EL SEGUNDO día de paro total en el sistema de transporte colectivo de Chihuahua capital, y tres si tomamos en cuenta la parte del viernes en que se suspendió parcialmente, tuvo colapsados a los capitalinos el fin de semana y empeorará este lunes, cuando se normalicen las actividades laborales, eso sin contar que al menos un tercio de los usuarios ya no están en movimiento por las vacaciones escolares.

AYER el secretario general de Gobierno, Mario Trevizo, se mantuvo inútilmente acantonado en su despacho del primer piso de Palacio, pues a pesar de las amenazas de que procederán legalmente contra los paristas, los choferes inconformes no cedieron en su estrategia de presión para que les paguen supuestos adeudos.

LA COSA sigue muy enredada, no solo por los problemas del Gobierno con los concesionarios, sino de estos como parte patronal de más 800 choferes de rutas alimentadoras y otros casi 200 operadores de la ruta troncal, manejada por la administración estatal.

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PARA BAJAR un poco el ruido en la transición, ayer el equipo de Javier Corral dio a conocer un oficio firmado desde el 30 de junio por el gobernador, César Duarte, donde le anuncia al “gobernador electo” que la transición por parte del gobierno estatal será dirigida por el secretario general de Gobierno, Mario Trevizo.

EN ESE MISMO tema, Corral anunció al régimen duartista que Víctor Quintana Silveyra formará parte de su equipo de transición, con lo cual le presta buen escudo por su participación en los disturbios en Palacio de Gobierno.

LO IMPORTANTE ES que Duarte reconoce a Corral como gobernador electo a pesar de la impugnación. Ojalá eso se traduzca en calma y resultados positivos para todos los chihuahuenses, especialmente para los habitantes de la capital que no hallan puerta de salida a su tormento diario por el pésimo Gobierno en varias materias.

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EN EL CENTRO del poder político del estado estallan todo tipo de conflictos, unos por falta de operación política del Gobierno saliente y otros porque se está dando en sentido negativo, en una especie de estrategia tendiente a dejar minado el terreno para cuando inicie el próximo Gobierno, si no funciona la impugnación al triunfo del gobernador electo Javier Corral Jurado.

SI BIEN Chihuahua tiene una dinámica y una lógica política propia, la entidad no es ajena a lo que sucede en el resto del país, porque ese tipo de estrategias se está dando de manera similar en otros estados donde el PRI perdió el poder en junio pasado.

EN VERACRUZ ya entró en acción el secretario de Gobernación para frenar a Javier Duarte, y la dirigencia nacional del PAN ya incluyó a Chihuahua y a la administración de César Duarte entre los frentes de resistencia al cambio político para proteger los intereses de los grupos de poder local derrotados en los comicios pasados, justo parte del objetivo del duartismo para obligar a la negociación.

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EL BAECISMO CONCRETÓ la cumbre sabatina con una comida y algunos discursos en su centro principal de operaciones, la región de Delicias. Los llamados centrales fueron en el sentido de que no es tiempo para aspirar a la dirigencia del PRI en el estado y permanecer en alerta máxima de los acontecimientos por venir.

EL ENCUENTRO y los mensajes principales fueron dirigidos por el patriarca del equipo y embajador de México en Costa Rica, Fernando Baeza Meléndez; el cierre fue dejado a Reyes Baeza, director nacional del Issste.

LA PRUDENCIA Y LA PACIENCIA son dos características esenciales del baecismo. No requieren hacer olas para regresar su influencia al tricolor chihuahuense, la que mantienen desde 1986. El duartismo quedó en flor de un día, el tetismo fue sepultado con varias lápidas de votos (el obsecado caudillsimo significó su propia muerte); se acabó el saulismo, murió el artemismo, así que solo queda esperar a que concluya el sexenio para colocar de nuevo las piezas en el nuevo tablero estatal… y nacional. Así es la personalidad baecista.

EN LA COMIDA destacó la humilde pero firme presencia de la excandidata derrotada a la alcaldía de Chihuahua, Lucía Chavira; no estuvo su marido, Marco Adán Quezada, quien ha intentado crear su propia marca Quezada–Eloy García–Heliodoro Araiza.

TAMBIÉN ESTUVO el exalcalde suplente chihuahuita, Alejandro Cano; el maestro cartógrafo político Mario Tarango; el bombero que tantísima falta le hizo a la actual administración estatal, Arturo Proal, y hasta la nueva integrante del equipo, Emma Saldaña, que no ha tenido clemencia de José Luis García ni porque compartieron la misma mesa familiar, las mismas anécdotas y hasta las mismas operaciones política.

NO PUSIERON los baecistas fecha específica para la nueva reunión, pero la sostendrán “en cuanto sea necesario”.

ALGUNOS DE LOS presentes en la comida hicieron cara de “what?” porque obviamente no es la característica del baecismo el estilo rudo (yo no soy Reyes Baeza, decía en su tiempo Duarte al iniciar su régimen), pero al menos dos personajes aprovecharon para sacar todo lo que traía su ronco pecho:

EL PRESIDENTE de la Junta Municipal de Agua en Ojinaga, Mucio Rey López, afirmó que si Duarte ha cometido irregularidades en el manejo del dinero, la primera dama, Berthita Gómez, ha ido más lejos (lo dijo con palabras bastante más fuertes e impublicables. Admitió que lo pueden despedir después del speach). Leonel “El Coco” Reyes Castro, el más temible mapache tricolor de los ochenta, se manejó en el mismo tono, aunque con otros temas.

