juarenses comencemos a creer en un rescate de la tranquilidad.
El número de asesinatos cometidos durante el tercer mes del año fue de 89. Con ello fue suficiente para superar ligeramente a lo acontecido durante febrero, cuando se dieron 87 homicidios.
Al parecer las autoridades entendieron el mensaje que fue entregado por los criminales en nuestras calles durante el mes de enero, cuando la cifra de muertes violentas ascendió a 125.
Hay que recordar que durante febrero se atribuyó la baja considerable en la cifra de asesinatos a la llegada de más de 2 mil 100 militares, para reforzar el operativo Unidos por Juárez.
Para el mes de marzo, se realizó el traslado de 209 líderes criminales que se encontraban en los penales del estado, 82 de ellos en Ciudad Juárez. Todos eran considerados de alta peligrosidad, por lo que fueron llevados a distintos Ceferesos.
Sin embargo, los crímenes siguen ocurriendo con la misma crueldad que caracteriza a los grupos criminales, que siguen retando a las autoridades, al dejar los cuerpos tirados en distintos sectores de la ciudad.
Cuerpos desmembrados o siendo devorados por jaurías de perros, se están convirtiendo en escenas cotidianas que ya casi a nadie sorprenden.
Por esa razón no hay que tomarse tan en serio las encuestas de percepción en cuanto a lo que seguridad se refiere. No es que los juarenses se sientan hoy más seguros que antes, es que, ante la imagen recurrente de la muerte, muchos han decidido dar vuelta a la cara y seguir avanzando como si nada estuviera pasando.
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Este día regresa a las actividades el Gobierno municipal y lo hace con una triste noticia al perder durante el pasado fin de semana, a uno de sus colaboradores de primer nivel en el gabinete: Roberto Briones Mota, quien ostentaba el cargo de director general de Protección Civil.
Fue precisamente durante los días de asueto, el viernes, para ser exactos, que la noticia se regó como pólvora. El también bombero retirado con grado de Capitán 1, había fallecido víctima de un infarto a bordo de un avión comercial antes de despegar, cuando regresaba de Mazatlán, Sinaloa.
Su cuerpo fue trasladado rápidamente y llegó a esta frontera, donde desde ayer domingo se iniciaron los servicios funerarios, en Mausoleos Luz Eterna, donde habrán de durar tres días.
Será el martes cuando sus restos sean llevados a la Estación Central, donde recibirá un homenaje de cuerpo presente.
Briones Mota ingresó al servicio en el Departamento de Bomberos en 2006, fue ascendido a sargento y luego a teniente, supervisando las labores realizadas por los bomberos y sargentos de este departamento.
Para el 2012 ascendió a capitán II, luego a capitán l hasta, grado con el que se retiró en 2018. Para el 2021, fue invitado a trabajar como titular de la dependencia. Tenía 54 años al momento de su fallecimiento.
A Briones Mota le recuerdan en el municipio por su participación durante la explosión en la maquiladora Blueberry, además de numerosos rescates y horas de servicio a la comunidad. Al momento se desconoce quién ocupara su lugar. Descanse en paz “El Capi” Briones.
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Las imágenes tomadas por Norte Digital no dejan margen de error a la preocupación que como juarenses deberíamos tener de nuestro principal pulmón: El Parque Chamizal agoniza y parece que nadie quiere verlo con seriedad.
Más allá de las grillas en torno a esa zona recuperada por el Gobierno federal, ayer, en las tomas captadas gracias al dron, pudimos observar el grado de afectación de esa área verde considerada histórica.
Árboles secos, maltrechos, enfermos, son los que hoy en día habitan en El Chami, donde el Domingo de Pascua se reunieron cientos de familias de ambos lados de la frontera.
Quisiéramos decir que fueron miles, pero las imágenes no mienten. Probablemente por las condiciones del clima o al aviso que dio el Gobierno local, de que no se permitiría acampar, el caso es que este año hubo menor asistencia.
Acudir al parque El Chamizal durante la Semana Santa se ha convertido en una de las tradiciones más arraigadas tanto de juarenses como de paseños que visitan a sus parientes y aprovechan para tomar un descanso en esa área.
Es una tradición que pudiera verse afectada si las autoridades no ven con seriedad el grave problema de enfermedad que tiene el parque. En este tiempo de elecciones, ojalá y el tema no se tome únicamente como bandera política y en verdad se actúe de manera efectiva para salvarlo.