Desde los “dentros” del Instituto Nacional Electoral se fragua toda una operación para hacer que el proceso salga mal, con una pobre cobertura de casillas y una deficiente capacitación de los funcionarios encargados de operarlas.

Personas cercanas al tema nos comentan que es el mismísimo INE el que se está saboteando a sí mismo, al no cubrir con suficiencia los gastos de capacitación de las y los ciudadanos que resultaron sorteados—insaculados, dicen ellos—para ocuparse de las casillas el próximo 2 de junio.

Las quejas que llegan a oídos de Mirone son que no les han pagado a los capacitadores el sueldo pactado; tampoco sus gastos que hacen en campo y ahora, ni siquiera los que tienen que hacer para atender al ciudadano que están capacitando.

Ahí han andado, tallando la suela, ya sea en la banqueta o en la terracería, buscando a los seleccionados para ser funcionarios, con la misión de darles la capacitación necesaria para que el proceso electoral transcurra sobre ruedas.

Nada más que lo hacen con cargo a su propia cartera, porque en el INE no les quieren dar ni los 3 mil 800 pactados en el Contrato para gastos, y además, les dicen que no hay “por culpa del presidente”.

Eso no es todo, sino que ya les han advertido que, a diferencia de otros años, esta vez no habrá dinero para darles de comer a los funcionarios en el mero día de la jornada electoral.

O sea que se aventarán desde las 7:00 de la mañana y hasta las 7:00 de la tarde así, con el puro vuelo, a menos que lleven su lonche o su “topergüer” con comida preparada en su casa.

Así anda el proceso en el cual nos vamos a gastar más de 22 mil millones de pesos, nada más a nivel federal. A nivel local, van otros 898 millones “del águila”.

Total: 23 mil mdp, centavos más, centavos menos. Y dicen que no hay para darles ni una botellita de agua a los funcionarios electorales.

Si eso no es un operativo para que truene el proceso, pues parece.

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Cuauhtémoc Estrada anda hecho la mocha haciendo campaña en el Distrito VIII con cabecera en Juárez, como si ya fuera candidato a reelegirse como diputado local.

Y decimos “como si fuera”, porque su confirmación como aspirante a una curul en la próxima Legislatura pende de un hilo, después de que el Tribunal Estatal Electoral lo “tumbara” de las listas por haber cometido “violencia política de género”.

Vale recorrer el video de esta historia que ya parece telenovela: tras una larga confrontación con la diputada morenista (¿morenista, en serio?) Adriana Terrazas, el líder de esa bancada le cerró cuantas puertas había, a grado tal de dejarla sin curul y de expulsarla del grupo, que es la segunda fuerza representada en el Congreso del Estado.

Para el Tribunal Estatal Electoral, el líder morenista incurrió en “menosprecio” hacia Adriana Terrazas “e intento de socavar la participación” de esta, por lo cual determinó que fue “sexista y discriminatoria” su actuación.

Y bueno pues, va para abajo.

Sin embargo, Edin Cuauhtémoc, como es su nombre completo, anda como si nada haciendo campaña. 

Lo mismo recorre colonias que encabeza actos en los lares del VIII Distrito, pese a que tiene sobre su cabeza la pesada espada de Damocles que le puso el TEE por andarse enojando con Terrazas, nada más porque pactó con el PRIAN su elección y luego su reelección como presidenta del Congreso, a contrapelo de Morena.

Nos dicen allegados al diputado que sigue encampañado porque tiene plena confianza en que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le dará la razón y lo reinstalará como candidato.

Se vale ser optimistas, mal haría si no, pero en menudo brete va a poner a su partido y a sus seguidores si, a media semana, les dice que “siempre no” y que mejor voten por “fulano de tal” que ahora será el candidato.

Y todavía falta ver cómo quedará la boleta electoral en ese distrito, porque en una de esas y ya estarán debidamente impresas para cuando el TEPJF emita su resolutivo.

A ver cómo arreglan ese entuerto.

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Descolorido, deslucido, desairado… ¿cuál de los “des” le va más a modo al desfile del 1 de mayo? Todos, por lo visto.

