Mucho presumió el delegado del IMSS en Chihuahua, Enrique Ureña Bogarín, la llegada de equipo de cómputo para el servicio de las siete subdelegaciones de Chihuahua, como si con tecnología fueran a eficientar, pero sobre todo a humanizar el servicio, del que tanto se quejan los derechohabientes.
Según el funcionario, con las computadoras pretenden mejorar la cobertura en el área médica, pero no dijo cómo harán que el servicio a los pacientes sea más humano, y no los conviertan solamente en un número más de la base de datos.
Aunque las terminales se instalarán primero para el control digital de los servicios de urgencias, hospitalización y quirófanos, personal sindicalizado informó que hacen falta también en el área de medicina familiar, donde se dan las consultas médicas y abundan las denuncias por malos tratos, cancelación de citas, así como por la deficiente atención médica y administrativa.
En la plataforma de datos abiertos del Gobierno federal, se confirma que las principales quejas de los derechohabientes son, por el trato deshumanizado que tan solo en el 2021, registraron 287 denuncias, por el pésimo servicio que involucraron la muerte del paciente, una de ellas en el Hospital General Regional número 66 de Juárez, por dilación en la intervención quirúrgica.
Sin embargo, en solamente 31 de los casos, el IMSS resolvió que eran procedentes y desechó el resto, que eran desde error en el diagnóstico, negligencia médica, tratamiento equivocado, hasta falta de atención oportuna.
Por lo mismo, es bueno que se aplauda la modernización de los sistemas informáticos de la institución, pero, si no se cambian las actitudes negativas del personal hacia los usuarios del IMSS, así los equipen con tablets o laptops de última generación a cada uno, el servicio no va a mejorar, porque como bien dice la sabiduría popular, el hábito no hace al monje.
………………
Tuvieron que ponerles la muestra en Camargo y Parral, para que finalmente las autoridades se decidieran a proceder contra los comerciantes clandestinos de juegos pirotécnicos, que operan en el centro de Juárez.
El decomiso realizado ayer por parte de la Policía Estatal de 90 kilos de pirotecnia, en todas las formas y tamaños, confirmó lo denunciado en días pasados en este espacio, sobre la presencia descarada de comerciantes de pirotecnia el primer cuadro y en los alrededores del mercado “Los Cerrajeros”.
Fue a partir de que en Parral y en Camargo, las autoridades municipales y de protección civil realizaron varios decomisos desde principios de semana, en comercios y locales improvisados donde vendían la pirotecnia en todas sus presentaciones a mayores, adolescentes y a niños por igual, sin medir el peligro que representa la pólvora, cuando las autoridades estatales se decidieron a actuar.
En Parral y en Camargo se decomisaron cientos de productos explosivos a base de pólvora, que se utilizan para las celebraciones navideñas, a pesar del riesgo que representan por los daños físicos que pueden causar.
Nada más en la capital del mundo, fueron requisados más de mil piezas de pirotecnia, entre las clásicas palomitas, buscapiés, tronadores, y cohetes, que se comerciaban en nueve negocios del centro de la ciudad.
En el operativo contra la pirotecnia intervinieron también agentes de la policía municipal, que en las afueras de varios supermercados encontraron vendedores ambulantes y les decomisaron su mercancía.
En Camargo, mientras tanto, se retiraron del mercado 5 kilogramos de juegos pirotécnicos en poder de ambulantes, que estaban aferrados a vender su mercancía, a pesar de que ya habían sido amonestados.
Fue así como la Policía Estatal se decidió a actuar contra los comerciantes clandestinos y dieron su mejor golpe en las calles aledañas al mercado Cuauhtémoc, donde una pareja custodiaba la pirotecnia con la que surtían a los vendedores ambulantes, que les movían la mercancía.
La ley en la materia establece que solamente la Secretaría de la Defensa Nacional puede autorizar la venta de pirotecnia, después de cumplir con estrictos requisitos, y es también dicha instancia la que debe destruir el producto que sea decomisado.
Aunque las multas a quien sea sorprendido vendiendo fuegos pirotécnicos, pueden ser de hasta de 9 mil 800 pesos, según el volumen decomisado, no parece preocuparle a los vendedores clandestinos, porque son muchos los proveedores “pesados “que controlan este comercio.
Mañana en la medianoche, que comience la tronadera de cohetes en todos los rumbos de la ciudad, quedará en evidencia que en la cárcel no están todos los que son, ni son todos los que están, en el negocio de la pólvora en diablitos.
………………
Vaya, vaya, hasta que los turistas de la Policía Estatal dieron la nota buena con la captura de siete presuntos traficantes de personas, cuando se dirigían con su carga humana a la frontera, para brincarlos hacia los Estados Unidos utilizando una escalera.
Aunque el informe de la policía es escueto y no abunda en detalles sobre los “polleros”, fuentes mironianas revelaron que estos angelitos forman parte del grupo que controla el negocio en las rutas del Valle de Juárez, Santa Teresa y Palomas.
Si los detenidos soltaron o no la sopa, lo sabremos hasta que el Ministerio Público Federal determine su situación jurídica y resuelva si los deja en libertad o los consigna a un juzgado, cosa que difícilmente pasará, porque para fincarles cargos necesitan los testimonios de los 20 migrantes que transportaban, quienes ya se volvieron ojo de hormiga desde el momento en que los enviaron a los albergues de la ciudad donde nunca llegaron.
Lo único que informó al respecto el jefe en la zona norte de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, Ricardo Realivazquez, fue que los traficantes son originarios de Juárez, del Estado de México, de Veracruz y Durango, mientras que 14 de los migrantes vienen de Bolivia, Guatemala y Honduras, y el resto son mexicanos.
A ver si no se molestan los malandros que controlan esa criminal actividad, porque les echaron a perder el negocio, aunque bien dicen, que cuando pierden en uno, que usan hasta como distractor, ganan en muchos.
………………
Muchas reacciones de consternación, pero sobre todo de crítica por la insensibilidad de las autoridades, surgieron en las redes sociales luego de que se conociera que un adulto mayor murió en la sala de espera de la terminal de autobuses de la ciudad de Chihuahua.
Más que una historia triste de Navidad, fue este un hecho indolente, porque ocurrió en los días en que la central camionera registra gran afluencia de pasajeros, con presencia de policías y guardias privados en la terminal, por lo que resulta materialmente imposible que nadie haya visto al pobre hombre que permaneció sentado e inmóvil durante dos días.
Aunque se desconocen las causas de su muerte, hasta que le sea practicada la autopsia de ley, los comentarios sugieren con mucha lógica, que el anciano pudo en algún momento solicitar ayuda, pero fue ignorado hasta que murió.
Fueron los guardias del lugar los que descubrieron que el pobre hombre estaba muerto, cuando se percataron que tenía más de un día sentado en el mismo lugar sin moverse.
Aunque ya nada se puede hacer, será importante la revisión de los videos de seguridad de la central, para establecer si el hombre llego solo, si solicito ayuda y le fue negada, o simplemente llegó a la terminal para emprender el viaje sin retorno.
Don Mirone