Organizado por la Comisión de Justicia del Senado de la República, ayer se realizó en las instalaciones de la UACJ el foro sobre un proyecto del Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares, donde el senador Ricardo Monreal, balconeó sin querer queriendo, a sus homólogos por Chihuahua, Gustavo Madero y Bertha Alicia Caraveo.

Resulta que el aspirante a la silla presidencial de Morena, envió un mensaje grabado para los ponentes del foro del Tribunal Superior de Justicia, los catedráticos de la UACJ y los abogados postulantes, felicitándolos por su participación, en el que incluyó también a los senadores por Chihuahua.

El detalle es que ni Madero, ni Caraveo asistieron, ni mandaron representantes. El único que estaba presente, y eso porque es el presidente de la Comisión de Justicia del Senado, fue Rafael Espino.

En su mensaje grabado, Monreal dio por hecho que Madero y Caraveo estaban presentes, y los saludó respetuosamente, además de agradecerles que participaran en un foro tan importante para los chihuahuenses.

Cuando pronunció sus nombres, todo mundo los buscó con la mirada en la sala del Instituto de Ciencias Sociales y Administración, donde se realizó el evento, pero por ningún lado los vieron.

El hecho causó gracia, pero también comentarios de grilla que, por un lado, le celebraron a Monreal la balconeada que les dio, y por otro, cuestionaban la informalidad de los senadores chihuahuenses, por haber confirmado inicialmente su presencia, y a la hora de la hora desairar el evento.

Las verdaderas razones que les impidieron asistir nadie las sabe, sin embargo, no es un secreto que como anda la grilla desatada en el país rumbo al 2024, todos se andan pisando las mangueras, porque nadie le quiere hacer el caldo gordo a nadie, aunque se traten del mismo partido, como es el caso de Bertha Caraveo y Rafael Espino.

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Muy mal le fue a la diputada América García por haber chapulineado del partido Movimiento Ciudadano a Morena, pues resulta que los morenistas de hueso colorado de Nuevo Casas Grandes, donde está su distrito, repudiaron su incorporación a las filas de la 4T y rechazaron cualquier actividad partidista que pretenda realizar en esa región.

En una reunión presidida por la presidenta del comité municipal de Morena en Nuevo Casas Grandes, Indhy Ochoa y por la secretaria general Daniela Gómez, le dijeron en pocas palabras que no es bienvenida por corrupta y arribista, además de que no cumple con los principios básicos del partido guinda ,de no robarás, no mentirás y no traicionarás.

Al mismo tiempo rechazaron también el ingreso de Javier Mendoza, quien era el dirigente municipal del Movimiento Ciudadano en Nuevo Casas Grandes, y ahora se queda sin Juan y sin las gallinas.

En la reunión advirtieron que este viernes América y Javier realizarán un evento político en la que fue la sede del partido naranja, con diputados y regidores morenistas a quienes pretenden engañar con su adhesión a Morena, cuando en realidad son “arribistas que anteponen sus beneficios personales” dijeron las líderes Ochoa y Gómez.

Ahora solo falta ver cómo reaccionan el profe Martín Chaparro, en su calidad de coordinador estatal de Morena y el coordinador de la bancada en el Congreso del Estado, Cuauhtémoc Estrada, porque al final de cuentas, son los que operaron el cambio de piel, perdón, de partido, de América García.

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Circula en el ciberespacio chihuahuense un video de escasos 7 segundos de la gobernadora Maru Campos, en tiempos en que era la alcaldesa de la ciudad de Chihuahua, donde dice que, si el crimen organizado quiere hacer de las suyas, que se vayan a otros municipios, menos a Chihuahua.

Es el mismo video que fue usado por los morenistas para pegarle durante la campaña por la gubernatura y, ahora, cuando la entidad arde por la violencia incontenible, se lo reactivan, al mismo tiempo que critican al fiscal general del estado Roberto Fierro Duarte, y al secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya, porque andan totalmente extraviados.

