El alcalde Cruz Pérez Cuéllar parece especializarse en cómo burlar los candados legales contra la propaganda anticipada de campaña y la promoción personalizada con fines meramente electorales.
Aunque las campañas locales arrancan legalmente hasta el 25 de abril, Cruz trae tremenda campaña en redes sociales, donde perfiles de Facebook y sitios web se disfrazan de medios de comunicación con el único fin de promocionar su imagen, rumbo a la elección del 2 de junio.
Se trata de una simple simulación que presenta propaganda como si fueran noticias.
Abundan las publicaciones destacando logros del alcalde en plena veda electoral, bajo perfiles y sitios como “Nota de la Esperanza”, “La Razón”, “Prensa Libre México”, “Al Contacto”, “Ciudad Juárez Avanza”, “La Mira Digital” y otros membretes.
Por lo visto está fluyendo un buen recurso para financiar ese tipo de estrategias. Lo interesante sería conocer el origen del dinero, no vaya a ser que también se esté utilizando para ese fin el presupuesto público y el personal que la administración crucista tiene bajo nómina en su Coordinación de Redes Sociales.
No hay que olvidar que esa coordinación trae un presupuesto de 40 millones de pesos este 2024, aparte de los más de 164 millones de pesos presupuestados para el gasto de Comunicación Social.
También llama la atención que se opere una campaña en “combo”, ya que es común ver el mismo tipo de publicaciones en favor del hermano del alcalde, Alejandro Pérez Cuéllar, quien ya anda haciendo campaña como candidato a diputado federal por el Distrito 04 (las campañas federales iniciaron en marzo).
Por lo visto, se han tardado los opositores al alcalde morenista en llamar la atención sobre ese gasto que también debería ser fiscalizado y sancionado por las autoridades electorales.
Hay pues una campaña anticipada a todo lo que da y una promoción personalizada sin restricción alguna. Políticos como el alcalde Pérez Cuéllar aprovechan todo espacio digital difícilmente regulado y todo resquicio legal para sacar la mayor ventaja posible.
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“Cómo han pasado los años”, dice el tema que canta Rocío Durcal, y que bien le caería a la cadena de tiendas de autoservicio Soriana, que ahora ha cambiado de color electoral, ¡y de qué forma!
Resulta que, de pronto, la imagen de Claudia Sheinbaum, la candidata de la 4T a la Presidencia de la República, se apareció en las mesas de comedores de la tienda de esa cadena de autoservicio, ubicada en la Plaza Sendero, en Ciudad Juárez.
Así, como se lee: quien acuda a uno de esos lugares, antes de poner su platillo y su vaso de bebida sobre la mesa, tendrá qué ver la cara sonriente de la “dueña del bastón de mando”, y los colores, el logotipo y los lemas de campaña del Partido Verde Ecologista de México.
Lo peor para el comensal es que no tiene para dónde hacerse, porque el cartel publicitario convertido en mantel abarca casi todo el cuadrángulo de la mesa y pues, ni cómo llevarse el tenedor a la boca sin antes ver a la candidata.
Y, si algo faltara, las sillas también son de color verde, así como para hacer “juego” con el decorado de la mesa. ¡Más coloreado no se puede!
Lo que son las cosas, hace cosa de 12 años, Soriana fue blanco de las críticas de la izquierda electoral, que entonces se agrupaba en el Partido de la Revolución Democrática, el agonizante PRD, porque la señalaron como operadora de lo que calificaron de “fraude electoral” en favor del candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.
Las denuncias del entonces candidato perredista, Andrés Manuel López Obrador, y de su coordinador de campaña, Ricardo Monreal, iban a dar invariablemente a la casa de bolsa Monex, por ser la supuesta emisora de las tarjetas con las que se compraron votos, y a nuestra cadena “invitada de hoy”.
Al Grupo Soriana la acusaron de operar un programa de compra de votos mediante la expedición de miles de tarjetas que se repartieron a lo largo y ancho del país, para –según la denuncia perredista– que el votante lo cambiara por mercancía, a cambio de tachar la boleta en favor de Enrique Peña Nieto.
Lo demás es historia: el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación desechó los recursos de AMLO y compañía, declaró válida la elección y Enrique Peña Nieto se instaló en el poder.
¿Fin de la historia? No tan rápido. Ahora Soriana vuelve a aparecer, a querer o no, en la controversia política, pero esta vez, del lado de quienes ayer la acusaron de ser cómplice del PRI y de la “derecha”.
Y qué, ¿ahora no los van a denunciar?
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Y hablando de la campaña de la 4T, este lunes presentaron el proyecto de sistema anticorrupción que operaría en el eventual gobierno de Claudia Sheinbaum en caso de que gane la elección presidencial y, ¿adivinen quién estaba ahí, muy serio y formal?
