Más a fuerzas que con ganas, tomó en cuenta el Instituto Nacional de Migración (INM), la recomendación 102/2021 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en contra de Jorge Alejandro Palau Hernández, el funcionario que fue captado cuando agredió a patadas y puñetazos a un grupo de personas migrantes.
Aquí comentamos ayer la manera negligente y omisa en que el INM había tomado aquella recomendación para separarlo del cargo, todo porque resulta que el golpeador y abusador era protegido del comisionado Francisco Garduño Yáñez, el mismo funcionario que en Juárez fue vinculado a proceso en relación al caso de la muerte de 40 personas migrantes, en el incendio de la estación habilitada como vil cárcel.
Palau Hernández apareció recientemente en Juárez como nuevo titular de la Oficina de Representación, en el estado de Chihuahua, pese a sus antecedentes documentados por la CNDH, por hechos ocurridos en agosto del 2021, en Tapachula, Chiapas, cuando impidió con uso de violencia excesiva, que un grupo de migrantes se internara al país.
El golpeador era nada menos que director de la Estación Migratoria Siglo XXI, en aquella ciudad chiapaneca.
No podía creer Mirone el cinismo de Garduño para mandar de jefe a Juárez a un funcionario con esos antecedentes de violador de los derechos humanos, pero trascendió ayer que les duró muy poco el gusto, tanto a Palau Hernández, como a su protector.
Publicado por Norte Digital el expediente de ese funcionario que fue denunciado ante la CNDH por varias víctimas de sus agresiones, no le quedó otra al INM que recular en su nombramiento, con todo y que el susodicho ya se había presentado ante todo el personal.
Así que van pa’ atrás los fielders. Ojalá y que Palau quede inhabilitado y sea despedido del Instituto, no nada más reubicado, como suele pasar en este tipo de casos.
No hay que olvidar que después de los lamentables hechos y de las denuncias en su contra, el funcionario no solo había quedado sin sanción, sino que fue premiado con la dirección de la estación migratoria de la Ciudad de México, cargo que ocupaba hasta antes de llegar a Ciudad Juárez.
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Quién va alcanzar candidatura con hueso y quién no, es la pregunta que a muchos interesa en Juárez respecto al Frente Amplio por México, la alianza que hasta ahorita lleva las de perder en territorio juarense rumbo a la elección del 2 de junio.
Decimos lo anterior porque todo mundo sabe que Morena arranca como favorito en la plaza fronteriza, con todo y el lastre que puede significar el tema de la presunta corrupción vinculada al alcalde Cruz Pérez Cuéllar y varios de sus colaboradores y exfuncionarios.
De ahí que haya una gran expectativa por la integración de la lista de regidurías plurinominales o de representación proporcional, es decir, las que se deben de repartir entre perdedores para garantizar la representación política de las minorías en el Ayuntamiento.
En la lista que conoció ayer Mirone, y que todavía tenía que lograr el aval de la llamada Comisión Permanente que integra a los mandones de todo el sistema PAN, aparecía en primer lugar Sergio Acosta, el subsecretario de Desarrollo Humano y Bien Común, posiblemente con Julio César Esparza como suplente, quien está en la nómina de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
En el número dos estaba Itzel Castillo, quien trae todo el respaldo del representante de la gobernadora en Ciudad Juárez, Oscar Ibáñez Hernández y ya había sido candidata en la pasada elección local (Distrito 03), luego de trabajar en el Fideicomiso de Puentes Fronterizos en la pasada administración estatal.
En el número tres aparece Víctor Talamantes, actual regidor y exdiputado local que así podría garantizar un segundo periodo en el Ayuntamiento. Sin embargo, la lista que conoció este Don, todavía traía ayer una anotación de otra opción con Oscar Berumen, con plaza actualmente en la Universidad Tecnológica Paso del Norte.
En el cuarto lugar está África Hernández, funcionaria de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, aunque también trae la anotación de que podría ser Luz Hermila Gómez.
Hasta ahí importa realmente la lista. El reparto “pluri” no pasará del cuarto lugar e incluso podría quedarse en el número dos, si toda la chiquillada entra al reparto, además del PRI. Nos referimos al PT, al Partido Verde, PRD y Movimiento Ciudadano, partidos que deben pasar el umbral del 2 por ciento de la votación para tener ese derecho.
Hay nuevas reglas electorales para el reparto de las regidurías de representación proporcional. En una especie de cláusula de gobernabilidad, hasta el ganador tiene derecho a recibir espacios, en este caso se supone que se trataría de Morena. Por eso el pastel a repartir se reduce, ya que únicamente son nueve las “pluris” disponibles en Juárez.
