En el conflicto por los libros de texto gratuito, las lealtades de la estructura de gobierno en materia educativa, estuvieron siempre con el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE).
El SNTE manda. Siempre lo ha hecho, pero ayer le quedó más claro a Mirone, cuando conoció reportes de lo que anduvieron haciendo supervisores de zona por varias escuelas de Ciudad Juárez y, al parecer, por todo el estado.
Resulta que los supervisores, piezas clave en la nómina de toda la Secretaría de Educación y Deporte, le anduvieron haciendo el trabajo al sindicato, solicitándoles a padres y madres de familia firmas de apoyo para el paro laboral que finalmente llegó a su fin.
Aunque la estructura oficial estaba en contra del paro, los inspectores prefirieron ponerse la cachucha sindical. Cuando la relación se complicó entre SNTE y Gobierno del Estado, ambos bandos pusieron a prueba las lealtades del personal operativo que tiene el mayor contacto con directores y profesores en los planteles.
Esa batalla y la guerra en general en torno a los libros de texto, finalmente la perdió la administración estatal, aunque se entiende claramente lo que ocurrió, ya que “endenantes” se había soltado el control desde la esfera gubernamental, en ese “estire y afloje” que históricamente se sostiene con el sindicato más poderoso del país.
O sea que el propio gobierno sabía que llevaba las de perder, pero siguió estirando la liga. En última etapa la narrativa oficial insistió en aventarle al SNTE la condena de los padres de familia, precisamente por irse al paro y dejar desamparados a los estudiantes. Tampoco resultó poner el apoyo de los responsables de familia en medio de la disputa y no quedó otra más que operar todos los desestimientos de los amparos para que los estudiantes y los docentes estén donde deben de estar, en las aulas de las escuelas, bien armados con sus libros de texto.
Por cierto, en plena crisis política, el subsecretario de Educación y Deporte, Maurilio Fuentes, dejó su oficina esta semana en Juárez para atender unos asuntos privados.
Ya no supo Mirone si se le ocurrió tomar vacaciones, si atiende algo de gravedad en lo personal (ojalá que no se trate de esto) o simplemente lo forzaron a tomarse un respiro. Tampoco sería raro. Al río revuelto, siempre hay ajustes de cuentas.
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Desde la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas en la capital del estado, llegaron a Mirone las quejas sobre el nivel de prepotencia en grado superlativo que en ese feudo ejerce la secretaria técnica, Rosalía Ochoa Achaval.
Tan empoderada anda la funcionaria, que le ha dado por maltratar al personal y gritar a los cuatro vientos que es intocable, y que nada se autoriza ahí si no pasa primero por su escritorio, simplemente porque tiene la protección del titular de la dependencia, Mario Vázquez Robles, de quien hoy controla cada movimiento en su agenda.
El equipo cercano de Vázquez anda bastante desconcertado porque la que hoy los ningunea ni siquiera es del grupo que históricamente ha acompañado al político y funcionario, a quien apenas conoció en la aventura inmediata anterior, cuando el secretario coordinaba al grupo parlamentario del PAN en el Congreso del Estado.
Ascendió rápido Rosalía porque desde el Congreso la puso Vázquez a realizar funciones de secretaria técnica y ahora hasta de vacaciones se van juntos.
Qué cosas, dicen los denunciantes. Cuando el diputado con licencia llegó como titular de Comunicaciones y Obras Públicas, condenó la forma en que los afectos personales habían nublado de tal manera el juicio de su antecesor que nombró como secretaria técnica a una persona con quien mantenía una relación más allá de lo laboral.
La historia parece repetirse, lo raro es que en este caso la funcionaria es quien se encarga de difundirlo.
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Por terrenos morenos hubo movimiento en la capital del estado en donde se presentó a Carlos Castillo Pérez como delegado político en el estado de Chihuahua para el presente proceso electoral.
La designación viene directamente de la virtual candidata presidencial, Claudia Sheinbaum, con el aval de la dirigencia nacional. Le tocó hacer la presentación a la dirigente estatal de Morena, Brighite Granados.
Se supone que en cada proceso electoral hay delegado del Comité Ejecutivo Nacional. Así fue como Ariadna Montiel Reyes, la hoy secretaria de Bienestar se empoderó en Chihuahua en el 2018 y desde entonces no ha soltado el control de las estructuras partidistas que ahora aceita desde el Gobierno federal. Ese encargo de delegado político lo tuvo en 2021 el senador José Ramón Enríquez Herrera, de quien se conoció muy poco su trabajo en Chihuahua.
A ver ahora qué pasa con Castillo Pérez. El nuevo delegado es egresado de Ciencias Políticas y Administración Pública en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM y funge como secretario de Movimientos Sociales del Comité Ejecutivo Nacional Morena.
“12 años caminando con #morena, 23 con el presidente @lopezobrador_”, publicó en sus redes sociales Castillo Pérez, quien también participa en la Comisión Nacional de Elecciones y por lo mismo ha visitado los estados donde hay procesos de elección de coordinadores de defensa de la 4T.
Fue diputado por Coyoacán en la 1ra. Legislatura del Congreso de la Ciudad de México, y responsable de conducir los trabajos para construir el entramado jurídico y conformación del Sistema Local Anticorrupción.
Por lo pronto, el delegado anunció que sostendrá reuniones con la militancia y los dirigentes de Morena en todo el estado, pero además con los representantes de los partidos aliados, el PT y el Partido Verde.
Por cierto, en la presentación de Castillo Pérez también se anunció la visita de Claudia Sheinbaum para el 25 de octubre.
La coordinadora de los comités de defensa de la 4T estará en Parral y en Chihuahua, en un par de eventos que, como ya lo ordenó el INE y dijo Morena que lo acatarían, deberán ser privados y, por lo mismo, en espacios cerrados.
En la conferencia de prensa de ayer en la ciudad de Chihuahua, se informó además que Brighite Granados será la vocera oficial de la Coordinadora Nacional en el estado de Chihuahua, para fijar posicionamientos y anunciar los eventos de Claudia Sheinbaum.
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Ha de ser porque en Juárez el territorio está bien pintado de guinda, pero el caso es que aquí está más intensa que en cualquier otra parte la grilla y la pelea por las distintas candidaturas que estarán en juego el 2024.
Todo mundo anda movido, haciendo su lucha. Y cada quien trae sus distintas estrategias y canales de difusión. Una campaña llamó la atención de Mirone porque un nombre no muy conocido aparece en anuncios de infinidad de plataformas digitales.
Se trata de Ernesto Guevara, quien para su proyecto político optó por darse a conocer primero en un plano más bien personal, ya que en los anuncios aparece junto a su pareja para promocionar su compromiso matrimonial.
“Ernesto Guevara y Aylin Meléndez se casan”, dice uno de los promocionales.
El punto es que Guevara quiere ser candidato de Morena en el distrito 04 federal. Por eso la promoción, aprovechando además que Aylin es influencer en temas de belleza.
Guevara fue director de Servicios Públicos Municipales en una primera etapa de la actual gestión de Cruz Pérez Cuéllar, aunque su actividad empresarial se ubica en el sector inmobiliario.