En el video, la entonces alcaldesa de la capital dijo textualmente: “Perdón, pero si los malandros del crimen organizado quieren hacer de las suyas, que se vayan a Delicias, que se vayan a Cuauhtémoc, que se vayan a Ciudad Juárez”.

Independientemente de la fecha en que se haya dicho, es, sin duda, una expresión grave, porque la dijo una autoridad municipal, que ahora es nada menos que la gobernadora de todo el estado, que gobierna también esos municipios, a donde sugirió a los malandros que se fueran a hacer sus desmanes.

Todo indica que el video fue grabado con un teléfono celular durante una reunión de trabajo, en lo que parece ser el despacho de la alcaldía en la ciudad capital.

¿Es fuego amigo o fuego cruzado? Como quieran llamarle, pero es fuego y le está pegando duro a Maru Campos, por andar distraída con el canto de las sirenas y su postulación presidencial, mientras sus programas de seguridad pública fallan y los delitos de alto impacto se multiplican en toda la entidad.

Ese fuego enemigo y amigo de la ejecutiva estatal, materializado en este video, busca sin duda encender los regionalismos que en los hechos han favorecido a la capital del estado, mientras Juárez y el resto de los municipios grandes, permanecen rezagados.

Ahora, cuando ya es gobernadora, los malandros efectivamente hacen de las suyas en Juárez, Cuauhtémoc y Delicias, pero también en Camargo, Jiménez, Casas Grandes, Parral y toda la sierra, menos en Chihuahua, donde los índices delictivos se mantienen controlados. 

¿Acaso hicieron caso los malandros al exhorto de la ahora gobernadora? Nadie, excepto los delincuentes, saben la respuesta. Lo que sí es cierto es que haberse expresado con ese despreciable regionalismo como lo hizo, es tanto como invocar aquella máxima española sobre la envidia: “Que yo me quede tuerto si dejo ciego al otro”

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Preocupante es la manera en la que los delitos que se creían erradicados, nuevamente están formando parte del contenido informativo en los distintos medios de comunicación, por la simple razón de que los delincuentes son reincidentes, al durar poco tiempo en prisión.

Específicamente, delitos como la extorsión, el cobro de cuotas a negocios y el robo de vehículos con violencia, o carjacking, como prefiera llamarle.

En números fríos, de acuerdo con información de la Fiscalía de Distrito Zona Norte, en junio de 2022 se reportaron 250 denuncias por robo de automóvil en Juárez, la mayor cifra registrada desde la de enero de este año.

De esos casos, 27 fueron con violencia y 223 sin ella. Según datos presentados por la Mesa de Seguridad y Justicia, en mayo se llegó a los 14 robos violentos y 215 sin agresiones. En enero, que sigue siendo el mes con más denuncias, hubo 29 y 224 casos, respectivamente.

En semanas recientes se han registrado varios casos, al menos los que se han hecho públicos por parte de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, donde afortunadamente se logró detener a los malhechores.

El asunto es cuántos delitos más de este tipo se han registrado en el presente año y han quedado impunes, provocando en las familias juarenses el terror, la impotencia y la tristeza, al ver cómo el patrimonio les puede ser arrebatado impunemente por los rufianes.

Lo peor de esta situación, y aquí deberían poner atención las corporaciones de seguridad, es que cuando se difunden los comunicados de los arrestos de los maleantes, estos aparecen con rostros sonrientes, como si se tratara de simples travesuras.

Esas actitudes retadoras, en poses casi histriónicas con las que se dejan fotografiar los malandros, muestran un cinismo tal, que provoca la desagradable sensación de que, a pesar de ser peligrosos para la sociedad, se saben casi libres, y, por lo tanto, se ríen en la cara de las propias autoridades.

Sería muy saludable que cuando los detengan, los pasen inmediatamente al departamento del “Siete Pilas”, para que les enderecen las vértebras y dejen de andar chuecos. Eso les serviría de lección para que borren su risa burlona y comiencen a preocuparse.