Aunque siempre ha sido catalogado como el más aburrido de todos los desfiles que se celebran a lo largo del año, el de ayer se llevó las palmas.

Aburrido, desangelado, sin grandes arengas ni demandas de reivindicación laboral, así transcurrió el andar de los trabajadores para quienes no hubo asueto el día de ayer.

Nada de hablar de fortaleza, “unidad” y menos aún de recordar la lucha por los derechos laborales. Más bien se vio a un numeroso grupo de personas que no marcharon por convicción.

La parada inició a las 10 de la mañana en la avenida 16 de Septiembre, desde la calle Gregorio M. Solís a la Constitución y duró menos de una hora.

Ya desde ese momento se notó el desaire, porque contó con dos grupos, marcharon los del del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, SNTE Secciones 42 y 8, y los del Sindicato de Telefonistas de México y párele de contar.

Lejos quedaron aquellos interminables contingentes de miles de trabajadores pertenecientes a la CTM y la CNOP, con sus sindicatos y grupos de afiliados, nada, ayer ni las ruidosas ruteras desfilaron.

En los años previos a la pandemia, el desfile de los trabajadores llegó a sumar más de 50 mil almas marchando, con la llegada del Covid-19 estos ejercicios fueron suspendidos, y al parecer así continuarán.

Probablemente anden cansados, son tiempos electorales y a gran parte de quienes integran estos organismos, los meten a hacer talacha en los eventos.

Al menos así ocurre con el Sindicato Único de Trabajadores del Municipio, el SUTM, donde los empleados sindicalizados se ven obligados a doblar turno o acudir los fines de semana a apoyar al candidato oficial que busca ser reelecto.

Todo sea por conservar la chamba.

Por ahí estuvo de invitado en el palco el presidente municipal, Martín Chaparro Payán, y algunos funcionarios municipales que se veían con caras largas, probablemente porque la convocatoria les echó a perder el asueto, ni hablar, a veces hay que chambear el Día del Trabajo.

¿A dónde se fueron esos miles que exigían por mejoras salariales y laborales, que gritaban consignas contra los gobiernos? ¿Dónde estarán las demandas de aumentos salariales, de mejoras a los servicios de salud o de una reducción a la jornada de trabajo? Aparecerán para la otra, tal vez.

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A los reporteros que cubren la fuente del Gobierno municipal les sacó de onda la propuesta que les hizo el pasado lunes el alcalde suplente, Martín Chaparro Payán.

Algunos lo tomaron en broma, pero todo indica que va en serio.

Resulta que el profe, ya entrado en funciones como mandamás del ayuntamiento de Juárez, quiere hacer su mañanera.

Siguiendo el ejemplo del gran tlatoani que reside en el Palacio Federal, les soltó a los reporteros de la fuente que está dispuesto a atenderlos una vez a la semana a las 7:00 de la mañana.

El comentario que parecía chiste, fue replicado el martes por el chat de medios de Presidencia Municipal, quedando pendiente el día.

Hasta ahí todo bien profe, el asunto es quién le va a atender a esa hora. Por lo pronto, le cuentan a Mirone algunos reporteros que ya andan medio incómodos, porque ahorita el pull de prensa está dedicado a cubrir las actividades del presidente municipal con licencia, Cruz Pérez Cuéllar.

Incluso en las conferencias que ha ofrecido el alcalde que busca la reelección se puede ver a los mismos informadores que lo cubrían habitualmente. Algunos de ellos, le han dicho a Mirone, que esperan que el profe recapacite, porque si no les va a extender la jornada laboral a más de 14 horas diarias.

Además, de que le puede quitar raiting a las mañaneras del jefe supremo de la Cuatro te, Andrés Manuel López Obrador, y pues no vaya a ser la de malas y se lleve su regañada gratis, dicen los reporteros en tono de broma.

Así anda el abarrote con el emperador, que se quiere comer el mundo en 28 días o menos, no le extrañe que haga una feria en la Plaza de la X y al final rinda un informe.