De cualquier forma, la lista del PAN que conoció Mirone llega hasta el ocho, con nombres como el de Alejandro Jiménez o Antonio Sáenz (5), Flor Cuevas o Esmeralda Nevárez (6), Juan Carlos González o Gerardo Arrieta (7) y Lorena Medrano (8).
Hay otra lista, la de la planilla de 11 candidatos (del PAN, del PRI y del PRD) que acompañará en el registro a Rogelio Loya, pero para que quienes aparecen ahí logren el espacio, deberá ocurrir la difícil remontada contra Morena y sus aliados, y ganar el Frente la elección de mayoría relativa.
En esa lista, los espacios para el PAN, de acuerdo al convenio de coalición, son cinco. Para llenarlos tenían ayer como prospectos a Flor Cuevas, Lucero de Alba, Verónica Jiménez, Mirka Villalva y Heliodoro Juárez.
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Ya hubo otra definición importante en terrenos blanquiazules. La candidatura más peleada de una diputación local, la ganó la dirigente del Comité Municipal, Xóchitl Contreras. La también exfuncionaria estatal se quedó con el Distrito 05, el único que hoy está en poder del PAN.
A la actual coordinadora de los regidores en el Ayuntamiento, Austria Galindo, le alcanzó para la segunda mejor posición, la candidatura por el Distrito 04, donde intentará el PAN recuperar el espacio que en la pasada elección ganó Morena.
El otro distrito local que le correspondió al PAN conforme al convenio con PRI y PRD, es el 07, donde el espacio seguía en blanco, en espera de ver quién sería la valiente, ya que estaba reservado para una mujer.
Ya que hablamos de las candidaturas a las diputaciones locales, la definición de la semana pasada en el PRI, le pegó a la panista Daniela Álvarez, candidata al Senado en segunda fórmula.
Resulta que su actual suplente como diputada federal por el Distrito 04 de Juárez, es Isamar Valadez Enríquez, quien apareció en la candidatura para el Distrito 06 local.
Daniela ya estaba lista para pedir licencia como diputada para irse de tiempo completo a la campaña, pero los mandones en el PAN decidieron que era mejor seguir con la diputación, no soltar el espacio en San Lázaro a la suplente sin experiencia, y dejar que Isamar se vaya sin problema a la campaña local.
La abanderada tricolor trabaja muy cerca del diputado plurinominal juarense, Hiram Hernández Zetina, un legislador priista poco conocido aquí, pero bien conectado con el dirigente nacional del PRI, Alito Moreno.
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Lo de Susana Prieto y su renuncia a pertenecer a la bancada de Morena en la Cámara de Diputados era algo así como la “Crónica de una ruptura anunciada”.
Se veía venir desde la contienda interna para elegir a la candidata mujer al Senado de la República por Chihuahua. Nunca se le tomó en serio ni la incluían en las listas de probables abanderadas de la 4T en un estado donde el partido que gobierna el país la tiene francamente difícil.
Tampoco se le secundó en su lucha por alcanzar la reforma a la Ley Federal del Trabajo para reducir a 40 horas la semana laboral, igual que existe en otros países de la OCDE, incluso con aquellos con los que México tiene alianzas comerciales.
Por el contrario: pese a que el asunto ya estaba votado en comisiones, la mandaron a la fila y la pusieron junto con la bolsa de hielos, bien guardadita en el congelador.
Y si eso no fuera poco, le salieron al paso para “aclarar” que la iniciativa no era de ella. A lo mejor no, pero de que nos enteramos de la misma por el activismo de la abogada metida a diputada, ni quién se lo pueda regatear.
En un mensaje difundido a través de su cuenta Facebook, anunció su renuncia al grupo debido a que era “insostenible” su permanencia ahí, por la ruptura de acuerdos de parte del presidente nacional de Morena, Mario Delgado (a quien no mencionó por su nombre, vale aclarar).
La diputada juarense llegó al cargo postulada por la 4T en el año 2021, aunque nunca militó en Morena, como ella misma lo aclara.
Ni su bancada, ni el mismísimo presidente AMLO se aventaron a apoyar la reforma de las 40 horas, ni otras de las 20 iniciativas que ha presentado en estos últimos tres años.
Pero, si eso no fuera suficiente, luego le salieron con que Javier Corral va para senador por la 4T, como si hubiera sido un aliado del movimiento que llevó al tabasqueño a la Presidencia de la República. La verdad, ya era mucho aguantar.