¡Adivinaron! “Lord Pluri”, Javier Corral Jurado, como parte del equipo de los Diálogos por la Transformación presentando el eje “Gobierno Honesto y Combate a la Corrupción”.
Es el exgobernador de Chihuahua que se precia de haber recuperado “miles de millones de pesos” a través de sus acciones legales en contra de funcionarios de la anterior administración a la de él.
Dicho sea de paso, antes de continuar, que ni en los proyectos de Ley de Ingresos de sus casi cinco años de Gobierno, ni en los informes de Cuenta Pública, se encontraron esas millonadas, así como recaudación extra.
Pero sigamos con el punto, porque la campaña de la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México nos contó a los chihuahuenses una historia que ya habíamos escuchado, y que no terminó bien.
En primeras, habló de la creación de la Agencia Federal Anticorrupción, órgano que asumiría las funciones de una especie de “zar anticorrupción” y que, desde ahora, pondrá a soñar a Javiercito con la idea de que podría ser él el piloto que conduzca esa nave.
Se vale soñar, hasta eso.
El proyecto tiene los mismos enunciados rimbombantes de ayer: garantizar un enfoque de derechos, impulsar un acuerdo nacional para un buen gobierno, rediseñar la Secretaría de la Función Pública, Modelo Nacional para Investigar Delitos de Corrupción, enfrentar la corrupción en cadena Seguridad-Justicia, mejores contrataciones públicas y transparentes, y Criterios Generales de la Estrategia Anticorrupción.
¿Dónde hemos oído eso? ¿No sería en el período 2016-2021?
Porque se parece, y mucho, a aquellos planes de combate a la corrupción que anunciaba Corral con bombo y platillo en magnos eventos a los que invitaba a toda una cauda de personalidades del mundo de la política y la academia del país.
Mucho ruido y pocas nueces. El cuento ya lo conocemos: hay 47 personas sujetas a proceso penal por presuntos actos de corrupción, pero la gran mayoría no ha recibido sentencia condenatoria. Incluso, al menos uno, Christopher James Barousse, ya salió absuelto.
Todo esto, sin descontar que pesan varias denuncias por presuntos actos de tortura en contra de algunos de los procesados, razón por la cual está en curso un proceso penal en contra del “zar anticorrupción” de Corral: Francisco “Panchito” González Arredondo.
Ojalá y esta historia tenga otro final, pero para eso necesita empezar de otro modo. A ver si Sheinbaum experimenta en cabeza ajena y no repite la misma canción desafinada que cantó Corral.
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Los candidatos opositores tendrán que gastar muchísima suela si en verdad le quieren ganar votos a Morena en la alcaldía de Juárez
A dos meses de que se realicen las elecciones, las preferencias por la coalición que encabeza Morena están casi 30 puntos por encima de la coalición que lidera el PAN, junto al PRI y PRD, según los resultados de la más reciente encuesta de Rubrum.
La firma pone al candidato Cruz Pérez Cuéllar que busca la reelección, con un 54.8 por ciento de intención de voto, mientras que extitular de la Recaudación de Rentas, Rogelio Loya, alcanza apenas el 25.6 por ciento, en otras palabras, hay entre ambos una distancia de 29.2 puntos porcentuales.
Por parte de Movimiento Ciudadano, se encuentra la síndica con licencia Esther Mejía, con apenas un 4.6 por ciento; por cierto, a los muchachos de Rubrum se les patinó gacho la gráfica a la hora de publicar su ejercicio, ya que en la imagen colocaron a la primer Esther Mejía que les apareció en el Google, no la que busca aquí la alcaldía bajo las siglas de MC.
Un cuarto apartado da un 14.9 por ciento de personas que aún no se deciden por quién van a votar el próximo 2 de junio, es decir, hay el triple de indecisos que votos para doña Esther.
La encuesta fue realizada con 600 levantamientos, vía telefónica, de manera automática y aleatoria, en el municipio, el pasado 29 de marzo de 2024.
Así que muy difícil tarea a cuestas trae el panista, con todo y que Pérez Cuéllar ha estado en el centro de la polémica, por las múltiples denuncias de presuntos hechos de corrupción que lo involucran a él, y a varios colaboradores y exfuncionarios.
Todavía está por verse si la Fiscalía Anticorrupción resolverá o no sobre las carpetas de investigación vigentes, o pateará el bote para después de la jornada electoral, o incluso, hacia el infinito y más allá.
Lo que es un hecho, es que si los candidatos quieren aspirar a bajarle puntos a Morena deberán gastar mucha, muchísima suela para convencer a la población juarense.