Justo cuando el tema de la recuperación del Centro Histórico de la ciudad está en el centro del debate público, a nadie en el Ayuntamiento le dio por impulsar proyectos de inversión en la zona.

Ayer se aprobó en sesión de Cabildo el Presupuesto de Egresos 2025 y no se incluyó algo específico para el centro fundacional que tanto requiere para que sea un lugar digno y se abata el rezago histórico.

No se consideró en los proyectos de inversión que algunas dependencias traen, como Servicios Públicos Municipales, ni en la parte de la Dirección de Obras Públicas donde se concentran los proyectos insignia con un total de mil 539 millones de pesos, ahí donde el Parque Norponiente se llevó el mayor presupuesto, con 200 millones.

Y eso que se presentó la oportunidad de una reasignación presupuestal, luego de que, por los acuerdos políticos recientemente alcanzados, el Gobierno del Estado le entrará con una parte de la obra de ampliación en avenida De las Torres.

El Gobierno Municipal tenía ya programados 150 millones para la rehabilitación y ampliación hacia el sur del Libramiento Independencia-Talamás Camandari, pero al entrarle el Estado, se convino que del lado municipal nomás se le destinen 50 millones.

En la sesión de Cabildo se aprobó precisamente una reserva para redistribuir los otros 100 millones de pesos, de la siguiente manera: 74 millones para Presupuesto Participativo, 20 millones para el subsidio del servicio de grúas que ofrecerá la Coordinación de Seguridad Vial y 6 millones para la nomenclatura en calles.

Quién sabe si por ahí traigan algún resentimiento, luego de la suspensión de la polémica obra federal (que apoyaba el Gobierno Municipal) del puente de la Vicente Guerrero, pero el hecho es que ni un quinto se le destinó al Centro Histórico, donde hay muchas calles y banquetas por rehacer, espacios públicos por mejorar, fachadas qué arreglar, equipamiento por remplazar, predios qué comprar, fincas por demoler para generar más plazas y espacios abiertos, además de los edificios con carga histórica por recuperar o incluso adquirir para el patrimonio municipal.

Dinero es lo que siempre ha faltado ahí para hacer todo lo que se planteó en el plan maestro, pero nada se proyectó para el 2025, como si no fuera el tema de la falta de recursos lo que mantiene tan deteriorado al centro fundacional de la ciudad.

Entre las reasignaciones que se votaron aparte por medio de reservas a la propuesta original, hubo una por 2 millones de pesos. En lugar de destinarse a la compra de vehículos para la Dirección de Educación, se pidió, por parte de la regidora priista Mireya Porras, destinar ese monto al programa de esterilizaciones de la nueva Dirección de Atención y Bienestar Animal.

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El Presupuesto de Egresos 2025 se votó y se aprobó por mayoría, con las dos reservas ya mencionadas, la de 100 millones y la de 2 millones de pesos.

Hubo un cuestionamiento del regidor panista, Alejandro Jiménez, respecto a la forma escueta en que en el dictamen de la Comisión de Hacienda se justificó el requerimiento de la compra de parque vehicular para diversas dependencias.

No hubo especificaciones técnicas de los vehículos por adquirir, de acuerdo con el edil azul.

Lo que Mirone pudo ver en el dictamen, es que habrá compra de vehículos para múltiples dependencias, por lo que las agencias tendrán muy buenas ventas de sus modelos 2025. Contratos a los que en verdad habrá qué poner la lupa y analizar el tema en su conjunto.

Sin embargo, el regidor “vigilante y propositivo” votó a favor, digamos que en sintonía con la relación política en positivo que coyunturalmente está colocando a Palacio de Gobierno con la Presidencia Municipal, luego de mucho tiempo de puro desencuentro.

Quien votó en contra del Presupuesto en general y de la reserva mayor de los 100 millones, fue la regidora del ya extinto Partido Pueblo, Luz Clara Cristo Sosa.

Desde la pasada sesión de Cabildo, trae Luz Clarita una jugada un tanto extraña. Vota en contra, pero no argumenta nada. Simplemente no habla. Así que todo queda a la especulación. La lectura más extendida es que simplemente está tratando de encarecer su voto para todo lo que vendrá en el 2025.