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HASTA OIDOS mironianos han llegado versiones que hablan de un involucramiento militante del arzobispo de Chihuahua, don Constancio Miranda Weckman, en la sucesión de Rectoría de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH).

NO PUDO CONOCER este escribidor mayores detalles sobre esa participación, pero desde su confesionario escapó el dato sobre el interés del religioso en la elección de nuevo rector, fechada para agosto.

NO SABEMOS si Miranda Weckman traiga candidato o solo esté preocupado por el rumbo de la máxima casa de estudios hacia los próximos años, lo cierto es que busca saber por dónde va el relevo.

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EN RELACIÓN con el gabinete estatal de la nueva administración, se sabe que Eduardo Romero Ramos busca volver por sus fueros pero se hizo loquito durante la campaña electoral.

LALO FUE SECRETARIO general de Gobierno con Pancho Barrio. Mucho se habló en aquel tiempo de su origen priista y su adhesión casi juramentada en el juarense grupo de los filósofos de la construcción y el notariado, pero luego fue precandidato a la gubernatura por el PAN y hasta funcionario de primer nivel en el gabinete de Vicente Fox.

HOY, SE DICE, Pancho Barrio estaría metiendo el hombro para que regrese Lalo a la Secretaría de Gobierno. El otro mencionado para el delicado cargo es César Jáuregui Robles, exconsejero de la judicatura federal. Paco Molina sigue firme como fiscal general, pero se ha hecho del rogar. Arturo Chávez ha enviado mensajes de que sería él, pero la verdad es que nunca ha hecho clic con Corral, desde que le hacía la vida de cuadritos en el Consejo Político Estatal del PAN, cuando el gobernador electo era dirigente estatal de ese partido.

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CON LA RATIFICACIÓN del triunfo de los seis diputados electos del PAN de Ciudad Juárez queda completamente eliminada la posibilidad del todavía dirigente estatal, Mario Vázquez, de formar parte de la fracción parlamentaria del PAN en el Congreso del Estado y luego ser el coordinador.

LA IMPUGNACIÓN del PRI era el último aliento del dirigente panista para lograr este objetivo. Vázquez vive ya sus últimos momentos al frente del panismo chihuahuense, y nótese que no pierde únicamente la administración del Comité Directivo Estatal del PAN, sino el control de todos los proyectos azules que antes de la pasada elección tenía.

EL PODER de decisión que ahora tiene Mario Vázquez pronto será reducido a cero, las causas: contar ahora con un gobernador de su propio partido, un Congreso donde no tiene la mínima influencia y un partido al que no podrá seguir dirigiendo aunque quisiera. Es la suerte del de Santa Isabel, que al no haber acaparado la diputación plurinominal se queda con muy poca fuerza política.

ADEMÁS, LA estructura que habría armado en los últimos cinco años, sin desearlo, vino a hacerle el caldo gordo a sus aliados del Dhiac, quienes al final de sus dos periodos consecutivos como dirigente panista son los verdaderos ganones.

VÁZQUEZ SERÁ SUPLIDO en los hechos por quien antes combatió: el gobernador electo, que se convertirá en el primer panista del estado.

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POR CIERTO, quien resucitó ahora que el Tribunal Estatal Electoral ratificó el triunfo del PAN en los seis de los nueve distritos de Juárez es el presidente del Comité Directivo Municipal, Jorge Espinosa Cortez, en la búsqueda de usufructuar algo de la victoria de los diputados azules.

LAS IMPUGNACIONES habían infundido cierto miedo en los candidatos ganadores por los distritos 04, 05, 06, 07, 08 y 09, puesto que no habían asistido a la escuelita de formación que les proporciona su partido después de cada elección. Ahora, ya con menos preocupación, podrán ir a conocer los detalles de los emolumentos que les esperan.

CON ESTAS CONDICIONES los diputados electos tienen todas las posibilidades de poner en charola de plata las nuevas reformas que está planteando el próximo gobernador, Javier Corral, pero también pueden seguir en la misma dinámica de disputa en la que han estado inmersos los panistas durante décadas, por tratarse de grupos muy diversos y de origen distinto. Tienen todo en sus manos, solo la ambición por liderar al grupo parlamentario podría generarles las primeras fricciones.

ESPINOZA PRETENDE llegar ahí como asesor, mínimo.

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UN EXCELENTE FORO en esta frontera fue desaprovechado la semana pasada por las autoridades estatales, sobre todo las del área educativa; inclusive la nueva cabeza de la Dirección General del Colegio de Bachilleres, Fito Torres Medina, no acudió a las graduaciones de los siete planteles del Cobach y del SEA, de donde egresaron 5 mil 600 estudiantes.

EN AÑOS ANTERIORES el mismo gobernador César Duarte daba el mensaje de despedida a los jóvenes y a sus familiares que regularmente atiborran los gimnasios y cada lugar donde se celebran las graduaciones, este año no fue la excepción, sobre todo en el evento del Plantel 11, donde se graduaron 976 bachilleres.

PERO AHORA ni el gobernador, ni el secretario de Educación y Cultura, ni tampoco el director de los Bachilleres acudieron, Fito Torres acaba de tomar la estafeta que le dejó Alonso Duarte, el mismo que se vendía como el sobrino favorito del mandatario y quien no desaprovechaba escenario alguno para figurar para sacarse la foto y hacer como que hacía.