Su novio y asesor principal, el excandidato a la alcaldía, Jaime Flores, mejor conocido como Máquina de Fuego, el mismo que amagó con punzar más que una piedra en el zapato, ni siquiera comezón ha provocado. También se ha “reservado” y su última aparición de crítica política la dirigió hacia la Junta Municipal de Agua y Saneamiento y a su director ejecutivo, Sergio Nevárez.

Pronto se deberá clarificar para qué querían realmente Máquina, su extinguido partido y su novia, esa posición en el Ayuntamiento.

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Puras vergüenzas por todos lados, no únicamente en la representación política y popular. Sin duda que la crisis de representatividad cruza también al sector empresarial y pone en tela de duda los esquemas de participación ciudadana para incidir en los temas que son más sensibles para la ciudad.

Ahora resulta que una persona violenta y golpeadora, incluso demandada penalmente por esos hechos que fueron públicos y debidamente documentados, reaparece dirigiendo la Mesa de Seguridad y Justicia de Ciudad Juárez.

Nos referimos al expresidente de Canaco, Rogelio Ramos, quien apenas en marzo de este año fue denunciado penalmente por su compañero de Cámara y también expresidente, Gilberto Cueva, luego de que lo lesionó al propinarle varios golpes, como respuesta a un reclamo de transparencia en los manejos de la organización.

Mal por donde quiera que se le vea, porque Ramos ni poquita pena tuvo para seguir asumiendo representaciones y posiciones en contra de la violencia y la criminalidad; también por los demás integrantes del gremio empresarial que ya se hicieron los occisos en torno al caso, y peor, por los funcionarios que deciden sentarse a la misma mesa.

Entre esas autoridades están quienes le dieron carpetazo a la investigación y nunca actuaron en contra de Ramos, pese a los múltiples testigos y la evidencia de la agresión que mantuvo a Cueva con el ojo morado durante varios días.

Total, para nada importó esa denuncia, tampoco el posicionamiento que en su momento fijó el Consejo Coordinador Empresarial para expulsar de su seno a Ramos y desconocer cualquier representación en su persona.

“Lo que quiso el Consejo Coordinador Empresarial fue sentar un precedente para las personas que representan a los organismos que están en el CCE, que no tomen estas acciones bélicas que utilizó el presidente de Canaco”, explicó entonces uno de sus integrantes.

¿Con qué calidad moral va a dirigir una mesa contra la violencia una persona con esos antecedentes? Lamentable, que se sigan mandando tantos mensajes de impunidad, cinismo e incongruencia frente a la problemática que más lastima los juarenses.

Lo que menos queremos para la ciudad, es justo lo que sucede. En lugar de que se rechace, castigue e inhiba la violencia, se le acepta, se le premia y se le fomenta.

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Hablando de otro tipo de violencias, una campaña negra en contra del senador morenista Juan Carlos Loera inundó las redes.

Corre el billete con pauta de publicidad en múltiples publicaciones de perfiles de Facebook y portales fantasma de noticias, con la arremetida en contra del legislador, culpándolo de “frenar el cambio en Juárez” luego de que se conoció que el Instituto Nacional de Antropología e Historia dictaminó la suspensión del puente elevado sobre la Vicente Guerrero.

Es la misma campaña que lastimosamente puso al gremio formal de los constructores, ingenieros y arquitectos, a defender el puente, sin consideración alguna sobre el impacto nocivo para la preservación del centro fundacional de la ciudad, sus edificios y monumentos históricos.

Así suelen aparecer ese tipo de estrategias en contra de quienes confrontan los proyectos de la Administración municipal. Cuando la regidora Luz Clarita se puso brava en el Ayuntamiento, al inicio de la gestión, pasó lo mismito.

Tampoco son difíciles las lecturas especulativas sobre el origen. En el Presupuesto de Egresos 2025 la Coordinación de Redes Sociales trae un presupuesto de 41.1 millones de pesos, aparte de los 190-1 millones de pesos que mueve la Coordinación de Comunicación Social.

Por cierto, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar habló ayer del tema de la suspensión y se pronunció porque Ferromex reasigne el recurso a otra obra, en lugar de la opción de gestionar mayor presupuesto para buscar el paso a desnivel que presumiblemente costaría entre 100 y 200 millones de pesos más que el puente.

“He visto mucha politiquería en este tema; desde mi punto de vista es una bandera muy equivocada y creo que con eso se pierde mucho tiempo. Estoy convencido de que, en la administración pública, el tiempo es oro y meternos en la dinámica de gestionar se puede tardar muchos años”, consideró el presidente municipal.